Amplifier: Amplifier

UFOs

El que fuera uno de los sellos de metal más grande de todos los tiempos y que recientemente ha tenido que cerrar sus puertas, Music For Nations, publica el que probablemente haya sido su último lanzamiento o uno de sus últimos, el debut de estos 3 locos nostálgicos del metal de los 90 llamados AMPLIFIER.

En su hoja promocional nos los venden como un híbrido entre THE VERVE, DAVID BOWIE, MASSIVE ATTACK, cosas de techno, drum&bass… Ni caso, estos ingleses están chalados y le tienen tanta tirria a la palabra metal que no la pronunciarían ni que les fuese la vida en ello.

A mi me da absolutamente igual lo que estos 3 británicos oigan en sus respectivos hogares, lo único que me interesa es que el contenido de este “Amplifier” equidista bastante de todas esas comparaciones tan desafortunadas y se acerca más al de los últimos NEUROSIS, los LED ZEPPELIN más experimentales pero con un sonido algo más endurecido, a los primerizos SOUNDGARDEN y sus finales de canción alocados y cahóticos como los cánones blacksabbathianos estipulan claramente, a los PEARL JAM más oscuros y depresivos aunque algo menos atontados e idiotizados y finalmente a los últimos ANATHEMA, uno de los grupos bandera del nuevo rock/metal británico.

Los temas de “Amplifier” son largos y densos caracterizando a su música como una especie de pseudo-grunge atmosférico y anfetamínico, un estilo ya en desuso. Está claro que si este disco hubiese visto la luz hace 10 años no habría sido otra cosa salvo un buen disco más, pero vista la escasez de productos de esta índole que salen al mercado, el contenido de “Amplifier” debería enardecer al oyente nostálgico que descubrió en algunos grupos Grunge algo más que 4 mocosos con caras de gilipollas inconformistas con ganas de tocar las pelotas y hacer ruido.  

AMPLIFIER hacen metal (que no heavy metal) en el amplio sentido de la palabra así que iros olvidando de los solos neoclásicos, los dobles bombos atronadores o las historietas de sodomía anal entre Trolls y Hobbits. AMPLIFIER son clásicos, viscerales, oscuros y por momentos imprevisibles. Si te consideras de miras abiertas y no haces náuseas a los grupos citados por arriba, prueba con estos británicos, te cautivarán.