No decepcionará a los fans de Anvil y para un servidor es de lo mejor que han sacado desde “Speed of Sound”. Pueden ser algo ceporros, monolíticos y repetitivos, pero tienen toda la gracia intacta y suenan mejor que nunca.

Entiendo que haya mucha, muchísima gente, a la que Anvil le parezca una banda menor o que no le atraiga lo más mínimo su propuesta, pero son especiales y únicos. Quizá ahora lo son más tras su célebre documenta en el que Sacha Gervasi nos contaba las desventuras cotidianas de un combo que tiraba de pasión, autenticidad y poco más. Yo puedo decir que les he visto antes y después del documental y que en directo nunca me han terminado de convencer, pero colecciono sus discos y siempre les tendré un cariño especial. Son unos supervivientes pues curiosamente siempre poseyeron un reducto de fans acérrimos que les han reivindicado en su larga travesía por la oscuridad. “Anvil Is Anvil” sigue reivindicando lo que son, aunque algunos les verán cafres y otros auténticos. Lo que sería mentira es llegar a afirmar que Anvil son malos, cosa que he llegado a leer en “alguna web”.

De todas formas sigue siendo duro escuchar temas como “Siren of the Sea” “Plenty of Power” 2001) y no creer que estamos ante una parodia. No hay grandes experimentos esta vez, pero sí que es uno de sus discos más directos, amenos y sin perder ni una de las credenciales que les han hecho tan reconocibles. Sorprende el inicio marinero-pirata de “Daggers and Rum”, disfrutando de una producción perfecta y a base de coros funcionales y una línea vocal sin pretensiones. Riff entretenido y detalles de bajo notables por parte de Chris Robertson. Vuelven a su terreno de confort en “Up, Down, Sideways”, otra vez con sonido plenamente reconocible y destacando, como siempre, Lips a la voz y guitarras y Robb Reiner a la batería. Estribillo facilón pero a altas revoluciones y con deje muy melódico. Medio tiempo machacón pero algo visto ya es “Gun Control” y sorpresa relativa en “Die for a Lie” y el bonus Never Going to Stop” en el que parecen jugar a ser Motörhead con excelentes resultados. En la primera puedes comprender por qué Reiner es un referente a las baquetas y en la segunda disfrutar de su faceta más netamente rock n roll.

De entre lo mejor del disco está “Runaway Train”, de estribillo absolutamente pegadizo y guitarra solista constante aunque algo típica. “Zombie Apocalypse” es uno de sus habituales medios tiempos machacones que puede funcionar perfectamente en directo. “Ambushed” tampoco decepciona siguiendo la tónica de no llegar a los cuatro minutos de duración, con bonitas demostraciones de potencia y control total de Robb a la batería. Otra típica y tópica pero que mantiene su gracia es “Fire on the Highway”, y “Run Like Hell” le sigue a la zaga, con todas las credenciales que todos conocemos de Anvil. Dos cosas más a destacar: la portada, para muchos horrible, de Robb Reiner, para mi ideal y original y la inmensa producción del disco.

No decepcionará a los fans de Anvil y para un servidor es de lo mejor que han sacado desde “Speed of Sound”. Pueden ser algo ceporros, monolíticos y repetitivos, pero tienen toda la gracia intacta y suenan mejor que nunca. Anvil es un grupo en el que puede que cueste horrores entrar, pero siempre son divertidos y ante todo auténticos. Puede que a día de hoy vendan más camisetas que discos y espero que algún día, salvando las distancias, sean como una especie de Ramones del speed metal. Aguardamos que en su próxima gira con Udo nos demuestren de una vez por todas lo que esperamos de ellos sobre escena. Son la banda más clásica de speed metal y una de las más cool de todo el planeta.

Grupo:Anvil

Discográfica:Steamhammer Records

Puntuación:7

Canciones:

  1. Daggers and Rum
  2. Up, Down, Sideways
  3. Gun Control
  4. Die for a Lie
  5. Runaway Train
  6. Zombie Apocalypse
  7. It's Your Move
  8. Ambushed
  9. Fire on the Highway
  10. Run Like Hell
  11. Forgive don't forget
  12. Never Going to Stop (bonus track)

Año:2016-02-26

Votación de los lectores:5