SKUNK ANANSIE + THE JEZABELS

Después de lo vivido en La Riviera, puedo decir que no he visto una frontwoman como Skin (en vivo y en directo) en toda mi vida. SKUNK ANANSIE se lo montaron de tal manera para que los asistentes recordaran su nuevo paso por España durante un largo periodo de tiempo. En esa lluviosa tarde, los australianos THE JEZABELS se encargaron de intentar calentar un poco un ambiente muy frío con una sala que aún presentaba una muy mala entrada. El cuarteto de Sydney liderado por Hayley Mary venía presentando su disco de debut, ‘Prisioner’. Una obra de pop rock, indie, mezclado con aires atmosféricos que si bien no pegaban demasiado con sus compañeros de cartel, cumplieron en su escasa media hora.

Con algo más de media entrada le tocaba el turno a SKUNK ANANSIE. De primeras, sorprendió un poco que no llenaran… pero algo menos si tenemos en cuenta lo cargado de conciertos que está Noviembre y lo ajustada que está la economía de la mayoría. De hecho, Skin no se cortó en mitad del concierto en agradecer que la gente se molestara en verlos teniendo en cuenta el panorama que tenemos en el país. Y es un detalle  que en el fondo, se agradece. A lo que iba. ¿Por qué decía en frase que encabeza esta crónica que no he visto a nadie así en mi vida? Bueno, he visto a muchos grupos salir a tope de primeras, como ocurrió esta vez con ‘The Skank Heads’ de su celebrado ‘Post Orgasmic Chill’. Siguieron la intensidad con temas nuevos como ‘I Will Break You’, una más machacona ‘I Believed in You’ o la emotiva ‘I Hope You Get to Meet Your Hero’, intercalando entre ellas ‘God Loves Only You’, del infravalorado ‘Wonderlustre’. ¿Qué tiene de especial todo esto? Pues visto (y leído) así, quizá no mucho. Pero cuando ves que desde el primer momento tienes una tía en frente (que pasa sobrada los 40) que no para de moverse, de tener al público comiendo de su mano, y sobre todo, con esa amplia gama de registros, pues te das cuenta de que tienes delante alguien poco común. Y si lo sigue demostrando durante las casi dos horas de actuación, manteniendo el nivel (y la voz) en todo momento…

Porque quizá esa es una de las claves de Skin. No es por desmerecer a sus compañeros de banda (a los que presentó casi cerrando el concierto), pero si ella centra casi toda la atención, por algo será. Perdí la cuenta de las veces que se bajó al foso para no sólo cantar subida a las vallas la gente a sus pies, sino tirarse para hacer crowdsurfing una y otra vez, llevada en volandas por un público que la adora. Eso por no hablar de uno de los momentos de la noche, “andando” literalmente sobre el público unos cuantos metros; el otro momentazo vendría casi al final. Temas nuevos de ‘Black Traffic’ como ‘Spit You Out’, ‘This is not a Game’ o ‘Sad Sad Sad’ (a lo tonto se tocaron casi todo el álbum, que para algo era su presentación) encajaban perfectamente con clásicos de sus obras de los 90, caso de ‘Hedonism (Just Because You Feel Good)’, con esos movimientos sensuales de su cantante, ‘Weak’ o ‘Twisted’. También con la etapa mencionada anteriormente de ‘Wonderlustre’, rescatando ‘My Ugly Boy’. Pero lo más sorprendente, era la facilidad que tenía la banda para intercalar la fuerza y entrega de la mayor parte de sus composiciones, para de repente templar la temperatura con altas cargas de emoción. “Are you reaaaaaaaaady?” gritó terminando ‘Satisfied?’ para enlazarla directamente con su himno más celebrado y conocido, ‘Charlie Big Potato’.

Tras una retirada (algo prolongada) era el turno del bis de rigor, y salieron exactamente igual que al comienzo de su concierto. Otra de las razones por las que cobra sentido la afirmación del principio: ya rondaba la hora y media su descarga, y el nivel de entrega era igual de alto, e incluso mayor que en sus primeras canciones de la noche. Tras un medley, llegaría otro de esos momentos… o “El Momento”, con mayúsculas. A esas alturas, ya era normal que Skin se bajara a cantar con el público, pero no a hacerlo entre ellos. Si ya se había ganado sobradamente a su público, con la interpretación de ‘Little Baby Swastika’ ya sobraban las palabras. Mandó a toda la gente a su alrededor agacharse (obedientes ellos) mientras los más alejados aprovechaban para sacar sus cámaras y móviles para tener un recuerdo. Tras el primer “Who put the little baby swastikka on the wall?” llegó la locura, todo el mundo saltando, botando, sabiendo que aquello estaba a punto de terminarse. De hecho, parecía el final, pero cerrarían de manera sorprendente y acústica, un contraste brutal para todo lo que habíamos visto antes. Los que estuvimos allí, seguramente repitamos la próxima vez. Los que no fueron (o no pudieron ir), no sabéis lo que os perdisteis.

• The Skank Heads
• I Will Break You
• I Believed in You
• God Loves Only You
• I Hope You Get to Meet Your Hero
• Twisted (Everyday Hurts)
• I’ve Had Enough
• My Ugly Boy
• Weak as I am
• Hedonism (Just Because You Feel Good)
• Our Summer Kills the Sun
• This is not Game
• Spit You Out
• Because of You
• Sad Sad Sad
• Satisfied?
• Charlie Big Potato

• Tear the Place Up
• Secretly
• Little Baby Swastika

• You Saved Me