SUFFOCATION + BAALPHEGOR + THE EYES

No contentos con hacer una extensa gira por España hace escasos cinco meses, Suffocation improvisaron unos cuantos conciertos por la península aprovechando que venían a Europa para hacer algunas fechas en las islas británicas. Para ello, obviaron la mayoría de recintos en los que habían tocado en la reciente gira y se dejaron caer por salas secundarias, concretamente de Tarragona, La Roca del Vallés, Alicante y Bilbao.

Cansina podía parecer la idea de tener que desplazarse hasta esta localidad colindante con Granollers, pero la ocasión lo merecía. La teórica sala estaba situada en medio de un polígono industrial (fue toda una hazaña encontrarla), y no era otra cosa que una nave habilitada para lo ocasión, en cuya esquina se había improvisado un escenario, con un equipo bastante justito. Cuando llegamos los americanos estaban probando sonido y faltaban un par de horas para que los conciertos dieran comienzo, por lo cual el “momento cerveza” se adivinaba acertado. Así, pues, un tiempo después volvíamos algo más animados a la entrada del lugar, momento en el cual nos percatamos de que los primeros teloneros, THE EYES, un grupo local, ya estaban tocando y, debido a que me costó lo suyo conseguir mi acreditación, no pude presenciar su actuación.

La verdad es que siendo un jueves, celebrándose en un pueblo no muy cercano a Barcelona y tratándose de un grupo que no suele arrastrar a mucha gente, me sorprendió ver que en el interior del recinto había más o menos la misma cantidad de gente que había acudido al show meses antes en la Ciudad Condal, unas cuatrocientas personas, lo cual me alegró y le dio vidilla al asunto. Una vez situado, aparecieron sobre las tablas los gerundenses BAALPHEGOR, que calentaron al personal con su death metal con toques modernos. No se cortaron a la hora de ofrecernos su propuesta, pues no era al primer grupo grande que teloneaban, ya que en el pasado han llegado a abrir para grupos como Vader. Lamentablemente, el sonido no fue para nada bueno, siendo la voz de Miguel Herrera lo que mejor se distinguía. A pesar de ello, cumplieron con su papel.

Pocos minutos después daba comienzo el concierto de los americanos. Si bien como ya he comentado el equipo tanto de sonido como de luces era bastante precario, SUFFOCATION consiguieron ofrecernos un show con sonido ciertamente digno, ya que si estas fieras se caracterizan por algo es por su técnica, su calidad y sus tablas. Desde un principio dejaron claro que no se iban a andar con cucamonas ni con medias tintas y abrieron con un avasallador “Effigy of the Forgotten”, de su álbum homónimo, dejando así patente que no olvidan la trascendencia que en su día tuvo su primera obra de estudio, álbum sin el que no se puede entender la evolución del death metal, ya que se erigió en su día como punto de inflexión y obra maestra por méritos propios. Desde el primer tema el mítico vocalista de la banda Frank Mullen no paró ni un instante de moverse de un lado a otro, sintiendo cada una de las notas en sus propias carnes, lo que ayudó a que a la gente de las primeras filas les poseyera el jodido espíritu del death metal a base de oleadas de headbanging. Mientras que del “Breeding the Spawn” solo recuerdo que tocaran la canción que da título al disco, hicieron un amplio repaso a la que para muchos es su mejor obra, “Pierced From Within” del que cayeron trallazos tales como “Thrones of Blood” o “Pierced From Within”, así como, si mal no recuerdo, la canción que en su día recuperaran de su EP “Human Waste”, la psicótica “Synthetically Revived”. Como no podía ser de otra forma, su visionario guitarrista Terrance Hobbs nos deleitó a base de perturbadores riffs que, con el apoyo de la gran técnica del bateras Mike Smith, hicieron que nos derritiéramos entre tan apetitosos cambios frenéticos de ritmo, tal y como es marca de la casa.

Y a base de caña, casi sin darnos cuentas, nos acercamos a la recta final del concierto, habiendo deleitado a nuestros oídos con guantazos como son “Deceit”, “Surgery of Impalement”, “Immortallity Condemned” o “Despise The Sun”, todas de su más reciente obra “Souls to Deny”, salvo la última, contenida en su EP precedente. Apenas había existido tiempo para el descanso entre tema y tema, pero llegó el momento en que Frank y sus bestias se escondieron tras la tarima, flanqueada, por cierto, por una gran tela negra para disimular el aspecto totalmente blanquecino de la parte interior de la nave. Ni tan siquiera ahora se tomaron un merecido respiro, ya que no tardaron casi nada en volver a saltar a las tablas para ejecutar los bises, entre la que destacó “Tribulation” con la cual la gente se volvió totalmente loca, mientras que Frank Mullen destilaba agresividad hacia todas direcciones, alimentando así la ira de un público enfervorizado.

Valió la pena el paseíto. Suffocation son una garantía y dudo mucho que podamos toparnos con un mal concierto por su parte, por mucho que las condiciones sean adversas. Por otra parte, felicitar a los encargados de organizar el evento por tener la iniciativa de celebrar un concierto underground como este, al más puro estilo de la década pasada. Sed malos.