Mad Season: Above (Deluxe Edition)

Son varias las reediciones que han pasado por mis oídos en los últimos meses. Grupos más que consagrados como RAGE AGAINST THE MACHINE o NIRVANA, infravalorados como BLIND MELON, incluso de por aquí, como HÉROES DEL SILENCIO. Todos tenían en común que sus discos reeditados vieron la luz a primeros de la década de los 90, y recientemente cumplían veinte años. El último en llegar hasta mí ha sido el de otros que no consiguieron el éxito, pero que pasaron pronto a pasar parte de esas bandas de culto: MAD SEASON.

Si bien es cierto que ‘Above’ no salió hasta 1995, todavía le quedarían dos años para su aniversario redondo. Desconozco la razón de no haber esperado hasta ese momento, pero a principios de este 2013 se anunciaba que vería la luz en formato de doble CD más un DVD extra con una de las pocas actuaciones que dieron como grupo: ‘Live at the Moore’. Hace poco que para la review de ‘Blind Melon’ acudía al reportaje que publicábamos hace un par de veranos sobre toda la explosión grunge, donde había hueco para ambas bandas; una muestra de todo lo que nos dieron los años 90.

‘Above’ no es un disco fácil de escuchar ni de digerir, más sabiendo que tras él gente de PEARL JAM y ALICE IN CHAINS, que se llevaban toda la atención, y también de SCREAMING TREES. Aunque había detalles, en la mayor parte de temas se intentaban alejar de lo visto hasta el momento en sus respectivos grupos, y ahí estaba su esencia. La ambiental ‘Wake Up’ iba como anillo al dedo para despertar a la banda; oscura y tétrica en su inicio, no explota hasta la mitad, teniendo a Staley el mayor protagonista. Con ‘X-Ray Mind’ ya nos metían en un sonido que bebía del blues y que se alejaba un poquito más de sus bandas principales. ‘River Of Deceit’ (con un aire más animado, especialmente en el aspecto musical) y la rockera ‘I Don't Know Anything’ (personalmente, el gran tema de ‘Above) fueron las encargadas de mostrar al mundo a MAD SEASON, siendo dos singles muy distintos entre sí. Otra de las que se llevó buena parte de atención fue ‘I’m Above’, en colaboración con Mark Lanegan, que también colaboraría en ‘Long Gone Day’. Ante todo, tocaban distintos palos, como demostraba una setentera ‘Artificial Red’ o una psicodélica ‘November Hotel’, seguida por la melancólica ‘All Alone’ (¿acaso podía llevar otro título?)

Layne volvería momentáneamente a ALICE IN CHAINS, grabando con ellos un nuevo álbum y apareciendo en la serie de Unpluged de la MTV, pero dejaría el grupo en 1997, sumiendo su vida en un infierno y muriendo en Abril del 2002; tres años antes otra sobredosis se había llevado a John Baker. Nadie pensaba que la banda haría algo desde entonces, si bien el nombre de Mark Lanegan siempre sonó con fuerza para ocupar el puesto al frente como vocalista; aquí aparece cantando tres temas compuestos para un segundo álbum que nunca vio la luz. ‘Interlude’ marca la unión entre 1995 y el momento actual, para traernos a Lanegan con ‘Locomotive’ con un registro distinto al de Layne, pero con su marca de personalidad y un sonido mucho más actual. El lado desolador nos lo traen en ‘Black Book of Fear’, mucho más simple e íntima y en una emotiva ‘Slip Away’, cuyo solo final parece cerrar el libro que ha escrito MAD SEASON en la música. Cierran con una versión de John Lennon (grabada junto a Layne), ‘I Don’t Wanna Be a Soldier’, que vio la luz en un tributo hace años. El extra más apetecible es el citado DVD (cuyo audio del directo de ‘Live at the Moore’ se puede escuchar en el segundo CD). El momento álgido, los casi quince minutos de ‘November Hotel’, amagando con la destrucción de parte de su equipo y con gente colgando de los balcones del teatro al más puro estilo Vedder. Además, cuatro temas extras de ese mismo concierto (pero grabados no de forma profesional, sino con una cámara superior, y en la que sí sale ‘I’m Above con Lanegan), un par de cortes grabados en una actuación de la radio, su actuación el día de año nuevo en el RKCNDY de Seattle (nueve temas, con una sola cámara al fondo de la sala, pero con un sonido decente), y el videoclip oficial de ‘River of Deceit’. Reediciones así SÍ merecen la pena.