Dredg: Chuckes and Mr. Squeezy

A día de hoy, y tras varias escuchas al nuevo trabajo de DREDG, me sigo preguntando donde está el grupo que me llamó tanto la atención con ‘El Cielo’. Hay grupos que buscan la experimentación como modo de evolucionar en un sonido distinto; a algunos les sale bien, y a otros mal. Todo varía dependiendo de si en esa evolución se nota la personalidad que una banda se va ganando con el paso de los años. Pero es que con ‘Chuckes and Mr. Squeezy’ DREDG se han vuelto un grupo lineal y monótono, con canciones que hacen que la escucha del disco relaje tanto que pueda servir para dormirte.

A favor tienen el sonido pulido con una producción bastante buena… para la que han acudido a Dan The Automator, productor japonés de hip hop. Algunos echarán en cara que el cambio del grupo al productor, pero no creo que sea el máximo responsable.

Han dejado el lado de rock alternativo para pasarse a un sonido ambiental casi pop, que tirara para atrás a la mayor parte de sus seguidores. Y eso lo dice alguien que no es cerrado de gustos, pero es que el chasco que me he llevado con este disco ha sido de campeonato. No sé si les habrán robado casi todas sus guitarras y por ello se han limitado a meter programaciones y bases en la mayoría de los temas, pero el resultado final estoy convencido de que no va a dejar indiferente a nadie.

‘Upon Returning’ es de los pocos temas que se salvan de la quema, algo más guitarrero y ameno de escuchar. Entre lo demás, poco que citar… porque casi cualquier tema que nombre, no va a ser para bien precisamente. La acústica ‘Kalathat’ por ejemplo sí tiene su encanto, una balada ambiente con sentimiento.Por lo demás, DREDG suenan en la actualidad a una especie de mezcla de unos RADIOHEAD venidos a menos con los ‘The Alchemy Index’ de THRICE. Carentes de chispa, sin sustancia y con poca personalidad con lo que nos tenían acostumbrados; hay grupos que se mueven en estos estilos con melodías electropop de una manera más natural y no se hacen aburridos de escuchar. Si al menos hubiera un tema que rompiera y se desmarcara de los demás, haría al disco algo mejor; pero no, la jugada no les ha salido del todo bien… Un disco para escuchar de fondo mientras haces otra cosa, sin prestarle mucha atención. Mucho adorno para unas composiciones que se quedan demasiado simples para lo que ha sido este grupo. Poco más que decir.