WESTFALLENPARK + NIOBETH + CRISIS DE FE + WICKED

Metidos de lleno en plena temporada musical y con la gran oferta semanal que suele presentar la capital del reino en los primeros meses del año, la fecha elegida por los madrileños WESTFALLENPARK se me antojó más que adecuada pese a ser un día entre semana; víspera de festivo, eso sí.  Fue por ello que las prisas de la salida del trabajo y demás peripecias típicas de cualquier miércoles que se precie dieron como resultado que me fuera imposible alcanzar la puerta de la madrileña Rimo y Compás a tiempo para ver a los bilbaínos WICKED.

No sería el único, ya que una vez dentro del recinto pude comprobar cómo con el paso de las horas la sala iba rellenándose progresivamente hasta alcanzar en su punto de máxima afluencia unos 2/3 del aforo del local. Una respuesta que no debía ser menor dado el empeño, el  esfuerzo invertido y las ganas que siempre le ponen la gente de WESTFALLENPARK para cualquier tipo de acción. Si a éstos le añadimos la ayuda de otras tres bandas adicionales, el cartel estaba más que hecho.

A grandes rasgos, la noche transcurrió sin grandes sobresaltos. El sonido no dio todo lo que hubiera sido deseable, pero el público respondió, la gente lo pasó aparentemente bien y la velada sirvió para varias cosas; la más importante, qué duda cabe, fue la presentación de los nuevos miembros de WESTFALLENPARK que en los últimos tiempos se han incorporado a la banda: Iván Manzano (por muchos conocido por su participación en SILVER FIST, entre otras bandas), Daniel Melián (ex – EBONY ARK) y Javier Jiménez (ex – EBONY ARK).

Tras una pantalla que proyectaba los identificadores de colaboradores y actores que participaban en el evento, el escenario de la sala anexa a los locales de conciertos daría cabida a la descarga de decibelios de 4 bandas españolas.  

CRISIS DE FE se situaban en el escenario y con ellos la sorpresa al ver a una banda de la que mucho se ha hablado en los últimos meses movida por un importante aparato mediático que les ha hecho portada de distintos medios nacionales. Llegaba la hora de la verdad y el resultado sobre las tablas marcaría la primera opinión del que suscribe ya que servidor se los encontraba por primera vez cara a cara y en condiciones de análisis de todo lo que podían dar de sí. Fue una inmejorable ocasión, ya que el directo puso toda la carne en el asado de la banda y sobre todo, las cartas sobre la mesa en lo estrictamente musical. Sin atrezzo ni medias tintas y con el único añadido de la especie de casaca que se enfundó su vocalista, los valencianos supieron aprovechar su situación en el cartel y con el público aún fresco desplegaron esa amalgama de sonidos de metal melódico, heavy y rock oscuro que me impresionó por no poder ser catalogado de una manera concreta. Pensaba que se trataba de una formación a la estela de otras como SAVIA, SKIZOO, CIRCUS, ROMEO y similar, y sin embargo la cosa toma un cariz menos dramático y sí más dinámico y metalero.  Qué duda cabe que el tema que más caló en mi persona fue el que da título a su trabajo “Nunca Llueve Eternamente” que inevitablemente me hizo pensar en la película interpretada por Brandon Lee. Es dinámica y pegadiza, con lo cual fue lo que a la postre queda en el recuerdo. Hubo tiempo para un repaso prácticamente integral al disco; temas como “Lejos de Dios” o una emotiva “Polvo y Arena” fueron algunos de los puntos álgidos de una actuación que gustó.

