Han venido para quedarse, y mientras sigan gustando tenemos lobo y crucifijo para rato. Esperemos que una vez consolidados, intenten, en la mesura de lo posible, dar pequeñas variaciones a su apuesta.

Ya avisamos en 2009 que esta gente iba realmente en serio a pesar de que bordeaban deliberadamente la parodia. Ellos, juntamente con Sabaton, han sabido tomar el testigo y llevar al power metal de voces agudas, teclados rimbombantes y estribillos de puño en alto hacia algo más directo, divertido y tomando como base el power más de la escuela Grave Digger o Iron Savior. De voces más graves y guitarras y teclados solistas menos protagonistas y más contundentes y orientados hacia el tema en si. Puede que no superen el maravilloso “Bible of the Beast” pero sí que estamos ante otro paso hacia delante siendo un perfecto continuador de “Preachers of the Night” y “Blood of the Saints”. Con el tiempo han ido perdiendo esa irreverencia en los títulos y parece que intentan desmarcarse del cachondeo evidente.

Van a la caza del single en cada disco y sus estribillos contagiosos empapados con ese teclado de iglesia que acompaña las tonadas son infalibles. Inmediatos, contundentes e irresistibles, pero para algunos también infantiles y bastante manidos. Imposible no sucumbir ante trallazos como “Blessed and Possessed” o la genial “Armata Strigoi”. Perfectos ejemplos del sonido de este combo alemán con cantante rumano al que le encanta indagar en el folklore de los Cárpatos. “Higher than Heaven” es otro gran ejemplo de la fórmula que siguen y mantienen. Riffs sincopados con el envolvente teclado de Falk Maria y un Attila Dorn que brilla en todo lo alto. Si algo han conseguido es que cuando suenan, tienes claro que se trata de Powerwolf. “Army of the Night” es el single y ya la hemos visto en directo. Puño en alto y diversión a la altura de “Sanctified with Dynamite” o “We’re the Werewolves of Armenia”.

En “Christ and Combat” hay unas guitarras mucho más Helloween buscando más complejidad a su fórmula demostrando que Charles y Matthew Greywolf pueden dejar grandes detalles técnicos. “Sanctus Dominus” juega con otro de sus tópicos favoritos: la Iglesia. Otra vez gran protagonismo de teclado y coros en los estribillos para dar solemnidad. La verdad es que el nivel general es bastante alto y casi todos los cortes pueden valer para el directo, como “Sacramental Sister” o “Dead Until Dark”. El poso operístico de Attila sale a relucir en cada tema y es la clave del combo, algo apreciable en la inspirada y pegadiza “All You Can Bleed”. Se despiden con otra buena dosis de lo mismo en “Let there Be Night”, aunque a medio tiempo y con espacio para que teclado y batería marquen algo más épico jugando con la velocidad y la intensidad. Un tema en el que puedes ver por qué Attila es un cantante diferente y especial.

El gran problema de esta banda es el mismo que el de Sabaton: han encontrado la fórmula y están dispuestos a repetirla hasta que se les rompa el juguete. Mientras tanto vamos a disfrutar de un grupo que sabe jugar con temas directos, entretenidos y cortos. Sus shows con pintura y elementos Shock Rock son el otro plus con el que han sabido jugar. Han crecido muchísimo desde que les viera en la carpa de Wacken presentando “Lupus Dei” y en el que estaban realmente verdes, tirando de mucha parafernalia extramusical. Han venido para quedarse, y mientras sigan gustando tenemos lobo y crucifijo para rato. Esperemos que una vez consolidados, intenten, en la mesura de lo posible, dar pequeñas variaciones a su apuesta.

Grupo:Powerwolf

Discográfica:Napalm Records

Puntuación:8

Canciones:

  1. Blessed & Possessed
  2. Dead Until Dark
  3. Army Of The Night
  4. Armata Strigoi
  5. We Are The Wild
  6. Higher Than Heaven
  7. Christ & Combat
  8. Sanctus Dominus
  9. Sacramental Sister
  10. All You Can Bleed
  11. Let There Be Night

Año:2015-07-17

Votación de los lectores:5