Avalanch: Caminar sobre el agua
Quiero empezar esta reseña dejando dos cosas muy claras. Primero, los discos en directo no son santo de mi devoción, y segundo, con AVALANCH no puedo ser imparcial, me tienen ganado el corazón desde hace mucho.
Comencemos, “Caminar Sobre El Agua” es el segundo disco en directo de los asturianos después de aquel añejo y de andar por casa “Días De Gloria”, suponiendo a la vez su tercer DVD en vivo, tras “Cien Veces” y “Lágrimas Negras”. Que quede constancia que esta nueva entrega no tiene nada que ver con todo lo anterior. Grabado en Julio de este mismo año en la Semana Negra de Gijón, “CSEA” es una apuesta rotunda, un paso más hacia delante, un lujazo para la vista y el oído. La presentación y el diseño son sublimes, el “setlist” escogido sensacional (aunque echo de menos mayor presencia de “Los Poetas”) y el sonido del CD y la imagen del DVD son brillantes.
Llega mi alegato. Sí, amo a AVALANCH. El nivel que muestran es sobresaliente, nadie nunca en este país ha volado tan alto en términos de composición, talento, instrumentación, producción, arreglos, magia… Rionda es un genio, no cabe duda, ninguna duda, un genio a la altura del que más. Lo tengo claro, si Alberto en lugar de haber nacido en el norte de este insigne país lo hubiese hecho en tierras escandinavas, centroeuropeas o latitudes norteamericanas, hoy en día sería en la práctica lo que es sin paliativos en la teoría, nada más y nada menos que una ESTRELLA DEL ROCK, sí, una autoridad de todo esto, sí, uno de esos personajes que decora las carpetas y habitaciones de millones de fans en todo el mundo. Alberto lo es todo, compositor único, instrumentista estelar y productor y arreglista de matrícula de honor.
Avalanch están en el mejor momento de su carrera, suenan en estudio como nunca y en directo muestran un rodaje, una compenetración y una precisión que te dejan con la boca abierta, y la mejor prueba de ello es este “Caminar Sobre El Agua”. Aquí van de menos a más. El inicio es algo frío, todo hay que decirlo, todavía con luz solar y con el público algo expectante, pero a partir de los tres primeros temas el nivel de compromiso y agitación del respetable ya alcanza cotas muy elevadas… Alberto como siempre concentrado, rostro serio, protagonista, con la profesionalidad al nivel que siempre ha mostrado. Ramón increíble, cada día canta mejor, más perfecto, su trabajo aquí es inmejorable, empastado y afinado, casi sin fallos, como si de un teclado se tratase. De verdad, espectacular. Enhorabuena Señor Lage. Lo de Marco es también un mundo aparte, él dice que le encanta como Scott Rockenfield hace sonar a Queensrÿche, pues yo tengo que decir que me encanta como Marco Álvarez hace sonar a Avalanch. Su calidad es innegable, pocos músicos, aquí y allá, rozan su nivel.
No se pueden destacar temas, pero sí hay momentos álgidos, como pueden ser “Niño” o “Juego Cruel”, o incluso el propio y olvidado “Torquemada”, con la banda y el público totalmente entregados a uno de los temas insignia de una toda una generación de fanáticos empedernidos de todo este “tinglado”, entre los que me incluyo. Poco más se puede pedir a un disco como este, gran sonido, repaso emblemático a toda su carrera, muy buen trabajo de cámaras, músicos impecables… Pero bueno, si hay que pedir se pide, y yo desde aquí pido humildemente que algún día rescaten y desempolven dos auténticos trallazos del más cristalino power metal, estoy hablando de “Tierra de Nadie” y “No Pidas Que Crea En Ti”. Ahí queda eso. BRAVO, RIONDA, BRAVO.
Jorge Domínguez
Grupo:Avalanch
Discográfica:Xana Records
Puntuación:8.5
Canciones:
- Angel de la Muerte
- Otra Vida
- Hoy te he vuelto a recordar
- Delirios de Grandeza
- Niño
- Papel Roto
- Aprendiendo a Perder
- Alas de Cristal
- Juego Cruel
- La Cara Oculta de la Luna
- Santa Barbara
- Aún Respiro
- Quién soy?
- Caminar Sobre Agua
- Pies de barro
- Alborada
- Lucero
- Xana
- Torquemada
- Semilla del Rencor
- Sombra y Cenizas
- Lagrimas Negras
- La prision de Marfil
Año:2008
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.