Katra: Beast Within

Cuando parecía que el metal sinfónico con aires bombásticos y con cantante femenina al frente estaba más que reinventado y que voces como las de Tarja Turunen, Floor Jansen o Simone Simons previsiblemente no iban a tener rival dentro de un saturado mercado metálico-sinfónico, aparece Katra Solopuro – exótico nombre – y desembarca desde Tampere (Finlandia) para desmontar esta teoría y poner un punto más de competencia dentro del competitivo ranking vocal.

La historia de esta cantante arranca desde el mismo punto del que partió el ahora estrella nacional y ganador del Operación Triunfo finlandés, ARI KOIVUNEN, o tantos otros del país de los mil lagos. Y si no miren a los actuales LORDI. A través de un concurso televisivo que ofertaba una plaza para representar a la nación en el festival de Eurovisión, KATRA se hizo famosa entre el personal metalero del país y fue así como editó bajo el auspicio de un sello con el potencial multinacional de Edel, el que fuera su álbum homónimo de debut en el año 2007. Tan sólo le precedieron un par de singles en 2006 y 2007 y ya teníamos a una nueva estrella brillando en el firmamento escandinavo.

Fue entonces cuando la maquinaria del sello austriaco Napalm Records se puso a funcionar y cuando uno de sus avispados cazatalentos decidió licenciar una versión internacional de dicho álbum para el mercado europeo y norteamericano.

Es así como nos llegan estos doce temas remozados y adaptados a las necesidades del seguidor base de metal, que disfrutará con buenos riffs de guitarra, atractivos pasajes melódicos y una voz de ensueño personificada en la pelirroja Katra.

Hay muchos detalles que enriquecen este “Beast Within”; desde pasajes arábigos en temas como “Forgotten Bride” al más puro estilo AFTER FOREVER ; hasta samplers y pianos en otros como “Mistery” o “Scars in my heart”; o elementos folclóricos en cortes como el de apertura, titulado “Grail Of Sahara”.

El quinteto sinfónico tan pronto recuerda a bandas como MIDNATTSOL, como pasa a terrenos dominados por los antes mentados AFTER FOREVER, sin dejar a un lado las influencias de otras formaciones como EDENBRIDGE. Y todo eso con un halo muy personal y un toque muy característico de esta cantante de clásico que un  buen día decidió aplicar sus conocimientos de piano y de canto para aventurarse en el siempre arriesgado mundo de la música.

En definitiva, un álbum que abre un poco el espectro de bandas que juegan en una misma división dominada por el mismo trío de ases. Ni llega a ser gothic metal 100%; ni se trata de metal sinfónico en su totalidad. El caso es que apuntan buenas maneras y eso, hoy por hoy, es lo más importante.