Twisted Sister: A Twisted Christmas

Que el gran resurgimiento discográfico de TWISTED SISTER ha sido gracias a un disco de canciones navideñas y no de la regrabación de “Stay Hungry” es algo que cuesta digerir, pero que es extremadamente lógico, viendo como está el mercado discográfico. Aquel que haga algo fuera de la norma o ligeramente diferente al resto es el único que hoy en dia puede darse el gustazo de vender una cantidad respetable de discos, dejando a un lado las viejas glorias que siguen teniendo unas ventas constantes y más o menos sanas.  Pero repito: que TWISTED SISTER vendan miles y miles de discos en Estados Unidos gracias a un disco de villancicos heavies es casi paranormal. O paranormal del todo.

Si escuchar el disco ya fue una experiencia en sí misma, ver el DVD es confirmar visualmente que TWISTED SISTER han dado el giro más bizarro de toda su carrera, pero con una gracia navideña que les ha hecho triunfar de nuevo. Ver a Dee Snider salir a escena vestido de Santa Claus entonando “Have Yourself a Merry Little Christmas” te hace recordar que, en el fondo, los neoyorkinos eran la única banda divertida de los ’80. Al menos, la única banda que realmente era divertida y cuyos videoclips aún se recuerdan por su ingenio a dia de hoy. Porque vamos, los clips de MAMA’S BOYS o HELIX se recuerdan bastante menos a día de hoy, pero a duras penas encontrarás a alguien que no haya visto los de “I Wanna Rock” o “We’re Not Gonna Take It”.

Pese a todas las veces que han dicho que la reunión era temporal y que no querían que les robara demasiado tiempo de sus proyectos personales, el empeño que ponen sobre el escenario sigue siendo admirable, como todo el que haya visto sus shows en años recientes puede asegurar. La banda invade el escenario del Starland Ballroom de New Jersey con una convicción que ya querrían tener muchos musicos de veintipocos años, interpretando sus clásicos intercalados con los villáncicos del metal. Así que justo al lado de “I’ll Be Home For Christmas” podemos escuchar un temible “Burn In Hell” y al lado de “You Can’t Stop Rock N’ Roll” podemos escuchar una dulce “White Christmas” donde los arreglos heavies sirven para embellecer aún más la vieja canción de 1949. En cualquier caso, los arreglos no se podrían definir simplemente como “heavies” en el sentido más puro de la palabra y haciendo referencia al concepto más ochentero del género. Hay canciones que tienen arreglos más cercanos al punk-rock, caso de la inicial “Have Yourself a Merry Little Christmas”, donde la consigna ramoniana es alterada por un “ho-ho-ho, let’s go”. Por no hablar del comentario de Dee Snider antes de “I’ll Be Home For Christmas”: “sentís ya el espíritu de la navidad? Hemos hecho todo lo posible, de hechos estas luces navideñas nos han costado 3,99 dólares, hijos de puta”. O toda la presentación completa de “I Wanna Rock”, donde Dee explica “mis padres me regalaban calcetines para navidad, provocando decepción, y cuando provocas decepción a un niño acaba como yo”. Lo dicho: siguen siendo una banda ingeniosa y por ello sus conciertos siguen estando llenos hasta la bandera.

El único punto mejorable del DVD es la calidad de la grabación de video, que es realmente amateur. Entiendo que hoy en dia no hay un gran presupuesto para camaras de 35mm y que lo digital reina por encima de lo demás, pero todo un concierto grabado por camaras digitales de definición escasa da resultados demasiado pobres. Entiendo que casi todos los dvd’s se graban hoy en dia de la misma manera y que, tal y como está todo, nadie quiere invertir demasiado dinero en una gran grabación…pero yo creo que un par de trípodes no habrían hecho daño. Al contrario, habrían mejorado el resultado. Lo que podemos ver es algo así como una grabación pirata de buena calidad con gran sonido, pero nada que se parezca realmente a un DVD oficial de una de las bandas más grandes que ha dado el hard rock americano.