Vendaval: Arba’a
VENDAVAL son la banda que se forma a partir de los restos de aquellos infames NORTHWIND que salieron en pleno apocalipsis del power metal de principios de milenio. NORTHWIND consiguieron vender varios miles de copias de sus discos de entonces, consecuencia del gran momento que vivía el género, pero posiblemente podrían haber vendido miles de copias aunque hubieran hecho versiones powermetaleras de las cortinillas del Telediario de TVE. Era la época que era y el criterio en las discográficas era el que era: busca una banda de power que te venda 5000 copias y explotalos todo lo que puedas. Le paso más adelante a otros como RAIN y fue la tónica de aquella época. Como la prima de riesgo sirve para que los tiburones financieros ganen dinero apostándolo todo a la caída de un país para llevarse los réditos, las discográficas hacen exactamente lo mismo con las eclosiones estilísticas. Por suerte, NORTHWIND supieron reconvertirse en una propuesta mucho más trabajada, honesta y musicalmente decente cuando dieron forma a VENDAVAL, quienes cumplen en la actualidad diez años en activo. Parece una chorrada pero no lo es: aguanta una banda durante diez años en este panorama. Eso si que tiene mérito, no hacerlo en el 2001…
Con su décimo año en activo y tras unos cuantos cambios de formación que han dejado solo a Fernando Argüelles y Txema Trinidad como únicos vestigios de NORTHWIND, VENDAVAL nos dan su cuarto disco, demostrando que no se agotan las fuerzas. Cuatro discos en diez años, con la que está cayendo, es un ritmo muy digno y la banda consigue hacer trabajos inspirados, sin desmarcarse mucho de su heavy metal de la vieja escuela. Es decir: agudos ocasionales, punteos staccato por un tubo, barridos aquí y allá para no ir de virtuosos en exceso, dobles bombos medidos y sin excesos para no repetir errores del pasado, variedad de tesituras de un tema a otro para no reiterar…
“Buscando una Señal” es el único tema que recuerda a su encarnación previa, pero lo demás, como “De Corazón” o “Mar adentro” son buenos temas de heavy metal a la vieja usanza con elementos ocasionalmente originales, como el acordeón en este último. El toque folkie, con el ritmo en ternario, le da una vuelta de tuerca interesante a la tónica general del disco. No obstante, es cuando se van por derroteros más previsibles y clásicos, donde mejor lo hacen y más efectivos son, como “Todo por Nada”, que tiene un toque más hard rock y marca otro puntillo diferencial con el estilo habitual de la banda. Y para que no se diga, el doble bombo lo invade todo en el gran cierre, la acelerada “No Sentiré Pena Por Ti”. La voz de Txema Trinidad en ocasiones no es perfecta, pero es muy consistente, teniendo en cuenta la variedad de tonos a la que se enfrenta dentro de una misma canción. No obstante, el alma de la banda es el dúo de Andy Florez y Nathan Cifuentes, que con sus dibujos de guitarra adornan la mayoría de canciones.
Están en un buen momento y se les ve musicalmente motivados. Y eso no siempre es fácil cuando has tocado ciertos niveles y vuelves nuevamente atrás.
Sergi Ramos (sergi@themetalcircus.com)
Grupo:Vendaval
Discográfica:Leyenda Records
Puntuación:8.1
Canciones:
- Arba’a
- El Condenado
- Mi Compasión
- Tras El Diván
- Buscando una Señal
- De Corazón
- Eternamente
- Prisionero
- Mar Adentro
- Las Esquinas del Tiempo
- Todo por Nada
- No Sentiré Pena por Ti
Año:2012
One pingback/trackback
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.