Parece que Olaf Hayer se ha decidido a probar suerte por su cuenta. Quien ya se hiciera un nombre bajo la subordinación de Luca Turilli, cuando Rhapsody estaban en la cresta de la ola, se ha unido a Ronny Milianowicz (exfundador de Sinergy y batería) y ha montado estos Dionysus. No os engañaré, tenía claro que si Hayer formaba banda apuntaría directo hacia el power metal melódico centroeuropeo guardando más similitudes con su trabajo en Luca Turilli que con los cristianos Treasure Seeker.

La banda lleva trabajando desde 1999 y se han marcado un disco debut calculado al milímetro y con una retahíla de singles claros para todos los gustos. No hace falta decir que quien esté cansado del estilo no hace falta que ni se acerque al CD pues va a encontrar la enésima intentona de erguirse como los nuevos Helloween. La inevitable comparación con Luca Turilli es más que obligada. Hayer, bajo el nombre de la divinidad griega de la fiesta y el desenfreno, se ha despojado de toda la compleja orquestación y el colorido de sus obras con el italiano. En Dionysus hay una coherencia compositiva bastante compacta que hecha raíces a los obligados Helloweeen pero que también incorpora una fuerte influencia de bandas que combinan el sonido clásico con toques más hard y no se empeñan en trabajar sobre el típico patrón de doble bombo incesante y a una misma velocidad. En “Bringer Of War” puede adivinarse que Masterplan han abierto una puerta por la que muchos van a asomarse. Hímnica, con protagonismo de la base rítmica, aunque es la garganta de Hayer la que brilla una y otra vez. “Anima Mundi” y “Divine” ya os recordarán más a sus obras con Turilli. Singles claros en los que el teclado resulta clave y con un notable alto en cuanto a composición. La etiqueta de happy metal se acentúa en los coros aunque no llega a extremos de Edguy o Freedom Call, “Closer To The Sun” sería uno de los ejemplos más claros. El sonido del que goza el álbum es sencillamente perfecto así como la labor del resto de músicos de los que hay que resaltar al guitarrista Johnny Öhlin y al teclista Kaspar Dahlqvist (exMalmsteen). “Forever More” tiene más de villancico que de balada heavy y es sin duda uno de los momentos más bajos del disco. Más interesante resulta “Heart Is Crying” a base de un gran estribillo y un riff notable instalado en un medio tiempo resultón. Evidentemente el single claro puede que les abra más de una puerta pues no han apostado por el típico corte power de estribillo pegadizo. “March For Freedom” es un medio tiempo hímnico y elaborado apto para todos los públicos.

No está mal. La verdad es que dentro de las limitaciones con las que cuenta este género y a sabiendas de como está de concurrido y trillado el patio del power melódico es bienvenido un producto como Dionysus. Son candidatos a afianzarse junto a bandas como Freedom Call, Thunderstone y demás por su accesibilidad, melodía y calidad, pero volvemos a lo de siempre: más de lo mismo, bien hecho, pero más de lo mismo.

Jordi Tàrrega

Grupo:Dionysus

Discográfica:Afm Records

Puntuación:7

Canciones:

    1. Divine
    2. Bringer Of War
    3. Anima Mundi
    4. Heart Is Crying
    5. What
    6. Eyes Of The World
    7. March For Freedom
    8. Closer To The Sun
    9. Forever More
    10. Paradise Land

Año:2004

Votación de los lectores:8