Gran expectación la que despertó este concierto el Sábado 16 en la madrileña sala Caracol. No era para menos, pues no podemos olvidar que estábamos a punto de comtemplar la actuación de la banda que representó a nuestro país en la última edición del Wacken en Alemania con excelentes resultados (Quedaron segundos en el certamen internacional de bandas que se organiza en torno al famoso festival). Si a eso unimos que era el concierto de presentación oficial del disco frente a su público asi como el último de la temporada mientras se toman un merecido descanso, el espectáculo estaba más que asegurado.

Abrieron la noche los también madrileños MUDDOLLS, con una propuesta de hard rock con tintes grunges bien desarrollada, aunque quizás demasiado distante en estilo de lo que el público se esperaba en esta velada. De ahí la respuesta algo fría ante una propuesta correcta pero exenta de mucho alardes. Concierto ni mas ni menos que correcto para abrir boca a lo que nos esperaba después.

Después de un breve cambio de Backline y con una sala casi llena, se abría el telón para presentar la actuación de los cabezas de cartel. Con un sonido brutal, nítido, contundente y una motivación extra al jugar en casa, nos regalaron una de las actuaciones más memorables que el que suscribe recuerda, sobre todo tratándose de una banda nacional. Y es que esta joven banda tiene muy claro lo que hace y como tiene que hacerlo. A medio camino entre unos Sepultura de lo más tribal y las propuestas mas modernas de metal extremo, se manejan a la perfección en el escenario, aunando una ejecución brillante de todos los miembros con una base rítmica impecable. Todo ello acompañado de la figura de Javier Cardoso, enorme vocalista y frontman, que tiene todas las papeletas para convertirse en una figura de referencia de la escena metálica nacional.

Abrieron su actuación con “Nada Por Ti” y desde el minuto uno la sala caracol entró en ebullición. Sin casi tiempo para respirar siguen desgranando un repertorio seco y violento con temas como “Oculto” o “Parasito”, que tantas buenas críticas está cosechando incluso más allá de nuestras fronteras. Y no es para menos.

A destacar también como factor diferenciador con respecto a otras bandas la incorporación de percusión extra, a cargo de Myriam, con la contundencia que eso conlleva.

Siguen cayendo los temas como trallazos y las sorpresas, como la Batukada con la que deletiaron a un público entregado pasada la mitad de la actuación, acompañados de Bárbara (bateria de Muddolls) y Juan, que hacia las veces de Chaman, resaltando las raices tribales de los madrileños. Un toque de color y contraste algo distinto que sirvió para tomar algo de aire antes de un final de concierto trepidante con “Sistema Nervioso” Y “Paranoia”. La banda se despide dándose un baño de masas y abandona el escenario dejando en el recuerdo una actuación memorable. Me consta que quisieron volver para regalar a su publico un par de temas más, pero un pequeño fallo de coordinación entre el técnico de sonido y el management de la banda hizo imposible que asi fuera (Se apagaron los equipos pensando que el concierto había finalizado, con la consiguiente dificultad de volver a poner todo en marcha).

Ya en la puerta de la sala y comentando con el resto de compañero de la prensa, todos coincidimos en resaltar que se trataba de uno de los mejores shows que se pueden disfrutar hoy en día en el panorama nacional. Y es que Vita Imana han tomado la determinación de destacarse dentro de la enorme cantidad de bandas que hoy pueblan nuestra escena gracias fundamentalmente a dos factores. En primera lugar, buscando un sonido propio que bebe de muchísimas influencias distintas, pero que lejos de quedar en un pastiche sin sentido, adquiere una entidad y un peso propio, y en segundo lugar gracias a un directo espectacular que sin duda alguna les va a traer gratas recompensas en un futuro si siguen así. Les seguiremos la pista.

Texto y Fotos: Javier Bragado

Promotor:Pegada Brutal

Asistentes:100

Día:16/10/2010

Sala:Caracol

Ciudad:Madrid

Puntuación:8