Apenas 250 personas se dieron cita  esta vez para presenciar la descarga de los italianos, frente a las más de 600 que presenciaron el show hace un año en la sala Razzmatazz 2. Sin duda, el que la anterior vez hubieran transcurrido más de 7 años desde su última visita y que en esta ocasión el show cayera entre semana y fuera de Barcelona ciudad tuvo bastante que ver. A pesar de ello, me esperaba un poco más de gente, a decir verdad.

 

Transcurrió nada más y nada menos que una hora desde que entré en la sala hasta que una banda se subió al escenario. Los dos grupos teloneros, desconocidos para mí, ya habían tocado. Lo cual me hace replantearme, ¿ha dejado de tener sentido la función de los teloneros de caldear el ambiente y de entretener al público hasta el momento álgido de la noche? Porque todo lo que pudieron haber caldeado, os aseguro que una horaza se enfría y bien… Fuera a causa de problemas técnicos o no, lo cierto es que no dejó de chocarme este asunto y eché de menos unos teloneros que, por lo visto, para poder ver debería de haber llegado prácticamente al mediodía.

 

De tal forma, sobre las 22:00 de la noche, saltaban a las tablas los adalides del spaghetti metal, ahora con Tom Hess substituyendo al escindido Luca Turilli. Tom es un tipo cuya calidad musical está sobradamente contrastada, en gran parte debido a los muchos e interesantes tutoriales que podemos encontrar en Youtube mismamente (o en su página web), algunos de ellos referentes al "sweep-picking", una de las técnicas más reconocidas de Luca. Teniendo esto en cuenta, estaba claro que sobre el escenario esa noche nos íbamos a encontrar con una solvencia técnica incuestionable, bien secundada por las labores de Roberto de Micheli, quién también se ha subido al barco recientemente.

 

No disfrutamos esta vez con un show tan espectacular y equilibrado como el de hace un año. En aquél entonces un sonido algo mejor, unas orquestaciones sampleadas con mayor presencia, una interpretación por parte de Fabio más excelsa si cabe y un ambientazo bastante más abrumador, elevaron la intensidad hasta un punto inesperado por la mayoría.  No se me malinterprete, el de esta noche fue un show realmente bueno, pero las comparaciones, siendo el otro concierto tan reciente, son inevitables, y gana el anterior por unas cuantas décimas.

 

Pese a que sus dos obras maestras (sus dos primeros discos) no tienen parangón, los dos últimos álbumes editados por la banda poseen una calidad muy competente. De ellos salieron los temas que ocuparon la primera recta del show, con cortes como "From Chaos To Eternity" (no sin antes colarnos dos introducciones seguidas, para no perder la tradición) o "I Belong to The Stars", pieza de gran composición (una de las mejores del último compacto) e interpretada a la altura de las circunstancias, con un Fabio Lione que ya se encontraba en plena faena, demostrando que superó hace tiempo las críticas de sus inicios, como el gran cantante que es. La bonita balada "Lost In Cold Dreams" nos dio buena cuenta de ello, pese a que un servidor preferiría tener la oportunidad de escuchar algún día en directo "Wings of Destiny", puestos a elegir…Un Fabio que, por cierto, se dirigió durante la mayor parte del show al respetable en un castellano bastante bueno, hecho que le permitió entrar en gran sintonía con el público, bastante alborotado para no ser un gran número. Gran parte de la culpa la tuvieron, eso sí, los adolescentes más jovencitos que se encontraban en las primeras filas, con pancartas y bastante revolucionados.

 

Por cierto, quizá sean manías mías o quizá no, pero no pude evitar fijarme en el gran número de temas con coros festivos y gaitas que sonaron (al fin y al cabo, la banda no tiene tantos), hecho que me hizo pensar en una posible voluntad manifiesta de querer acercarse a sonoridades más de moda en la actualidad como son  las referentes al viking de nueva hornada. Como muestra un botón: el estribillo tabernero de "Triumph or Agony", el arrebato folk que es "The March of the Swordmaster" o la gaitera "The Village od Dwarves". Curioso cuanto menos. ¿Estará pensando la banda en regalarnos un disco de power viking?

 

Lo cierto es que el set list fue lo que se dice variado. Temas rápidos a doble bombo, cortes a medio tiempo, baladas, momentos folk e incluso ese tema que los fans identifican como uno de los cortes de lo que hubiera llegado a ser "Rhapsody In Black", proyecto que la banda anunció en su día y desechó finalmente en el cual estaban dispuestos a explorar sonoridades algo más extremas. Estamos hablando de la canción "Aeons of Raging Darkness", en la que Fabio se desgañita a gusto y la batería se lanza con un tupa-tupa bastante rápido sin llegar al blast beat. A destacar de nuevo el momento "Land of Immortals", elección inamovible de la banda para dar cabida en sus set lists a la única representante del primer álbum, un gran tema por otro lado. Uno de los momentos álgidos de la noche llegaría de la mano de su laureado "Dawn of Victory", aunque no pude evitar echarme unas risas con las trompetas que Alex Staropoli lanzó desde su teclado, ya que lejos de asemejarse a las del disco sonaban a medio camino entre trompeta y pedorreta. ¡Muy divertido!

 

"Holy Thunderforce" sería otro buen punto de inflexión, bastante celebrada, aunque ni por asomo tanto como su "Emerald Sword", que sonaría ya en los bises y que lograría que moviera las greñas hasta el apuntador. Nada más ni nada menos que un concierto de dos horas fue lo que nos brindaron RHAPSODY OF FIRE, lo cual no está nada mal en los tiempos que corren. Se quedó a gusto hasta el más pintado. Siguen manteniendo la línea que ya marcaron hace algunos años en directo, concisos, solventes y profesionales, alardeando una calidad fuera de toda duda y por encima de las voces críticas.

 

Ahora nos quedará por ver que da de sí la otra cara de la escisión de RHAPSODY, LUCA TURILLI»s RHAPSODY, proyecto que por otro lado espero con expectación. No en vano, los discos en solitario de LUCA TURILLI me gustaban más que los compactos que su banda madre publicó de "Dawn of Victory" en adelante. Veremos qué tal termina todo esto, pese a que mientras ambas agrupaciones lleven la calidad por bandera (y todo parece indicar que así será), nosotros seremos los grandes beneficiados.

Texto: Penumbra (penumbra@themetalcircus.com); Fotos: Sergi Ramos

Promotor:GMF

Asistentes:200

Día:03/04/2013

Sala:Salamandra 1

Ciudad:Hospitalet de Llobregat

Puntuación:8