Dunedain: Buscando el Norte Parte 2

Gran segunda parte “Buscando el Norte” de los power-hard metaleros Dünedain, con el lujazo de poder bajarse de su web dicho trabajo completo, por la patilla. Si ya en su primera obra habían apuntado grandes maneras, ahora son culminadas con siete temas más, que incluso superan lo ya ofrecido en la primera parte.

Musicalmente tienen un deje muy powermetalero centroeuropeo y cierta aura optimista, aunque sin llegar a poderlos calificar de happy metal, pues el hard rock está también muy presente en sus esquemas. Uno de los grandes atractivos del grupo es el binomio a las voces formado por Tony Delgado y Jacin. Les da un factor distintivo evidente, mucho juego y calidad. En ningún momento intentan buscar agudos imposibles y no se les nota nunca forzados.

El single clarísimo es la excepcional “Fiel a mi libertad”, desarrollada en terrenos puramente hard rock, con un gancho y una fuerza tremenda, y un estribillo absolutamente hímnico que va a hacer de ella su himno definitivo y marcará el punto álgido en sus directos. “Buscando el Norte” demuestra todas las posibilidades y estilos del grupo en más de nueve minutos marcados por otro gran estribillo.

Producción (Karlos Creator), portada (Joel Martínez) y otros elementos accesorios están más que cuidados. Destaca muy favorablemente el formato EP y el mostrar sólo siete cortes, pues muchas veces las bandas que empiezan se entestan en dar cabida a todos y cada uno de los temas que disponen, y eso, es algo que muchas veces suele ser contraproducente. Siempre es mejor dividir y elegir, pues siempre un tema puede hacerles llegar más arriba que un disco de 14 canciones.

“Mi alma sigue en pie” se mantiene en la senda power, a doble bombo, con gancho y con unos coros muy trabajados y efectivos. Podríamos comparar dicho tema con Ankhara. “La tierra de los sueños” nos muestra a la banda a medio tiempo, con un bajo marcado y presente, aunque en la recta final quizá abusen en exceso de repetir el estribillo. “No perder la Fe” recupera el doble bombo y la velocidad y “Sólo un momento” los devuelve a los tiempos más pausados en los que se desarrollan tan bien como en los más rápidos.

Dünedain no son ningunos novatos en esto y se nota, demuestran ideas y objetivos claros, y, en su estilo, han firmado uno de los mejores discos del género en el último año. Esperemos que las oportunidades que se les brinden estén a la altura del disco y que puedan demostrar su valía. Su gira es extensa y ambiciosa, así que como se suele decir… parece que van a por todas. Muy recomendados. Por cierto, en cada concierto regalarán el nuevo disco a sus asistentes. Iniciativas así se agradecen.