TRIVIUM + CALIBAN

Otro concierto esta semana con muy  buena entrada, cosa de agradecer para estos tiempos tan difíciles que nos toca vivir y que viene a corroborar la idea de que cuando un cartel es interesante, la gente se sacrifica y acude en masa para disfrutar. Esta vez, los grandes protagonistas eran Trivium, un grupo que aún no siendo de las habituales por aquí, mantiene una gran masa de fans, cosa comprensible visto el enorme show que ofrecieron.

Abrían los americanos Upon A Burning Body, banda extrema que presentaban su “Red. White.Green”  y de los que no pude ver nada, cosa de incompatibilidad horaria.

Llegué cuando Caliban ya habían iniciado su show y en lo primero en que me fijé fue que aunque es una banda que nos ha visitado en varias ocasiones, mantiene su tirón e hicieron que con su potente metalcore la sala vibrara de buena manera.  Los alemanes presentaban su reciente “I Am Nemesis” y por lo que pude escuchar, es un trabajo que mantiene intacta su propuesta de siempre, voces desgarradoras, breaks guitarreros y una basa rítmica que al menos para mí, abusó esta noche  de los triggers a lo Fear Factory, dándole al sonido un toque demasiado “artificial” para mi gusto.

Su frontman Andreas Dörner sigue siendo el perfecto maestro de ceremonias, agitando al público y dando todo lo que tiene, desde el primer al último tema. Hubo momentos de cierta tensión con la seguridad del local y es que la verdad, empujar a la gente a subirse al escenario y tal, con lo de Lamb Of God aún muy presente, tiene un toque de irresponsabilidad…pero bueno, es normal que se intente contagiar a los presentes con un poco de locura. ´I Will Never Let You Down´, ´Davy Jones´ y ´24 Years´, mantenían la tension del show que se vio aumentada ante la version del ´Sonne´ de los espectaculares Rammstein. Con ´The Bogeyman´se retiraron, dejando a los espectadores saciados.

Desde el momento que las enormes T del logo ocuparon su sitio y bajo la banda sonora de Iron Maiden sonaba de fondo, la expectación creció hasta niveles importantes. Había muchas ganas por ver de nuevo a Trivium y a buena fe no decepcionaron, todo lo contrario, se marcaron un show de los que dejan huella.

Sólo con las primeras notas, nos dimos cuenta de que el sonido iba a ser de lujo, fuerte pero con muy buena ecualización, al menos desde el fondo de la sala que es donde yo me encontraba.  Los de Orlando nos dejaron anonadados desde su inicial ´In Waves´ y pudimos comprobar el tremendo carisma que Matt Heafy desprende, a parte de que como vocalista y guitarrista el tipo lo clava. Tanto el otro guitarra Corey Beaulieu como el bajista Paolo Gregoletto les sirven de perfectos coros, alternándose las voces guturales dependiendo del tema. Mencionar  por otro lado al bestial batería, Nick Augusto, exMaruta, que con su espectacular pegada ya fue un espectáculo él solo.

´Rain´, ´Down From The Sky´, ´Entrance Of The Conflagration´….el concierto iba subiendo a un nivel superlative, con la sala entregada llegando a momentos en que literalmente el suelo temblaba cuando todo el mundo saltaba al unísono. ´Black´, ´The Deceived´, ´Watch The World Burn´, ´Dying In Your Arms´, ´Pull Harder On The Strings Of Your Martyr´….toda su discografía se veía representada y bien que los asistentes lo agradecieron con un jolgorio que hacía tiempo no vivía. Con la bestial ´Throes Of Perdition´nos dejaron, bajo una estruendosa ovación y dejándonos con la sensación de que el grupo ha vuelto a retomar el camino que les llevo a ser considerados como uno de las bandas con más futuro en esto del metal, sin lugar a dudas un muy buen concierto de Trivium.