Hasta este pueblo cercano a Tarragona de nombre La Selva del Camp tuvimos que
desplazarnos en esta ocasión para poder disfrutar del Blitzkrieg 3, gira que
aúna a nada menos que a los polacos VADER, a los griegos ROTTING CHRIST, a los
franceses ANOREXIA NERVOSA y a los también polacos LOST SOUL (no confundir con
los suecos LOST SOULS) bajo sus faldas. Razones de sobras creo yo para darte
el paseíto desde Barcelona aunque luego tengas que quedarte tirado en la calle
llorando lejos de tu mamá un día entre semana y sin saber cómo volver a casa.
Porque somos unos chicos duros. Además, me consta que allí dentro nos encontramos
gente tanto de Barcelona como de Tarragona y Castellón, registrando la sala
finalmente una entrada bastante buena.

La organización se había preocupado muy adecuadamente de todos los detalles
fundamentales, hecho a todas luces destacable. Si bien la sala prevista en un
principio era la más reducida sala Golfus, en plena ciudad de Tarragona, finalmente
la sala Torn de Nit sería la elegida para acoger el evento acondicionándola
para tal efecto. Y aunque muchos teníamos la duda de cómo sonaría tal avalancha
de decibelios y notas básicamente con los altavoces propios de una discoteca
haciendo las veces de PA lo cierto es que el resultado fue notable, además de
que el buen sonido vino acompañado durante toda la actuación con buenos efectos
de luminotecnia tales como lásers y flashes que enfatizaban los momentos más
cañeros. Como punto desfavorable, por otra parte, cabria mencionar la escasa
altura del escenario, que hacía difícil seguir con comodidad lo que allí acontecía
a no ser que uno se encontrara en las primeras filas.

LOST SOUL abrieron la velada con su death metal de temática satanista y su
buen quehacer sobre las tablas, con un frontman muy por la labor y haciendo
gala de su base rítmica extremadamente consistente. Si bien es cierto que la
originalidad que le encuentro a estos polacos es totalmente nula dudo mucho
que alguno de los asistentes al evento pusiera en tela de juicio la validez
de su propuesta, técnica y precisa. Tuvieron el peor sonido de la noche, demasiado
cargado, por lo cual sus riffs se perdían en demasía entre la maraña sónica,
pero a pesar de ello el público no pareció ahuyentarse y no fueron pocos los
ojos que siguieron con atención las evoluciones del cuarteto. Cayeron temas
de su última edición “Chaostream” sin olvidarse tampoco de sus dos obras anteriores
y del espacio en el set que reservaron para ejecutar una interesante versión
de  MORBID ANGEL, “Rapture”, corroborando asimismo que tal y como pudimos comprobar
a raíz del material que interpretaron, la banda de Florida es una de sus mayores
influencias.

Con ANOREXIA NERVOSA ya cambió la cosa. Éramos muchos los que ansiábamos verlos
tanto a ellos como a ROTTING CHRIST, dos agrupaciones interesantísimas que no
se prodigan demasiado por nuestras tierras, por lo cual el menú se presentaba
apetitoso. Con una puesta en escena ciertamente eficiente, arremetieron con
temazos de la talla de “The Shining”, “Sister September” o “Mother Anorexia”
que hicieron subir considerablemente la adrenalina de un público que comenzó
a liar un buen moshpit que se repetiría ya en todas las actuaciones, canalizado
sobretodo por cuatro individuos más pasados de vueltas de lo normal. La banda
apareció en escena con sus galas más características, camisetas de rejilla,
cuero, látex y demás parafernalia, pero a diferencia de lo que sucede con bandas
de similar imagen (léase CRADLE OF FILTH o WYKKED WYTCH) Mr Reidmarr y compañía
nos ofrecieron una buena ración de caña sin concesiones, pues su black metal
sinfónico repleto de blast beats resultó altamente efectivo y se erigió revulsivo
para todos aquellos que todavía no se habían puesto las pilas. La banda, por
su parte, mostró una actitud positiva y aprovechó en la medida posible las pequeñas
dimensiones del escenario para descargar su furia con riffs como los de “Worship
Manifesto”. A pesar de que el show rayó a gran altura me hubiera vuelto loco
poder escuchar en directo la increíble “Antiferno”, pero finalmente no cayó
esa breva. El más que aceptable sonido (a pesar de que el guitarrista Stefan
 había asegurado a más de uno durante las pruebas de sonido que la acústica
no era de su agrado) permitió que las orquestaciones fueran lo suficientemente
audibles como para que la actuación cobrara la dimensión adecuada, de hecho
el inestimable apoyo de los teclados hizo que en algún que otro momento nos
acordáramos de EMPEROR, siempre salvando las distancias. Acertadísimo ración
de black metal sinfónico la que se marcaron los franceses.

