¿Hay algún disco capaz de provocar la histeria semejante y la controversia más absoluta que la “democracia china” de Ax-L-Roses? Nada más que más de 15 años esperando este momento, como si de una especie de SMILE (el disco perdido de Brian Wilson) se tratara.

Los Guns dejaron el testigo en los más alto con los dos USE YOUR ILLUSION, aunque el posterior THE SPAGUETTI INCIDENT fue una especie de bajón anecdótico. Versiones punk destinadas a avisar de que seguían vivos pero también muy indicativas de que algo en el seno de la banda no iba bien. Incluso Duff grabó muchas de las voces principales de los temas. Y nada más un directo y un grandes éxitos pero poco ruido y menos nueces. Esa banda de estadio que arrebató los corazones de toda una generación desaparecía en mil pedazos por mucho que en la mente de Axl todo continuase como si nada hubiera pasado.

Los discos en solitario de los protagonistas o agrupaciones como Velvet Revolver son una mera sombra de lo que fueron. La banda sonora de End of All Days fue un movimiento de peón que desató las iras de muchos fans. “Oh My God” dejaba entrever que el camino de Axl iba a sorprender poco gratamente a los más puristas.

Rumores, bailes constantes de formación, un guitrrista enmacarado con un bote familiar de Kentucky Fried Chicken por sombrero, retrasos maratonianos en conciertos, altercados y giras suspendidas alimentaban las suspicacias sobre un álbum, ya legendario, del que caían piezas a cuentagotas en sus directos.

Y llega el 23 noviembre de 2008, y con el disco un supuesto Dr. Pepper bajo el brazo para cada americano (recordad la publicidad de esta empresa de refrescos americana…) Llega por fin la democracia china y con ella seguirán corriendo ríos de tinta.

Primero hay que felicitarnos por el excelente estado vocal que atesora Axl en la grabación, lejos de sus últimas apariciones en directo o de su paricipación anecdótica en el último trabajo de Sebastian Bach (apenas apreciable). El mundo recupera a una de las voces del rock y sólo con esto hay que felicitarnos.

Pues bien, a pesar de que muchas de las grabaciones llevan escritas hace mucho la verdad es que suena todo fresco y atractivo. Evidentemente el sonido del grupo ha mutado y ya no hay ese característico rollo clásico pero se mantienen muchos clichés. La homónima “Chinese Democracy” abre fuego y mantiene bastante de los USE YOUR ILLUSION si bien hay algún sampleado discreto y las guitarras mantienen una afinación más grave. Pero el tema desprende Guns 100%, y es que la voz de Axl te devuelve al inicio de la década de los 90 y el trabajo en los solos mantiene ese rollo macarrilla, al igual que los coros.

“This I Love” va a ser de largo uno de esos temas que va a quedar. (Aviso, el final del disco es de lo mejor de la obra). Precioso inicio a balada orquestado con un Axl brillando sobre las teclas de Dizzy Reed. Conecta por las orquestaciones con la monumental “November Rain”.  Siguiendo en tiempos pausados encontramos otra preciosa composición como es “Catcher in the Rye” que parece compuesta después de haberse escuchado varias veces el NIGHT AT THE OPERA de Queen, barnizado por el estilo Gunner.

La producción del disco es absolutamente inmejorable y la cantidad de detalles como son los apoyos de cuerda, el sonido del piano o los mismos samplers se aprecian tan bien como el resto de instrumentos.  Más controversia causarán cortes como “Shacklers Revenge”, “Madagascar” o “IRS”, cercanas al “Oh My God”, aunque manteniendo el tipo, al igual que “Better”.

La tonada de “Street of Dreams” es preciosa y gustará a todos los degustadores de los USE YOUR… Más experimental, pero no por ello exenta de calidad es “If the World” combinando orquesta y samplers. Destacaríamos individualmente, Axl aparte, el enorme trabajo de Bumblefoot, Fortus y Robin Finck, que ciertamente no hacen que echemos de menos a Slash precisamente, si más no en disco…

En “There Was a Time” vas a disfrutar del excelente estado vocal del divo y de su voz absolutamente única. “Scraped” tiene una cadencia más netamente rockera pero desafortunadamente las guitarras suenan muy por debajo de las voces y efectos haciéndole perder mucha fuerza. La simplona y algo repetitiva “Sorry” queda salvada por esas inimitables voces dobladas de Rose y por sus recursos vocales. En otras manos podría ser considerado puro relleno.

“Madagascar” y la final “Prostitute” son un final templado inmejorable y toda una demostración de que W.A.R sigue manteniendo sus dotes de gran vocalista y excelente compositor. “Madagascar” posee fragmentos de discursos y entre ellos el de esa mítica peli de Paul Newman que servía para abrir “Civil War”.

Falta evidentemente un “Welcome to the Jungle” o un “You Could Be Mine”, velocidad e himno instantáneo que ciertamente ha dejado algo cojo al compacto, pero es innegable que la espera ha valido mucho la pena. Quizá haya que coger este disco como un trabajo en solitario de Axl bajo el nombre de Guns N Roses, pues sino el desengaño en muchos va a ser notable. Pero aparcando los viejos tiempos y analizándolo canción a canción hay que rendirse ante él, es definitivamente uno de los discos de la década, y ya no por calidad, sino porque va más allá de todo ello. Y es que son cinco lustros de espera…

Personalmente creo que el caso de este disco es muy similar al de Sebastian Bach. Ambos vocalistas han facturado sendos discazos, pero alejados de su estilo, adaptados a los tiempos actuales y que podrán convencer parcialmente a sus fans. Pero definitivamente la gente espera que vuelvan a retomar su camino con sus antiguos compañeros. Tiempo al tiempo… a pesar que Axl es un hueso difícil de roer.

Jordi Zelig Tàrrega

Grupo:Guns N' Roses

Discográfica:Interscope/Geffen

Puntuación:8.5

Canciones:

  1. "Chinese Demoracy"
  2. "Shacklers Revenge”
  3. "Better"
  4. "Street of Dreams"
  5. "If the World"
  6. "There Was a Time"
  7. "Catcher in the Rye"
  8. "Scraped"
  9. "Sorry"
  10. "Riad and the Bedouins"
  11. "IRS"
  12. "Madagascar"
  13. "This I Love"
  14. "Prostitute"

Año:2008