SCORPIONS no son ningunos chavales, eso lo sabemos todos, de hecho Klaus
y Rudolf se acercan a  la edad de ser casi abuelos. Sin embargo y en
contra de lo previsible, ayer por la noche quedó demostrado que todavía
tienen cuerda y años para rato. La energía que estas leyendas del rock
desprenden sobre un escenario es envidiable, a años luz de los patéticos
espectáculos que tipos la mitad de jóvenes que ellos han dado últimamente.
Para mucha gente, sobretodo aquellos que se incorporan ahora a todo
esto, SCORPIONS no son más que un vestigio del movimiento hard/heavy de
los 80’s que llenaba estadios por todo el mundo y encaramaba sus hits en
lo alto de las listas de éxitos de cada país lustros atrás. De hecho hay
quien piensa que "Still loving you" fue compuesta por SONATA ARCTICA,
sin embargo, poca gente realmente conoce la enorme dimensión y
envergadura del éxito que esta banda ha tenido en algunos ámbitos, tanto
musicales o sociales como políticos.

SCORPIONS pueden alardear de muchas cosas y no me refiero precisamente a
sus cuentas bancarias personales (Que pese a sus famosos trapicheos con
Hacienda y las cuentas suizas, deben ser más cuantiosas que las de todos
nosotros juntos multiplicadas por 17). Los de Hanover poseen el mérito
de haber popularizado las power-ballads dentro del hard/heavy, haber
formado parte de la banda sonora de hechos tan importantes para la
historia como la caída del Muro de Berlín o la apertura del régimen
comunista de  la URSS que marcó el final de la Guerra Fría ("Wind of
change") y haber conseguido acercar un sonido, una estética, a gente que
de otra forma nunca habría mostrado interés por este tipo de música.
Da igual que tengas 25, 30 o 40 años, seguro que has cantado en más de
una ocasión alguno de sus himnos o has visto sus videoclips por la
televisión, el legado de SCORPIONS trasciende de lo meramente
rockero/metálico habiendo llegado incluso a codearse con gente como
Michael Jackson o Mikhail Gorbachev.  (¿No existe por ahí una foto de
los SCORPIONS con Felipe González? O lo he soñado…). De cualquier
forma, con todos estos datos solo intento situar a esta banda dentro del
contexto internacional para que los desconocedores de su carrera se
hagan a la idea de lo que han supuesto los SCORPIONS en muchos aspectos.

Musicalmente hablando, SCORPIONS han anunciado a bombo y platillo su
vuelta al rock, ¿Una vuelta sincera? Pues no lo sé, "Eye to eye" de hace
5 años fue probablemente el peor disco que haya sacado nunca una banda
de hard rock aunque visto su intachable curriculum a lo largo de estos
35 años de carrera, ¿Quién soy yo para decirles a estas alturas qué han
de hacer y cómo han de hacer las cosas?. Aún así me dan bastante rabia
algunas de las últimas declaraciones del tándem Klaus Meine / Rudolph
Schenker; "Volvemos al rock porque nos hemos dado cuenta de que vuelve a
existir un público potencial interesado en él". De no ser porque estos
germanos son quienes son, semejantes declaraciones deberían haber ido
directas a un juzgado. Muy estimados señores míos, ¿No se supone que uno
ha de hacer lo que le dictamina el corazón?, ¿Qué es eso de "volver"  al
rock en función del interés que éste suscita entre las masas?, ¿Qué
pasa, que sino hay limusinas, jets privados, y presupuestos millonarios
ustedes no quieren saber nada del rock? Desde luego, puedo entender que
alguien que ha vivido toda su vida musical rodeado de dinero, lujo,
polvo blanco y mujeres se vea en un apuro cuando todo esto empieza a
flojear y busque nuevos estilos aún vírgenes y desconocidos donde poder
volver a exprimir la naranja (En este caso el Pop más insulso y tedioso
de "Eye to eye"). Ahora, tengo claro que probablemente esa caída
enpicada que sufrió el hard/heavy hace una década no se habría producido
(o en su defecto no habría sido tan acentuada) si bandas como SCORPIONS
y muchas otras no se hubieran apuntado al carro de las nuevas
tendencias. ¿Qué fue primero, el huevo o la gallina? Ni idea, pero hubo
una época en la que a todas las bandas les dio por "experimentar" y
mientras sus cuentas bancarias seguían llenándose de 0’s, los fans (tú y
yo) tuvimos que sufrir la escasez de buenos discos de hard/heavy y las
aberrantes producciones de los nuevos iluminados del Metal
(Curiosamente, casi todos ellos acabaron volviendo al hard/heavy… Y
nosotros, ohh fans sufridores y para nada rencorosos, acabamos por
perdonarles sus infidelidades).

En fin, no sé como me lo hago pero siempre acabo hablando de todo menos
del concierto en sí, "Cállate Javi cojones y ves al grano", Ok, ya voy
ya voy.

Los encargados de abrir para SCORPIONS fueron DREAMAKER, la nueva banda
de la srta. Elisa, ex-DARKMOOR. No tengo nada en contra de su música y
mucho menos de ella, pero creo que su propuesta musical no era la más
idónea para un público, en su mayoría de cierta edad, y de gustos
excesivamente clásicos y conservadores. Llegando a la sala poco antes de
que SCORPIONS salieran a escena, no pude presenciar su actuación la
cual, por lo visto, contó con un medley de versiones de METALLICA
integrado por "One", "Creeping death" y "Master of puppets". Ya
tendremos ocasión de verles en la nueva e inminente edición del Ripollet
Rock, donde abrirán para SARATOGA.