Los años pasan y la experiencia es ya un grado en los madrileños WESTFALLENPARK. Sabedores del mal endémico que suele aparecer en los conciertos de muchas bandas nacionales, hicieron bien en situarse en la tercera posición del cartel, hecho que en ningún caso negó su posición indudable de cabezas de cartel. Tenía ganas de reencontrarme con la banda de Antúnez y Grace que han sabido apechugar y afrontar los cambios de formación y de concepto musical de la mejor manera posible. Porque si bien la esencia sigue siendo parecida, hay muchas cosas que han cambiado en esta banda desde sus inicios. Por muchas casualidades que se van presentando en el transcurso de los años (he podido ser testigo del desarrollo de la carrera de esta formación desde sus inicios y en actuaciones como la de MAR DE GRISES o  Antichristmass Fest, hasta las más recientes con LEAVES EYES o TO/DIE/FOR) y creo tener los argumentos suficientes para decir que finalmente han encontrado la mejor fórmula que casa con ellos. En una especie de pacto común entre partes ya no hay una disputa interna entre las voces que clamaban por un sonido más doom o por otro más operístico y netamente gothic metalero. La cosa ha pasado a centrarse en una apuesta equilibrada entre sonidos con base de metal oscuro y que se ha materializado en la grabación del EP homónimo que presentaban para esta ocasión. Han mejorado en equipo, en empaque y en formas sobre las tablas. Veo a Grace con una actitud mucho más evolucionada, que lleva a una mejor conexión con el público y manejo del tempo del concierto. Por su parte, la experiencia del resto de miembros ha sumado y los conciertos, al menos en esta ocasión, se ven mucho más profesionales y cercanos a los de cualquier otra banda europea de relumbrón. Todo pasará por ir limando detalles hasta conseguir el punto óptimo.

En cualquier caso, la banda se movió, imprimió fuerza cuando era necesario (dígase en temas como “Fallen Angels” u “Ocean”)  y mostró su cara más mística y retraída en otras como “Scars In The Sand”). Me gustó ver de nuevo el headbanging con la intensidad de aquella noche y que quizá necesitaban recuperar. Daniel puso de su parte en este concepto, y es que sus grunts añadieron agresividad y rabia a la música que ha mejorado considerablemente.

Otro de los aspectos que no abandonan y que aplaudo (eso sí, requiere cierta rotación) es el de la inclusión de versiones. Esta vez tocaron EVANESCENCE y WITHIN TEMPTATION y quedó fuera MADONNA. Particularmente me gusta bastante más esta última, pero sobre todo el tema que interpretan habitualmente Sharon del Adel y los suyos cuajó en el transcurso de la noche. La gente se prodigó en aplausos e inevitablemente la noche tocaba a su fin con el “corte” insignia de la formación: “Fallen Angels”. Haciendo balance, hay que destacar la garra de la nueva banda y la pegada que consiguen.

Set list WESTFALLENPARK

• Do you remember?
• Charmed Lovers
• Ocean
• Mirror
• Going Under (EVANESCENCE)
• Scars in the sand
• The Crow
• What have you done?    (WITHIN TEMPTATION)
• Fallen Angels

Y fue entonces cuando ocurrió uno de los episodios más repetidos en esta clase de conciertos. La banda principal acaba su actuación, la hora de partida se echa encima y se produce una desbandada general que dejó bastante mermado el nivel de audiencia al que se enfrentarían los albaceteños NIOBETH. Caso parecido al de CRISIS DE FE, la banda se ha dado a conocer a lo largo y ancho de la geografía con intensivas campañas de comunicación que comienzan a dar sus frutos y a conseguir actuaciones para los manchegos. Ahora, creo que no guardarán buen recuerdo de esta noche, que muy probablemente haya sido la peor de toda su carrera.

Debe ser frustrante después de movilizar a gente, esperar a tocar en última posición con una sala desangelada y con un sonido muy malo y que encima no te salga absolutamente nada.

La verdad es que ni los esfuerzos vocales de Itea, ni los solos de Jesús Diez ni el despliegue de instrumentos del teclista  Santi – que no contento con su instrumento fue capaz de sacar a relucir un violín y hasta una gaita -, fueron capaces de salvar la papeleta. Los temas de metal sinfónico, bombástico y con tintes de fantasía incluidos en su álbum “The Shining Armony Of Universe” no sonaron esta vez como cabría esperar y entiendo que habrá que darle otra oportunidad a la banda cuando teloneen a SIRENIA, por poner un ejemplo. Esa será la prueba de fuego, con un “sparring” de altura y con condiciones que limitan el margen de error. Esta vez ni el desfile de vestimentas de la cantante, ni la decoración somera del escenario, ni las letras en japonés, ni la mismísima versión de BLIND GUARDIAN del “NIghtfall” les salvaron de la quema.