A pesar de la larga duración y de algún altibajo en la voz, lo cierto es que Cradle of Filth siguen en forma, y con esta formación cada vez más asentada, dejan atrás los años más oscuros del grupo.

La ansiada visita de los británicos Cradle of Filth llegó por fin la noche del 16 de Febrero, con la banda trayendo bajo el brazo su último y alabado trabajo, “Cryptoriana – The Seductiveness of Decay”, y acompañados por los portugueses Moonspell.

La sala Mon acogió un lleno absoluto con dos bandas que se han caracterizado a lo largo de su historia por un sonido único e irrepetible, y eso hizo que se llenara la céntrica sala madrileña. Un cartel de lujo para una noche en la que todas las miradas estaban puestas en los cabezas de cartel, pero que terminó con los “acompañantes” llevándose los aplausos.

Moonspell nos visitaban nuevamente, esta vez como segundos de a bordo, y con su reciente trabajo, “1755” abanderando su actuación. Si bien en su último paso por nuestros escenarios dejaron sensaciones muy frías, en esta ocasión decidieron dejarnos sin habla. Se comieron el escenario, literalmente, marcándose uno de los mejores directos que les he podido ver.

La clásica salida a escena con la gabardina, el sombrero y la linterna de época fue el primer paso para una grandiosa actuación, que iniciaron, como no, con “Em Nome do Medo”, una de las mejores composiciones de la banda. El sonido acompañó desde el primer momento, espoleando al grupo y presentando al respetable, “1755”, sonando mucho más oscura que en estudio.

Moonspell (Foto: Javier Bragado)

Cambio de tercio y de vestimenta, con la máscara de pico que recuerda a Assassin s Creed, clase rápida de historia para contarnos la inspiración de uno de los mejores temas del nuevo disco, “In Tremor Dei”. En este álbum conceptual creado en torno al terrible terremoto de 1755 que dejó la capital lusa devastada, y que a un servidor le ha gustado mucho. dejando patente que los nuevos temas suenan espectaculares en directo.

A pesar que el arranque se centró en este nuevo trabajo, el público estaba respondiendo con entusiasmo al que, le pese a quien le pese, fue el concierto de la noche. Presentado el disco y sin apenas respiro, era la hora de poner en liza la historia musical de la banda, con la veloz “Night Eternal”. Pero los portugueses están muy orgullosos de su nuevo disco, y por eso cayó otro tema más, “Ruinas”, quizás el menos sorprendente del álbum.

Moonspell (Foto: Javier Bragado)

“Opium” y “ Evento” son la muestra de que el grupo ha sabido evolucionar su sonido, y puestas en escena una detrás de la otra es la muestra perfecta de que estamos ante una de las mejores reprentaciones del metal extremo. Pero ser la letra pequeña del cartel tiene su precio, y se acercaba el final de su show, cerrado magistralmente con “Todos Os Santos”, “Alma Mater” y “Full Moon Madness”. La gente les despidió con una gran ovación, que la banda supo agradecer saludando a todos los asistentes que pudieron y repartiendo púas por doquier.

El nivel impuesto por Moonspell era difícil de superar, pero las ganas de Cradle of Filth hacían presagiar que lo mejor estaba por venir.

Las ganas eran tantas que a muchos les pilló desprevenidos, con el grupo saliendo casi sin avisar a escena, vestido Dani con ropajes más propios de las lunas de Endor. Esta vez sí, Dani se ha sabido rodear de enormes músicos, y con un sonido bastante nítido, iniciaron su concierto con los clásicos cabreos del vocalista con su técnico de sonido, que sudaba la gota gorda al lado del escenario intentando tener contento a su jefe.

Cradle of Filth (Foto: Javier Bragado)

Tengo que admitir que las casi dos horas de concierto del grupo se me hicieron largos, a pesar de que no se dejaron nada en el tintero y repasaron sin piedad gran parte de la discografía del grupo. El sonido acompañó, y Dani está en un gran momento de forma, habiendo dejado atrás las dudas generadas en sus últimas giras, pero aunque es el alma y cuerpo del grupo, lo cierto es que el buen rollo lo aportaron sus músicos, ya que él se mantuvo gran parte del concierto al lado de la batería al fondo del escenario. Eso sí, cuando se acercaba a las primeras filas, la gente enloquecía, pues grande es la sombra del menudo vocalista.

Cradle of Filth (Foto: Javier Bragado)

Con sus escuderos fieles ya asentados tras tres años juntos, en cuanto Dani se olvidó de estar continuamente corrigiendo el sonido, el concierto tomó otro cáliz y comenzó a ser lo que se esperaba: una brutal noche de Death Metal. Casi treinta años de carrera son suficientes para poder decir que este grupo es único e irrepetible, con cortes como “The Death of Love” o “Heartbreak and Seance”, mezclando la oscuridad gótica con la voz tan característica del líder de la banda.

La maquinaría de las tinieblas dio un respiro tras “You Will Know the Lion By His Claw”, un respiro necesario, tanto para la banda como para el público, y sino que se lo digan al guitarra, que sudaba a chorros. Tras el breve parón, volvieron a la carga, esta vez trayendo al tablado esa rareza que es “The Promise of Fever”, que en su momento asentó las bases del Black Metal más vampírico.

La noche llegaba a su fin con “Blooding the Hounds of Hell”, en una gira que los fans de la banda agradecen el empeño de no dejar sin tocar ni un centímetro de la larga trayectoria musical que les ha llevado a ser un auténtico ícono del Metal Extremo.

A pesar de la larga duración y de algún altibajo en la voz, lo cierto es que Cradle of Filth siguen en forma, y con esta formación cada vez más asentada, dejan atrás los años más oscuros del grupo.

Promotor:Madness Live

Día:2018-02-15

Hora:20:00

Sala:Mon Live

Ciudad:Madrid

Puntuación:9