Sobredosis de groove en la primera visita de Crobot a España

A nivel discográfico fueron una de las revelaciones de 2014, y el incansable espíritu trotamundos que tanto los caracteriza los ha llevado a pisar España por primera vez en el marco de la presentación de su segundo álbum, «Something Supernatural», con cinco fechas como cabezas de cartel tras patearse el viejo continente abriendo para Black Label Society.

Si bien el aumento de popularidad del conjunto a lo largo de estos últimos años ha sido innegable, uno nunca sabe muy bien qué esperar en debuts de este tipo. España, como todos los países, tiene sus peculiaridades, y en ocasiones lo que moviliza a una buena cantidad de gente fuera de nuestras fronteras aquí atrae a tan sólo unos pocos (y viceversa, cuidado). La elección del lugar fue inmejorable: la icónica Rocksound siempre es el punto de partida para todos esos conjuntos vinculados a las sonoridades más stoner/bluesy/RnR, y para alegría de todos nosotros, se llenó como hace apenas un mes con Mantar.

«The Legend of the Spaceborne Killer» y «Skull of Geronimo» conformaron un dúo implacable para arrancar su actuación y garantizar una buena conexión e interacción con el público desde el primer momento. «La Mano de Lucifer» y «Nowhere to Hide» no se quedaban atrás a medida que el show tomaba consistencia y el sonido empezaba a equilibrarse. El excepcional groove que posee la banda en directo es motivo de veneración, y eso es lo fundamental para un estilo así. Ritmos intensos que no podían dejar a nadie indiferente llevaban la tónica, mientras que la acción en el pequeño escenario no dejaba de ser menos llamativa: saltos y adrenalina para aderezar una dosis de rock n’ roll en la que ellos debían ser los primeros en dar ejemplo.

Cómo consiguen llevar a la perfección el aplastante sonido que tienen en estudio es algo impresionante. Las líneas de batería eran compactas y sólidas hasta el extremo, acompañadas de una tremenda pegada; bajos que si caminaban más saldrían andando ellos solitos por la puerta de la sala; un sonido de guitarra rozando lo perfecto (incluso cuando tocaba hacer ruidos poco convencionales al más puro estilo de Rage Against the Machine) y una voz que probablemente sea una de las más en forma de todo el rock setentero hoy día.

Cerca de hora y cuarto de repertorio, lo necesario para interpretar «Something Supernatural» en su integridad y la sorpresa de ni más ni menos que tres canciones de su próximo trabajo, que será publicado este mismo año: «Upon a Pale Horse», «Full Moon Howl» y «Back at the Blackwoods» nos hicieron la boca agua imaginando cómo será esa próxima entrega. Eternamente agradecidos con los congregados, para el bis desempolvaron una versión de los míticos Mountain, «Never in My Life», y un tema de su primer lanzamiento, «Tap Dancin’ on a Tightrope». ¡Esperamos que con ese nuevo álbum nos vuelvan a visitar!