En unas fechas tan señaladas como las navideñas, qué mejor que rememorar uno
de los discos más malignos y pecaminosos de la historia del heavy metal; El
debut de los grandiosos MORBID ANGEL, “Altars of Madness” cuya única pronunciación
ya produce respeto en un servidor.

Junto a OBITUARY, DEATH, CARCASS y PESTILENCE, MORBID ANGEL y más concretamente
este “Altars of madness” fueron mi primera toma de contacto con el mundo del
death metal hace cosa de una década, lo que indudablemente, deja huella. Centenares
de discos de death metal puedo haber escuchado en todo este tiempo, sin embargo,
siempre acabo volviendo a los mismos, ¿Por algo será no?. “Altars of Madness”
es al death metal lo que por ejemplo “Ride the Lightning” al thrash metal o
“The number of the beast” al heavy metal, EL clásico. Todos los elementos que
definen el death metal en cuestión, se hayan esparcidos a lo largo y ancho de
todo este “Altars of Madness”, algo lógico y comprensible hoy en día, sin embargo
poco corriente en 1989.

Mucha gente tiende a situar como creadores del género death metal a muchas
otras bandas como POSSESSED, INFERNAL MAJESTY, SLAUGHTER, SEPULTURA, AUTOPSY
o DEATH, algo indudablemente cierto. Sin embargo se pasa por alto que MORBID
ANGEL, pese a editar su debut en 1989, ya venían dando guerra desde principios
de los 80’s con un montón de demos, que lejos de ser cualquier otra cosa diferente
al death metal, contenían muchos de los grandes clásicos de la triología “Altars
of Madness” / “Blessed are the sick” / “Covenant”, eso sí, con un sonido algo
más thrash y la voz de Mike Browning, no tan extrema y diabólica como la de
David Vincent. 

Anteriormente a 1989, DEATH ya habían sacado sus dos primeros trabajos “Scream
bloody gore” y “Leprosy”, con un sonido mucho más crudo y radical del que plasmarían
en sus siguientes obras y completamente diferente a lo que MORBID ANGEL predicarían
con “Altars of Madness”. Colegas de todos ellos, y situados geográfica y temporalmente
en las mismas latitudes, estaban OBITUARY cuyo debut “Slowly we rot” salió al
mercado también en 1989. Al año siguiente la plaga mortífera se extendió por
todos los States y millones fueron las bandas que aparecieron con un debut discográfico
bajo el brazo; DEICIDE, MALEVOLENT CREATION, ATHEIST, CANNIBAL CORPSE, SUFFOCATION,
NOCTURNUS,… Al otro lado del atlántico, y procedentes de Suecia, los primeros
ENTOMBED, GRAVE, EDGE OF SANITY, UNLEASHED, AT THE GATES o TIAMAT tardarían
muy poquito en sacar sus discos debut (1990-1992), sin embargo sus anteriores
reencarnaciones (NIHILIST, CORPSE, TREBLINKA o GROTESQUE), ya venían dando por
saco desde mediados / finales de los 80’s. Por otro lado teníamos a la escudería
británica con CARCASS, NAPALM DEATH y BOLT THROWER al frente (CANCER o BENEDICTION
estarían en una segunda fila), apodados “Los ruidosos”, cuyos trabajos, algunos
de ellos más cercanos al grindcore, ya venían despuntando desde hace tiempo
( y que tanto le deben a los yankees TERRORIZER y sobretodo, REPULSION, los
padres del grindcore). Finalmente, el cuarto epicentro del death metal habría
que situarlo en Holanda, con las 3 bandas clásicas que pasarían a la historia
dorada del death metal; ASPHYX, GOREFEST y sobretodo PESTILENCE, los más antiguos
y quzá mejores de todos ellos.

