Hardcore Superstar: C’mon Take On Me

Parece que cualquier bajón compositivo que haya tenido HARDCORE SUPERSTAR en su carrera está olvidado. Porque sí, los han tenido. Una manera sencilla de apreciarlo fue el recopilatorio que sacaron hace no mucho, sin apenas presencia de un par de discos. Pero es que desde su homónimo, su trayectoria ha estado en todo momento entre el notable y el sobresaliente, ya fuera en estudio o en directo. ‘C’Mon Take On Me’ es un ejemplo más, aunque ligeramente por debajo de lo facturado los últimos años.

Lo que sigo sin terminar de entender es esa intro que se han marcado, ‘Cutting The Slack’; sólo la aguanté la primera vez que me puse el disco, haciéndose los dos minutos eternos. De primeras es lo único negativo, ya que ese mal sabor de boca se olvida con el tema que da título al álbum. En su línea, rockero, pegadizo, corto y directo. Pronto nos damos cuenta de que los registros de Jocke Berg y sus líneas melódicas, junto a la guitarra de Vic Zino son los protagonistas sobre los que se sustenta este trabajo. Sin riesgos. De hecho, el primer single-adelanto era otra prueba de esa fórmula en la que se han convertido en maestros; ‘Above the Law’ tenía en su simpleza la manera efectiva de llegar al oyente, sin faltar esos coros típicos de sus compañeros que están llamados a realizar su público en la próxima gira. Entre medias de ambas, y para animar un poco el asunto, una más potente ‘One More Minute’, que jugando con los cambios se convierte en el primer tema remarcable del álbum.

Ese lado más crudo lo continúan después en ‘Are You Gonna Cry Now’, más rápida… pero ahí queda la cosa. Entre los demás cortes se mueven en parámetros recurrentes. Un baladón acústico como ‘Stranger Of Mine’ da paso a cantidad de medios tiempos. ‘Won’t Take the Blame’ viene dividida en dos partes, manteniendo un poco la chispa que habían encendido antes, y aunque intentan continuarlo en ‘Dead Man’s Shoes’, otra de las destacadas, se templan por completo con ‘Becaud of You’ y ‘Too Much Business’; una especie de “quiero y no puedo”, en el que se quedan a medio camino de conseguir transmitir puro rock and roll. Una extensa ‘Long Time No See’, con su punto sentimental, es la encargada de cerrar la obra.

Sin llegar a la altura de sus últimas obras, ‘C’mon Take On Me’ es un buen disco, una nueva excusa para que HARDCORE SUPERSTAR vuelva a su hábitat natural, que es la carretera. Sinceramente, me cuesta pensar que más de cuatro o cinco de las canciones que aquí presentan sean las que se queden en su set. Que no es por desmerecimiento de las que aquí nos presentan, pero es que tienen otras que son demasiado buenas, y las comparaciones en estos casos son odiosas.