Las bandas compartían backline, por lo cual no tuvimos que esperar demasiado
a que ROTTING CHRIST aparecieran en escena. Aunque he escuchado un poco de todo
sobre el poco gancho de la actuación en directo me gustaría aclarar algunos
extremos; dudo mucho que el show que la banda nos ofreció decepcionara a algún
seguidor de la música que practican, ya que a un servidor el concierto le pareció
perfecto. ¿Cansinos, repetitivos, aburridos? Señores, el black metal  que ROTTING
CHRIST practican posee unas particularidades bastante singulares, que llegan
a conformar una propuesta en cierto modo bastante lejana a la que profesa el
metal extremo practicado al norte de Europa. Esto es, black metal griego, con
todo lo que ello implica. No busquen murallas de brutalidad ni blast beats imparables.
Quizá el hecho de que no tuvieran mucho que ver con el death metal polaco de
los cabezas de cartel motivó en algunas personas no familiarizadas con el sonido
de grupo estas opiniones negativas, aunque lo cierto es que el ambiente y la
reacción que yo vi durante la actuación de los helenos fue bastante positiva,
con pogo en las primeras filas y algún que otro señor volando por los aires.
Sakis nos demostró que, si bien el pelo que puebla su cabeza está desapareciendo
con el paso del tiempo, a sus habilidades a la guitarra les sucede lo contrario,
pues menudos solos se marcó el hombre (si bien no demasiado técnicos, grandes
deudores del buen gusto). Desde su puesto de frontman supo moverse con soltura,
escupirnos sus consignas en forma de letras y capitanear un barco tripulado
por unos músicos que permanecieron en un plano más secundario en cuanto a protagonismo,
que no en cuanto a eficiencia.

Como novedad teníamos a un recién incorporado para el directo George Bokos,
guitarrista de los también griegos NIGHTFALL, que substituye de momento al exiliado
Costas y que pudo demostrar su valía en directo junto a Andreas, Themis y el
ya citado Sakis. La banda, que recientemente ha fichado por Season of Mist,
continúa considerando los conciertos de este Blitzkrieg 3 como parte de su gira
de presentación de “Sanctus Diavolos”, ya que cayeron no pocos temas de dicho
redondo a pesar de haber sido editado ya hace algún tiempo. Un disco algo criticado,
a pesar de que a un servidor llegó a convencerle con el paso del tiempo. Por
lo tanto, ya pueden imaginarse ustedes una retahíla de temas en los que las
tres etapas de la banda se ven en mayor o menor medidas diferenciadas, habiendo
tiempo para las partes rápidas de “Visions of a Blind Order”, la contención
de “Thy Wings, Thy Horns, Thy Sin” o los coros y los devaneos góticos de la
tranquila “Sanctus Diavolos”, no sin ello olvidar unos pocos clásicos que fueron
los que revolucionaron más a la concurrencia, entre los que podríamos destacar
“Non Serviam” o “The sign of Evil Existence”. “Under The Name of the Legion”
e “In Nomine Sathana” fueron otros de los temas que sonaron esa noche, acabando
de contentar a los que sí supieron disfrutar de su música y culminando así el
buen show que nos brindaron los helenos. Como nota curiosa, durante la actuación
la organización tuvo que emplearse a fondo para evitar que un señor enorme y
con unas cervezas de más subiera al escenario con la excusa de querer abrazar
a los músicos mientras estaban tocando. De hecho, en el concierto de ANOREXIA
NERVOSA consiguió agarrar el brazo al guitarrista y por poco provoca que la
canción que en aquél momento se estaba interpretando se fuera a pique.