Con un ligero retraso sobre la hora estipulada, SCORPIONS saltaron a
escena liderados por el diminuto vocalista Klaus Meine, los guitarristas
Rudolf Schenker y Matthias Jabs, el ex-KINGDOM COME James Kottak a la
batería y el más reciente fichaje de la banda, el bajista Pawel Maciwoda
quien sustituye a Ralph Rieckermann.

Con una decoración de escenario bastante modesta y para nada a la altura
de las circunstancias, SCORPIONS repararon en gastos de mala manera; ni
tan siquiera llevaban telón de fondo. Apenas un gong detrás de  la
batería (¿Lo llegó a utlizar James Kottak?) y unas estructuras metálicas
con focos de luz incrustados en ellas fueron todo lo que pudimos ver
sobre el escenario.

Tanto el sonido como la iluminación fue correcto, para nada
sobresaliente pero sin llegar a destacar sobremanera, lo justo para que
tanto banda como público se sintieran cómodos en la sala. (Más ellos que
nosotros claro está, sus ventiladores les salvaron de derretirse o
pillar una lipotimia como a más de un@ le sucedió).

SCORPIONS lejos de comportarse como unos burgueses enfundados en trapitos
rockeros se comportaron con la audiencia e hicieron todo lo que se
esperaba de ellos. De todas formas, un poco más de comunicación
(improvisada a poder ser) entre Klaus Meine y el público no habría
estado mal puesto que dio la impresión de que todo estaba milimetrado;
Cada uno de los comentarios que Klaus soltaba parecía que se los hubiese
empollado de memoria para recitarlos de forma idéntica y exacta cada
noche (Es bien sencillo, tan solo consiste en cambiar Barcelona por Los
Angeles, París u Osaka).

Junto a Klaus y en la retaguardia, los 2 hachas de SCORPIONS, el rítmico
Rudolf Schenker y el solista Matthias Jabs. Mientras que el primero
formó la banda hace casi 40 años junto a Klaus Meine, el segundo con la
tontería lleva ya desde el "Lovedrive" del 79, tiempo suficiente como
para estar en todo su derecho de decir que ÉL es el guitarrista solista
clásico de SCORPIONS (Y no Uli Jon Roth o Michael Schenker).

Ambos cumplieron su labor a la perfección. Matthias más discreto y
huidizo clavó cada uno de sus solos mientras que Rudolf no paró quieto
ni un solo instante corriendo por el escenario y ejecutando su famoso
movimiento de brazo cual hélice para rasgar las cuerdas de su guitarra.
El arsenal de guitarras Gibson que sacaron hizo las delicias de los
guitarristas allí congregados; Desde todos los modelos habidos y por
haber de la famosa Flying V de Rudolf (clásica, dos mástiles,
acústica…) hasta los modelos Explorer 1976 de Matthias, todas ellas se
pasearon por el escenario para el gozo de los que soñaban poder tener
algún día una igual entre sus manos (ehem).

Algo menos vistosos y observados que los 3 pilares actuales de SCORPIONS
se encontraban James Kottak y Pawel Maciwoda. Ambos cumplieron con sus
labores a la perfección dejando todo el escenario para el lucimiento de
Klaus, Rudolf y Matthias e intentando hacer el mínimo de ruido posible
evitando así desviar las miradas hacia quienes debían ser mirados
(Matthias todavía triunfa entre el sector femenino, más de una intrépida
le lanzó piropos indecentes al germano resultón cual camionero de
volumetría magnificente a una jovenzuela ligerita de ropa, qué cosas oiga).
El setlist de SCORPIONS fue bastante previsible dejando cierta cabida
para algunos de los temas de su nuevo "Unbreakable" como la que
utilizaron para abrir su show "New Generation", sin embargo, de sus 3
anteriores "Face the heat", "Pure instinct" y "Eye to eye", nada fue
llevado al directo pese a incluir, los dos primeros de los 3, algunos
fantásticos temas (Curiosamente, del "Savage amusement", el disco más
descaradamente comercial de SCORPIONS, tampoco cayó nada).

Los clásicos no tardaron en llegar y poco a poco fueron cayendo uno tras
otro, "The zoo", "Bad boys running wild", "Coast to coast", "Big city
nights", "Tease me please me", "Blackout" o "Holiday", con la que
hicieron cantar a las 2500 personas que abarrotaban el Razzmatazz I.
Llegando ya a los bises, y como no podía ser de otra forma, SCORPIONS
interpretaron sus temas más conocidos, "Wind of change", "Still loving
you" y "Rock you like a hurricane". Cuando todos creíamos que la velada
iba a acabar aquí, la banda volvió a salir e interpretó "When the smoke
is going down" y uno de sus temas más heavies, "Hit between the eyes"
(canción que apareció en la banda sonora de alguna película que no logro
recordar). El setlist lo completaron sendos solos de batería y guitarra,
ambos bastante simplones y prescindibles por parte de James Kottak y
Matthias Jabs.

Fue curioso que Michael Schenker, hermano de Rudolf, a quién hemos visto
entre el público en algunos bolos de la ciudad condal (Por lo visto
ahora vive aquí), no se subiera al escenario con la banda que le vio
nacer, los SCORPIONS, para interpretar algún viejo himno del grupo. Las
especulaciones son múltiples aunque no creo que tras 25 años fuera de la
banda todavía esté en discordia con su hermano.

En resumidas cuentas, fenomenal descarga de los SCORPIONS que de bien
seguro dejará huella entre los que tuvimos el placer de asistir al
evento. Tan solo espero que no tarden otros 16 años en volver a Barcelona…

Texto & fotos: Javi Metal

Datos:

Sala Razzmatazz I
Promotor: Rocknrock

Asistencia: 2500 personas

Día:21/07/2004

Puntuación:8