Judas Priest: British Steel – 30th Anniversary Deluxe Edition

Escuchar un disco como “British Steel” es, sencillamente, escuchar el momento exacto en el que JUDAS PRIEST dejaron de ser una banda de heavy metal para pasar a convertirse en una enorme banda de heavy metal. No quiero decir que “Sin After Sin”, “Sad Wings Of Destiny” y demás no sean buenos discos (Dios me libre) pero “British Steel” es el epítome de todo lo que significan JUDAS PRIEST para el mundo del metal. La actitud, la vestimenta, la música, las letras, la portada… ese disco fue una auténtica declaración de guerra que dio el disparo de salida a una década (la de los 80) en la que PRIEST reinaron como pocos.

Grabado en los Tittenhurst Park Studios de John Lennon, “British Steel” tiene una importancia histórica que no se ha visto disminuida con los años. Es más, el set en directo de la banda sigue tomando prestados de ese disco al menos cuatro o cinco temas en cada show. Treinta años después tiene lógica, pues, que se celebre la importancia de un disco tan capital para la banda británica. Rememorar “Rapid Fire” , “Steeler”, “The Rage” o “Grinder” es toda una experiencia, especialmente tras la remasterización a la que se han sometido las pistas originales del disco.  No cabe duda de que el sonido que consiguieron Tipton y Downing en sus guitarras por entonces ha marcado el resto de su carrera. El tono es perfecto, el tono idiosincrático de PRIEST, con unos solos perfectos donde no sobran ni faltan notas en ningún momento.

La cantidad de clásicos que saldrían indemnes de éste disco tras el paso de treinta años es sorprendente. “Breaking The Law” sigue siendo el puntal de los conciertos de PRIEST en la actualidad, los dos minutos y medio más intensos del show. “Living After Midnight” sigue siendo el mejor fin de fiesta, gamberro y chulesco, divertido pero sin perder la actitud heavy que hizo famosos a estos obreros del metal. “Metal Gods” es poco menos que una amenaza velada, uno de esos temas marciales que te siguen haciendo poner el puño en el aire… No hay palabras para describir cada sensación aparecida tras escuchar de nuevo este clásico.

Obviamente, una reedición del disco sin más no habría tenido demasiado éxito comercial. Es por eso que se han incluído un CD y DVD en directo grabados durante la gira conmemorativa que tuvo lugar el verano pasado en Estados Unidos. Además de la totalidad del disco, podemos escuchar y ver clásicos como “The Ripper”, “Hell Patrol”, “Victim of Changes”, “Freewheel Burning”, “Diamonds & Rust” y la infaltable “You’ve Got Another Thing Coming”. Casi nada. La única pega es que el sonido del público en el directo es tan absolutamente falso como en aquel mítico “Priest…Live!”. Y si no escuchad como apenas se entiende nada en el grito de “you don’t know what is like!” en medio de “Breaking The Law”. Lo han intentado, pero se nota mucho que no es real.

Un genial recuerdo del pasado mientras Priest preparan una nueva entrega discográfica.