Llegó el turno finalmente para los cabezas de cartel VADER, que si bien tienden
mucho más a dejarse caer por las salas españolas que los grupos precedentes,
a los fans parece no importarles ya que no fueron pocos los deathers de pro
que decidieron recorrerse unos cuantos quilómetros para verlos de nuevo, a sabiendas
de que estos polacos no decepcionan en directo. “The Art of War” era el EP en
teoría motivo de presentación, aunque en aquél momento aún no había sido editado.
Sin embargo, el set comenzó de manera arrolladora con dos piezas de dicho EP:
“This is the War” y “Lead  Us!!!”, en las cuales ya quedó claro que, ni cortos
ni perezosos, salían a comerse el escenario, secundados por un sonido que al
menos desde donde un servidor se encontraba fue notable y con el apoyo incondicional
de un público revolucionado y dispuesto a dejarse llevar. Tras la añeja “Sothis”,
del “De Profundis” (álbum del que también caerían más adelante “The Blood of
Kingu” y “Silemt Empire”), llegaría el turno para dos cortes del magnífico “Litany”:
por una parte la breve “The One Made of Dreams”, en la que el batería Daray
se dejó los brazos como si le fuera la vida en ello, y seguidamente “Xeper”,
que con su ritmo contundente y pesado hizo menear la cabeza hasta a las camareras
de la barra. A estas alturas el público ya se encontraba enajenado y practicando
el stage diving a su libre albedrío, con tal mala fortuna que uno de los improvisados
kamikazes fue a parar encima del monitor de Peter ocasionando daños irreparables
en ese momento. Todavía recuerdo la cara que puso el asistente de escenario
cuando salió en medio del tema a ver que sucedía y levantó lentamente el cable
arrancado de cuajo. Tal incidencia solo se podría haber solventado con una soldadura
de urgencia, inviable en aquél momento, por lo cual el guitarrista y voceras
tuvo que apañárselas sin escucharse durante la mayor parte del show por su monitor,
hecho que revaloriza si cabe aún más la gesta en forma de concierto que se marcaron.
A partir de ese momento y ante el aviso del técnico de la banda se intentó controlar
un poco más a los seguidores que aparecían flotando por los aires, a pesar de
que la ausencia de vallas de seguridad hacía difícil la tarea.

Como si una lluvia de monolitos de cemento se tratara, y con previo anuncio
de Peter, cayeron “Out of the Deep” y “Dark transmission”, sin lugar a dudas
los dos cortes más alucinantes de su “The Beast”. Sobretodo con la primera,
tuvimos la oportunidad de volver a comprobar cómo clavan esta gente las canciones,
cambios de tempo incluidos, técnica sobre las tablas en las que también se erige
como principal hacedor el guitarrista Mauser, que en los temas más rápidos vuela
sobre el mástil con una precisión quirúrgica para clavar toda lluvia de riffeados
que se precie.

Entre tema a tema Peter tuvo algo de tiempo para hacer algún que otro gorgorito
en nuestro idioma (“espaniooolll!!” gritaba), así cómo pararse a comentar la
jugada con sus compañeros, desconozco si en lo referente al sonido o respecto
al set list. “Choices”, fue posiblemente uno de los temas más celebrados de
la noche, mientras que composiciones ineludibles como “Epitah” y “Cold Demons”
precipitaron el show hacia su recta final..

La velada finalizó con una extraña versión del “Raining Blood” de SLAYER, pasada
por un filtro vaderiano que igualmente agradó una concurrencia rápidamente acelerada
por la inconfundible melodía inicial.

La banda no solo se encuentra en un estado de forma fenomenal, sino que parece
haber superado valientemente la pérdida del recientemente fallecido Doc, uno
de los mejores baterías que ha parido la escena europea y del que Daray demostró
ser un más que digno substituto. Geniales, por algo son los padres del death
metal polaco.

Un bolo ciertamente alucinante que cerró una noche para no olvidar, en la que
todos los grupos estuvieron fenomenales y consiguieron hacer realidad una de
las veladas más perfectas a nivel musical que muchos hemos tenido el placer
de degustar. Desde aquí felicitar la labor de la gente de Stigia, que trabajó
con ahínco para que todo saliera lo mejor posible y que consiguieron que el 
Blitzkrieg 3 se desarrollara con las suficientes garantías como para que disfrutáramos
tal y como es debido de un cartel de tal magnitud.

Texto y Fotos: Penumbra

Datos:Torn de Nit
Selva del Camp(Tarragona)
Público: 400 personas Promotor: Stigia Producciones

Día:06/10/2005

Puntuación:9