Stingers rinden un fiel tributo en Barcelona a la leyenda de Scorpions

Una gran noche, redondeada por los locales Ree Kohl, que hacen hard rock americano, y Wild Animal, quienes se atrevieron con un tributo a Running Wild que tuvo a la gente dentro de la sala y bien atenta desde primera hora. Una gran noche de sábado.

El año comienza algo lento en cuanto a conciertos internacionales, pero no es excusa para quedarse en casa y mirar las musarañas, o lo que es peor, la tele. Hay muchos conciertos de tamaño más humilde sucediendo en cualquier sala y en la noche del sábado no se ocurría mejor plan que ver a uno de los mejores tributos a Scorpions que hay en nuestro país, STINGERS. Han actuado en festivales del tamaño del Leyendas del Rock y la manera en que versionan el repertorio clásico de los de Hannover es excelente. Las pintas, el timbre de voz y hasta los movimientos sobre el escenario…no se les escapa ni un detalle.

Alrededor de doscientas personas se desplazaron hasta la sala Salamandra de Hospitalet a ver a los andaluces. Debemos recordar que por mucho que Scorpions llenasen dos noches en Madrid en marzo del año pasado y luego actuasen en el Azkena Rock, la realidad es que no pasan por Barcelona desde hace once años. Concretamente desde verano de 2004, cuando actuaron junto a DREAMAKER en la sala Razzmatazz, presentando “Unbreakable”. Todo esto antes del anuncio de separación, el triplicado de su caché y el anuncio de que ‘nosotros nunca hemos dicho que íbamos a separar’. Vaya, que se marcaron un Kiss por todo lo alto. Pero como al final lo que queda es la música y lo que hacen Stingers es celebrar la música de los germanos, pasamos una noche más que correcta escuchando un setlist de altura.

Comenzaron la noche con “Coming Home”, como mandan los cánones, seguida de “Bad Boys Running Wild”. Un viaje directo a 1985 que supo a gloria y que fue a mejor durante la noche. “Make it Real” terminó de situarnos a todos. Brutal la manera en que se mueve Rudolf Schenker (Javi) y en la que clava las mismas rutinas escénicas de su ídolo a emular. Tampoco se puede obviar el timbre de voz de Panchi, totalmente igual al de Klaus Meine. Verle en “The Zoo” golpeando el cencerro con tres baquetas y lanzándolas al público te hacía pensar que estabas viendo a los Scorpions de verdad. Además, la estatura le acompaña (nada peor que esas bandas tributo a Kiss con un Gene Simmons negro, un Paul Stanley musculado de gimnasio como un culturista y un Ace Frehley con el pelo rizado…distrae mucho) y hasta la ropa es la misma. Clónicos hasta el punto enfermizo.

Hubo muchos grandes momentos a lo largo de la noche, aunque posiblemente todo se podría resumir en dos: “Still Loving You” y “Rock You Like a hurricane”. Ver como reaccionó la sala en esos dos momentos puso los pelos como escarpias a más de uno. Por si uno tiene curiosidad, la banda también interpretó algún tema propio. Uno en concreto, titulado “On the Way”, podría haber estado en “Love at First Sting” sin problemas. Qué destreza!

Una gran noche, redondeada por los locales Ree Kohl, que hacen hard rock americano, y Wild Animal, quienes se atrevieron con un tributo a Running Wild que tuvo a la gente dentro de la sala y bien atenta desde primera hora. Una gran noche de sábado.