Con semejante panorama, el death metal se esparció rápidamente por todo el
planeta haciendo que millones de bandas, con apenas pocos meses de vida, sacaran
un disco debut. Debido a esta rápida globalización del death metal, millones
de discos mediocres salieron al mercado cuando nunca deberían haber pasado del
status de demotape ruidosa y trapera. Sin embargo, MORBID ANGEL, en 1989, año
en el que debutaron discográficamente hablando, ya contaban con una serie de
años a sus espaldas que se traducirían en experiencia, plasmada en un puñado
de demos cuyo contenido sería ampliamente revisado en 1991 y seleccionado de
cara a completar un disco llamado “Abominations of desolation”, donde encontramos
las versiones maqueteras y originales de grandes himnos de la banda como “Angel
of disease”, “Unholy blasphemies”, “Abominations” o “Lord of all fevers and
plague”, todas ellas mínimamente diferentes respecto a las originales, pero
tan corrosivas y diabólicas como las versiones más actuales que todos conocemos.
“Abominations of desolation” contiene grabaciones de 1986, año en el que prácticamente
ninguna de las bandas citadas hasta ahora siquiera existía (y mucho menos había
editado algo).

MORBID ANGEL vio la luz en 1983 de la mano de su líder Trey Azaghtoth que junto
a un desconocido Dallas Ward y el también mítico Mike Browning (NOCTURNUS, ACHERON)
darían los primeros pasos como banda. Al poco tiempo se les une Richard Brunelle
como segundo guitarrista y junto a Sterling von Scarborough que ocupa el puesto
de bajista en detrimento de Dallas Ward, MORBID ANGEL graban “Abominations of
desolation” en 1986 ocupándose de las voces el propio batería Mike Browning
(tal y como haría posteriormente en NOCTURNUS). Tras el abandono de Sterling
Von Scarborough, pasa a sustituirle el joven David Vincent, quién ya había producido
el mencionado “Abominations of desolation” y que provenía de TERRORIZER, banda
en la que también militaba Pete Sandoval, futuro batería de MORBID ANGEL.

Con el line-up de David Vicent al bajo y voz, Pete Sandoval a la batería, Richard
Brunelle a la guitarra y Trey Azaghtoth a la otra guitarra, MORBID ANGEL se
encierran en los legendarios Morrisound Studios de Tampa, Florida, y junto al
ingeniero de sonido Tom Morris dan vida a estos 10 himnos a cada cual más bélico
y endiabladamente feroz.

Siendo junto a TERRORIZER una de las primeras bandas de death metal en utilizar
dichos estudios, los Morrisound Studios acabarían por convertirse en LOS estudios
definitivos para grabar thrash y death metal, de tal forma que si querías que
te tomaran medianamente en serio, deberías lograr que tu demo o disco contara
con el nombre de dichos estudios en los créditos junto al de cualquiera de los
ingenieros que en ellos solían trabajar; Los hermanos Tom y Jim Morris, Scott
Burns o Mark Prator entre otros. Los Morrisound Studios vendrían a ser al death
metal de principios de los 90 lo que los Abyss o los Fredman Studios al metal
contemporaneo del siglo XXI; un referente. 

El sonido de MORBID ANGEL en estos sus primeros años está repleto de elementos
propios del thrash, el speed metal de la época, el death metal obviamente e
incluso, algo de black metal tanto en el ámbito musical como en el letrístico.

