Anneke Van Giersbergen: Symphonized

La cantautora neerlandesa Anneke Van Giersbergen vuelve al panorama musical con Symphonized, un disco recopilatorio en vivo en el que repasa su carrera musical y su paso por las bandas en la que ha estado o colaborado. Apoyada musicalmente por la Residentie Orkest The Hague, Anneke da una vuelta a 11 de sus temas más destacados en un álbum que os resume Cristina Gutiérrez.

‘Symphonized’ es el resultado de 25 años de trabajo en los que Anneke ha vivido etapas como solista y como miembro de varios grupos. Pasar a cantar esas canciones con el apoyo de una orquesta puede tener, sin duda, un resultado espectacular. Gracias además al trabajo del director Arjan Tien, podemos disfrutar oyendo como los solos de guitarra se vuelven violines, o como se juega con la variedad de instrumentos que componen la sinfónica, además de la inconfundible voz de Anneke.

Voz hiperbolizada

El disco arranca con «Feel Alive», un tema de la etapa solista de Anneke. Desde el primer momento, está claro lo mucho que se complementan la voz de la cantante y la orquesta. El corte de la canción original es parecido a la versión de ‘Symphonized’ (2018), pero el hecho de que las cuerdas pasen de ser guitarras a ser violines, violas y contrabajos, genera un resultado más grandioso. Además, la sinfónica le hace totalmente justicia a la voz de Anneke, que resulta hiperbolizada. Al tener una orquesta como apoyo, se engrandece su voz; una voz que ya de por sí tiene mucha fuerza y es muy expresiva.

Esta dinámica se repite en el cuarto, el quinto, el séptimo y el décimo tema; «Two Souls», «When I Am Laid In Earth», «Zo Lief» y «Forgotten», respectivamente. En «Two Souls», Anneke se sirve solo de una guitarra acústica acompañada de los instrumentos de cuerda de la orquesta. Esto no hace otra cosa que potenciar la sonoridad de la canción, aunque también la convierte en, quizás, el tema de ‘Symphonized’ que menos varía respecto a la canción original. Justo esta canción no tiene tanto juego como otras, que sí se podrían haber aprovechado mejor.

En «When I Am Laid In Earth» queda demostrada la calidad vocal de Anneke. Solo con el acompañamiento de las cuerdas y de una arpa, luce en todo su esplendor el gran registro vocal que posee. «Zo Lief», por su parte, se inicia con un piano, buscando intimidad. Se tarta de un corte inédito de ‘Symphonized’, siendo doble novedad porque es la primera vez que Anneke canta una canción en su idioma nativo como solista. Un tema íntimo y cercano que habla sobre el apego y el saber dejar ir, y para el cual se inspiró en su experiencia como madre.

«Forgotten» también empieza con un piano, al que se le suman rápidamente los instrumentos de cuerda y viento. Pero otra vez, vuelve a surgir el mismo problema que con «Two Souls»; la variación respecto a la canción original es ínfima. Y la verdadera gracia de ‘Symphonized’ es poder escuchar en orquesta canciones hechas para tocar con una banda (y que a su vez, representasen la carrera musical de Anneke). Por desgracia, la neerlandesa patina en la elección de estos dos temas.

Imágenes acústicas

El segundo tema, «Amity», empieza con los sonidos graves de los instrumentos de cuerda, haciéndonos reconocer fácilmente este tema de The Gathering. La cuerda y el aire adquieren protagonismo, ya que se fusionan para crear una imagen acústica ideal para la voz de Anneke. La sinfónica juega mucho con la idea de crear estas imágenes acústicas, siendo este uno de los aspectos del disco que más interesantes me parecen.

«Your Glorious Light Will Shine», la tercera pista, se inicia con mucha fuerza, una fuerza que enfatiza a lo largo de la canción gracias al sonido de las trompetas. Los instrumentos de aire y de percusión se llevan prácticamente todo el protagonismo en esta pieza. Se puede apreciar una batería, que marca mucho el ritmo y juega con varios redobles. Además, como apunte, en la canción original Anneke hace una segunda línea con su propia voz. En esta versión de ‘Symphonized’, la segunda línea se ve sustituida por los instrumentos de aire.

“Travel” se introduce con un primer jugueteo de los instrumentos, recreando los sonidos que se escuchan al inicio de la canción original. Este pequeño detalle deja clara la gran calidad de la Residentie Orkest The Hague. En este sexto corte se vuelve a jugar con la fuerza de las cuerdas, acompañando siempre fielmente a la voz de Anneke y creando, otra vez, una imagen acústica muy cuidada.

Sonidos épicos, como una banda sonora

“You Will Never Change”, “Freedom – Rio” y “Shores Of India” (octava, novena y onceava pista, respectivamente) son con diferencia los temas más fuertes de todo Symphonized. Se juega con sonidos épicos y cuidados, como si de una banda sonora se tratase. La voz de Anneke van Giersbergen queda ligeramente relegada a un segundo plano en algunos momentos, pero de forma justificada.

Hablando más en concreto, la “You Will Never Change” de Symphonized varía mucho respecto a la canción original, y con un resultado más que positivo, con un trabajo espectacular por parte de la sinfónica. Es, sin duda, una de las mejores piezas del disco. En el estribillo de “Freedom – Rio”, la voz de Anneke y la sinfónica se disputan el protagonismo. La potencia vocal de la cantante es enorme, pero la majestuosidad de las cuerdas de la orquesta no se queda atrás. Esto resulta en una pieza muy cuidada y elaborada, convirtiéndose en incluso mejor que la original. Por último, la mágica “Shores Of India” cierra el concierto por todo lo alto con unos toques orientales que no se pierden al ser tocada por una orquesta. Una pieza atrevida en la que la sinfónica se sirve de palmadas para dar fuerza a la percusión.

Novedades y alguna mala elección

En definitiva, ‘Symphonized’ es un disco que versiona diez (más una canción inédita) de los éxitos de Anneke Van Giersbergen con más acierto que desatino. Aun así, resbala en la elección de algunas canciones, que no acaban de aprovechar al máximo la oportunidad de tener a una orquesta sinfónica al cargo. El balance en general es bueno, con sorpresas como “Zo Lief” y con arreglos musicales tan cuidados como los que vemos en «Your Glorious Light Will Shine» o “You Will Never Change”.