“Crazy Eyes” es una buena apuesta de la banda de Richard Patrick en que la banda ha sabido encontrar un equilibrio entre un rock industrial pesado y un rock más acústico que termina por mezclarse y desembocar en un disco puramente Filter en el que incluso encontramos temas que puede que se cuelen en las emisoras de rock

El nuevo trabajo de la banda de Richard Patrick explota como una bomba desde el primer minuto al último. Con su habitual sonido denso, “Crazy Eyes” no se anda con rodeos y ataca directo a la yugular con la agresiva “Mother E” y cierra con la acústica “(Can’t She See) Head of Fire, Part 2” dentro de un disco lleno de contrastes y giros sorprendentes.

Los de Cleveland ponen su rock industrial sobre la mesa con un redondo de composiciones bien maduradas y complejas pero que quizá pueda llegar a pecar de demasiado enrevesado en algunos momentos, sin embargo hay que destacar que el quinteto americano deja claro que saben golpear duro, y de qué manera.
Con una portada no recomendada para los más aprensivos, “Crazy Eyes” empieza como si de un matrimonio en rutina se tratase, literalmente a gritos. “Mother E” resulta un puñetazo en la mandíbula con la voz furiosa de Richard Patrick dirigiendo la locura controlada que conforman las guitarras espesas y una base rítmica que demolería un edificio con su rock industrial. Por si esto fuera poco el segundo corte, titulado “Nothing In My Hands”, ofrece cierto pesimismo en las letras demostrando que el industrial rock le sienta a Filter como anillo al dedo derrochando habilidad en la composición a base de una de las canciones más pegadizas del disco que, seguramente, se transformará en directo en una de las más coreadas de este nuevo álbum.
La voz afilada del ex-Nine Inch Nails no es más que un adelanto que precede a la potencia de la guitarra en “Pride Flag” haciendo que te sientas como si te hubiesen metido en una batidora y dentro de una lavadora en marcha todo a la vez. La canción se transforma con una parte más armónica y melodiosa a mitad del tema para romper en un solo de guitarra muy bien ejecutado por parte de Oumi Kapila a las seis cuerdas.

Otro de los cortes a destacar de “Crazy Eyes” es “Take Me To Heaven”. Si toda esta potencia rockera no fuese poca, “Take Me…” es uno de los cortes más elaborados sin duda alguna y parece hecho para que la base rítmica se luzca, destacando por supuesto el trabajo de Chris Reeve a la batería pero, sobre todo, el de Ashley Dzerigan a las cuatro cuerdas. El trabajo de ambos consigue que la base rítmica sea una columna vertebral de gran potencia en el que ha sido el single del álbum desde enero. Los cambios de ritmo y los punteos de guitarra le dan al tema cierto toque progresivo pero preservando el sello Filter en todo momento.
En contraste con temas tan agresivos, encontramos otros donde las partes melódicas y acústicas dominan, como en el caso de “Head of Fire”, “Under The Tongue” o la canción que cierra el disco, “(Can’t She See) Head of Fire, Part 2”, mientras que canciones como “Welcome To The Suck (Destiny Not Luck)” entrelazan las partes acústicas con el gran bloque de distorsión guitarrera que la banda impregna en sus temas.

“Crazy Eyes” es una buena apuesta de la banda de Richard Patrick en que la banda ha sabido encontrar un equilibrio entre un rock industrial pesado y un rock más acústico que termina por mezclarse y desembocar en un disco puramente Filter en el que, incluso, encontramos temas que puede que se cuelen en las emisoras de rock como es el caso de “Kid Blue From The Short Bus, Drunk Bunk”, con tintes más comerciales pero sin perder la esencia de la banda.

Grupo:Filter

Discográfica:Wind-Up Records

Puntuación:7

Canciones:

  1. Mother E
  2. Nothing In My Hands
  3. Pride Flag
  4. City of Blinding Riots
  5. Take Me To Heaven
  6. Welcome To The Suck (Destiny Not Luck)
  7. Head Of Fire
  8. Tremors
  9. Kid Blue From The Short Bus, Drunk Bunk
  10. Your Bullets
  11. Under The Tongue
  12. (Can’t She See) Head of Fire, Part 2

Año:2016-04-08

Votación de los lectores:5