“Altars of Madness” se abre con uno de los muchos himnos que contiene en su
interior, la legendaria “Immortal Rites”, un tema rápido cargado de aceleraciones
y unas melodías de guitarra dobladas inolvidables cargadas de odio y maldad.
El repertorio de solos de Trey Azaghtoth y Richard Brunelle creo escuela y “Immortal
rites” es prueba de ello. Nunca antes se había visto semejante cantidad de técnica
y locura desenfrenada en un solo de guitarra death metal, algo lógico a sabiendas
de los gustos musicales de Trey Azaghtoth y su fanatismo desorbitado por Eddie
Van Halen a quien rinde tributo en cada uno de sus punteos cargados de tremolo
y armónicos a doquier. “Immortal Rites” junto a “Chapel of ghouls” posee unos
teclados puntuales que le otorgan una atmósfera espeluznante. La siguiente “Suffocation”
nos muestra el lado más brutal y rápido de MORBID ANGEL, con un Pete Sandoval
en estado de gracia mostrando un repertorio de técnicas que no muy tarde centenares
de baterías copiarían. “Visions from the dark side”, junto a la inicial “Immortal
Rites” o “Lord of all fevers and plague”, probablemente sea la preferida de
un servidor, con unas melodías de guitarra 100 % black metal y unos cambios
de ritmo de infarto. Una vez más, los señores Trey Azaghtoth y Richard Brunelle
se luecen metiendo, como en casi todos los temas del disco, lo menos 4 o 5 solos
de guitarra endiabladamente genuinos. “Maze of Torment” es quizá una de las
piezas más conocidas de MORBID ANGEL, con su inicio demoledor con las carcajadas
de David Vicent y los riffs de corte thrash metal tan peculiares que contiene.
“Lord of all fevers and plague” es otro de los puntales de este “Altars of Madness”,
sobretodo por su estribillo donde David Vincent nombra a un sinfín de deidades
ancenstrales citadas en algunos de los textos del escritor H.P. Lovecraft, fuente
de inspiración principal de MORBID ANGEL de cara a escribir sus letras. Cualquiera
que haya acudido a un show de MORBID ANGEL sabrá que uno de los momentos álgidos
de la actuación se da cuando toca recitar, en plan cavernícola total, aquello
de “Ia iak sakkakh iak sakkakth Ia shaxul”. “Chapel of Ghouls” es definitivamente
el tema más popular de MORBID ANGEL, con las frases y melodías vocales de David
Vicent, perfectamente elaboradas y colocadas para crear un impacto aún mayor
en el oyente, y con un final cargado de solos de guitarra y teclados que los
fans conocen de memoria y tararean en todos los conciertos del ángel mórbido.

“Altars of madness” se cierra con “Bleed for the devil”, “Damnation”, “Blasphemy”
y “Evil spells”, temas donde la banda sigue las mismas pautas que en los temas
detallados con anterioridad, repitiendo perfectamente los mismos patrones uno
por uno.  

Diferentes fueron los logros que alcanzaron MORBID ANGEL en su día. Por un
lado, con el permiso de CANNIBAL CORPSE y probablemente OBITUARY o DEICIDE,
MORBID ANGEL son la banda que más discos de death metal ha vendido en estos
15 años. Además, cuentan con “Covenant”, su tercer trabajo de estudio, que alcanzó
la desorbitada cifra de 500.000 ejemplares, algo impensable para un trabajo
de death metal puro y duro (no, no hablamos precisamente de la música que practican
IN FLAMES, SOILWORK o SLIPKNOT actualmente). Por si no fuera poco, MORBID ANGEL
lograron fichar por una multinacional antes que nadie consiguiendo editar con
la todopoderosa Giant / Warner dos discos, “Covenant” y “Domination”, solamente
en los States (en Europa fueron publicados por Earache Records). Otras bandas
tontearon con las multinacionales como CARCASS o CANCER, pero ambas desaparecieron
tras ello (¡Quién juega con fuego acaba quemándose!).

Tras “Altars of Madness”, la popularidad de MORBID ANGEL subiría como la espuma.
Al poco tiempo saldría otro de sus grandes clásicos, “Blessed are the sick”,
un disco más pulido y meticulosamente compuesto, que llevaría a MORBID ANGEL
a girar con bandas como MOTORHEAD o BLACK SABBATH incluso, aparecer en la MTV
y ganar premios, editar videoclips de alto presupuesto… Tras “Blessed are
the sick”, vendría otra obra maestra, “Covenant”, cuya gira supuso la despedida
de Richard Brunelle quién sería rápidamente sustituido por el ex RIPPING CORPSE,
Erik Rutan… El resto, como se suele decir, ya es historia.

Javi Metal

Grupo:Morbid Angel

Discográfica:Earache Records

Puntuación:10

Canciones:

    1. Immortal Rites
    2. Suffocation
    3. Visions from the dark side
    4. Maze of torment
    5. Lord of all fevers and plague
    6. Chapel of ghouls
    7. Bleed for the devil
    8. Damnation
    9. Blasphemy
    10. Evil Spells

Año:1989

Votación de los lectores:8.21429