Los Dwarves son una de esas bandas malditas del punk. Blag Dahlia y HeWhoCannotBeNamed son un par de enfants terribles que siguen paseando por los escenarios ese punk rabioso, hiriente y mordaz. Lkos años han ido pasando y ya el grupo ha abandonado su actitud más belicosa e hiriente. Ya no hay peleas, desnudos o provocación constante así como sorpresas asombrosas como la de ofrecer conciertos de poco más de 10 minutos. El caos ha quedado aparcado y lo musical ha quedado aparcado. Aún y así, cuidado, el grupo sigue manteniendo un par de ases en la manga.

Antes del turno de los enanos el cuarteto sueco Terrible Feelings dio una buena muestra de su arte punk. La verdad es que a pesar de su estilo sus looks individuales poco tenían que ver con los clichés clásicos. Desde gafas de pasta a camisetas de Kiss. Lanzaron temas contundentes y rápidos encabezados por los movimientos espasmódicos de su vocalista Manuela. Consiguieron entretener con “Blank Heads”, “The Moon” o “Hollow”. Buenos riffs cortantes y buenas melodías vocales. Las influencias garage eran evidentes y los pasajes lúgubres constantes. La ovación final hizo que nos brindasen un “Trash & Burn” final que fue lo más logrado de su corta actuación.

Con una música digna de dibujos animados y de corte festivo y sonrojante, apareció el cuarteto, bien apoyado por un buen sonido y ante una sala que apenas llenaba la mitad del aforo. Los enanos salieron mordiendo a la yugular, empalmando temas sin descanso alguno y sin apenas hablar con el público. Elmosh empezó desde un buen principio y los saltos y empujones se sucedían ante la velocidad y decibelios. HeWho no estaba en la formación, pero hay que destacar el gran nivel instrumental de su sustituto. El baterista lucía una peluca de vivos colores y andaba semidesnudo. Hizo gala de una técnica espectacular y de una resistencia admirable.

Cayeron himnos como “We Must Have Blood” o la cachonda “Everybodies Girl”. Dahlia bajaba el micro a las primeras filas para que el público pudiese cantar los estribillos. No había pausa. El grupo escupía himnos a velocidades de vértigo y algunos cortes apenas se parecían a lo que han grabado en estudio. Tras “The Dwarves Are Still the Best Band Ever”, Dahlia lanzó una de sus mordaces perlas: “Todos sabéis quye mi pene es el más grande de la sala. Siguieron con “Demonica” y “Fuck Em All”. Demostrando que a pesar de su velocidad endiablada la nitidez y técnica de la banda está totalmente fuera de duda. Finalmente emprendieron una recta final que desembocó en “Free Cocaine”. Pero… nada más.

En media hora habían lanzado unos 25 temas, sin descanso y sin dar tregua. Intachable su entrega y contundencia, pero pagar 18 euros para sólo media hora dejó a mucha gente con cara de tontos. Ni bises ni extras, el grupo se despidió de la misma forma con la que entró. Su batería saludó a la audiencia y se sacó la peluca con una reverencia. Nada más. A la salida estaba Blag Dahlia tomando una cerveza con los teloneros. Concierto breve, brevísimo pero intenso. Posiblemente si hubiera estado HeWho hubiese contentado a todos los asistentes, pero la sensación general es que se podían haber estirado un poco más. Hay que verlos por lo menos una vez. Eso sí, dudo que en mi caso haya una segunda ocasión.

Jordi Zelig Tàrrega

Promotor:Estraperlo

Asistentes:100

Día:20/06/2011

Sala:Estraperlo

Ciudad:Badalona

Teloneros:TERRIBLE FEELINGS

Puntuación:6