Parecía que Zakk se estaba agotando con Black Label Society, pero recuperar este viejo proyecto le ha hecho recargar las pilas y demostrarnos a todos que Wylde es mucho Wylde. No cabe duda de que tras este pequeño impasse acústico cogerá a Black Label Society con muchas más ganas.

Para toda su imagen de tío duro y ultra-heavy, Zakk Wylde tiene una aptitud más que probada para llevar su música a terrenos melódicos e instrumentalmente suaves. De la misma manera que el fallecido Gary Moore sorprendió a todo el mundo cuando sacó el blues que llevaba dentro, Wylde embelesa cuando saca de su guitarra a los Allman Brothers, a Neil Young y a Lynyrd Skynyrd. Influencias que, paralelamente, uno puede observar en la música de Black Label Society, aunque bajo un muro de distorsión suelen quedar mucho más difuminadas.

En “Book of Shadows II”, Wylde vuelve a recuperar la idea que ya puso en práctica en 1996: un disco acústico de temas melancólicos, sureños y más arriesgados que lo que suele hacer en Black Label. No cabe duda de que Black Label se han convertido en una especie de maquina de hacer discos y girar una vez que Zakk dejó la banda de Ozzy Osbourne. Algo que ha provocado que los últimos dos discos hayan sido ciertamente mejorables y faltos de la inspiración de “The Blessed Hellride”, “Shot To Hell” o el debut “Sonic Brew”. Pero en “Book of Shadows II” Zakk ha sacado lo mejor de si mismo: suena sentido, inspirado y emotivo. “Lost Prayer”, el cuarto tema, es todo un ejemplo de lo que podemos encontrar a lo largo del disco. Calculados arreglos acústicos, una capa de Hammond y un solo eléctrico al más puro estilo Zakk para no alienar a quienes quieren algo de distorsión.

La tónica general del disco es la de temas relajados, sombríos en lo lírico (“Tears of December”, “Sorrowed Regret”, “Darkest Hour”) pero muy apetitosos desde la perspectiva melódica. “Sleeping Dogs”, el primer single, es otro ejemplo perfecto. Puentes y estribillos que incitan a unirse en coro pero sin estridencias ni ninguna nota que no pertenezca. Incluso la voz de Zakk suena mejor en esta tesitura que en su banda principal, sin esfuerzos innecesarios y arrastrando versos por encima de la música como si no pudiesen andar por si solos. Música ideal para tocar en el porcho de tu casa de montaña mientras un San Bernardo de 60 kilos reposa a tus pies, vaya.

Parecía que Zakk se estaba agotando con Black Label Society, pero recuperar este viejo proyecto le ha hecho recargar las pilas y demostrarnos a todos que Wylde es mucho Wylde. No cabe duda de que tras este pequeño impasse acústico cogerá a Black Label Society con muchas más ganas.

Grupo:Zakk Wylde

Discográfica:Spinefarm

Puntuación:8

Canciones:

  1. Autumn Changes
  2. Tears of December
  3. Lay Me Down
  4. Lost Prayer
  5. Darkest Hour
  6. The Levee
  7. Eyes of Burden
  8. Forgotten Memory
  9. Yesterday's Tears
  10. Harbors of Pity
  11. Sorrowed Regret
  12. Useless Apologies
  13. Sleeping Dogs
  14. The King

Año:2016-04-17

Votación de los lectores:5