Y&T
Grandiosa noche a manos de una banda que siempre ha sido un símbolo del mejor heavy metal facturado en los 80. Hablar de Y&T es hablar de los grandes dominadores de la escena entre 1981 y 1985. Esa trilogía formada por EARTHSHAKER, BLACK TIGER y MEAN STREAK ha quedado ya para los anales de la historia de este género. Tras venir un par de veces en pocos años el Razz II no registró esa entrada a reventar que bien merece el grupo, pero a pesar de llenar algo más de media sala, la banda cumplió sobradamente su cometido de manera sobresaliente.
Para Meniketti parece que los años no pasan, una voz exactamente igual a la que poseía a principios de los 80 y una pericia y dominio de la guitarra con un feeling como muy pocas veces he visto. Y es que el grupo no le va a la zaga, pero es imposible apartar los ojos del indiscutible líder. Parece que cuando ejecuta solos y canta haya una aureola mágica que le envuelve, de verdad, no es exageración.
“From the Moon” provocó el delirio y advertía que “Open Fire” se nos venía encima. Escudados por un sonido fantástico y una audiencia entregadísima Y&T provocaron el delirio entre los asistentes al show. “R’n’R is Gonna Save the World” o “Straight Tru Heart” sonaron mucho mejor que en sus discos menos conocidos, pero empalidecen frente al ataque de un “Mean Streak” o “Black Tiger”. La respuesta del respetable ante tamaños clásicos fue acompañada de vítores y aplausos constantes. John Nymann apenas disfrutó de labores de solista y se limitó a un tímido solo de guitarra en el tercer tema, nada más. “Hurricane” sonó a gloria pero nada comparado con la excepcional “Midnight in Tokyo”, precioso tema con un estribillo antológico. Meniketti continuaba compaginando las labores de cantante, con esa característica técnica de voz que parece que fuerce a tope sus cuerdas vocales, con sus sobradas dotes de guitar hero. “Dirty Girl”, “High ‘Em High” y la sorpresiva “Eyes of Stranger” continuaron sentando cátedra y demostraban que esta banda es sin lugar a dudas una de las que mejor ha sabido envejecer. “Ten Lovers” fue otra agradable sorpresa poco esperable. Y para bordarlo quedaba la genial “Summertime Girls”, con ese deje a lo Van Halen y ese sonido algo diferente a los grandes himnos de la banda.
Pero nada comparado con la tríada por antonomasia. Un final, sin bises, en que descarguen seguidamente “Rescue Me”, “I Believe in You” y “Forever” es sin lugar a dudas el mejor final posible, un sueño hecho realidad para el fan y más teniendo en cuenta el estado de forma que gastan sobre las tablas. Mención especial merece el supersolo de “I Believe in You”, uno de esos momentos que quedan grabados para siempre, y es que la primera experiencia con ese solo en directo es difícil de explicar en palabras. Aplausos y vítores van sonando mientras Meniketti va bordando su quehacer. Rotundo rugido desde platea y celebración con chupitos. Y para rematar la celebérrima “Forever” con botes del respetable.
Maravilloso concierto de casi dos horas. Cuanto deben aprender bandas jóvenes consagradas de estos tipos. Sí, podríamos dar muchos nombres pero desgraciadamente la lista sería muy larga. Un directo de Y&T es de obligada asistencia si de verdad te gusta el heavy metal, ya no para hacerles el favor y apoyarles, sinó para ver que tras tantos años de singladura siguen estando un escalón por encima de la mayoría. Profesionales, mágicos y con un Meniketti divino.
Texto: Jordi Zelig TÃ rrega / Fotos: Sergi Ramos
Promotor:Robert Mills
Asistentes:300
Día:08/11/2007
Hora:21:30
Sala:Razzmatazz II
Ciudad:Barcelona
Puntuación:9
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.