Noche de clásicos y tributos de la mano de consagradas bandas de versiones patrias. No sabía con qué ambiente iba a encontrarme en una velada de estas características, y lo cierto es que si bien  no se registró una entrada del todo mala en la sala Mephisto, la concurrencia sí que anduvo algo fría, obteniendo las bandas una respuesta correcta pero sin lugar a dudas inferior a la correspondida por sus méritos sobre las tablas. Quizá faltaba algo más de alcohol en sangre  o se trataba de un público demasiado ecléctico, no lo sé, pero lo cierto es que descargas como las vividas esta noche en Barcelona podrían haber obtenido una respuesta abrumadora en un ambiente más fiestero como podría ser el marco de un festival por ejemplo. Sea como fuere, dudo mucho que alguien saliera decepcionado con ninguna de las bandas, que rallaron a un gran nivel.

 

Con muy poquita gente todavía en frente de ellos salieron BLACK ROSE a brindarnos un buen puñado de versiones de THIN LIZZY. Interpretaron el set más corto de la noche, pero se lanzaron a morder con algunos de los temas más granados de los irlandeses, piezas interpretadas en su mayoría por la misma banda madre cuando la vimos hace un par de meses en la sala Apolo (menudo conciertazo aquél).  "Jailbreak" y "Don»t Believe A Word" fueron seguidas por la celebérrima y mil veces versioneada "Whisky In The Jar". Para mi regocijo, la interpretación de "Massacre", con ese riff tan cañero que se te queda grabado en la mente para siempre. Musicalmente se podría decir que lo bordaron bastante, si bien la banda sonaba más compacta en los pasajes más cañeros, claramente por una mera cuestión de equipo, sonorización y acústica que impedía disfrutar en toda su grandeza de los momentos más delicados. Sin llegar a sonar mal en ningún momento, quede claro. Con Lucas haciendo las veces de Phil Lynott y dando algo de color al escenario con sus movimientos, el resto de la banda se mantuvo durante todo el concierto en un segundo plano, más inmóvil, preocupándose de que las canciones sonaran del todo precisas. Así pues, pese a que les faltó una puesta en escena con más garra, la interpretación de cortes como "Military Man", "Are you Ready" o la coreable "The Boys Are Back In Town", con la que se intentó que el público participara y con la que cerraron, valieron su peso en oro. Una gran celebración del 25 aniversario de la muerte del genio Phil Lynott.

 

Por alguna razón venía yo con la idea en mente de que KILLING MACHINE iban a ser los últimos en tocar. Sin embargo, estaba equivocado. Su gira "Forever Priest Tour 2011" está sirviendo para conmemorar sus 5 años como banda, hecho que coincide con el anuncio de la retirada y gira final de la mítica banda británica liderada por el carismático Rob Halford. Con todo ello a tener en cuenta, la banda nos presentaba una gira y una puesta en escena cuidadosamente preparada. Sin perder excesivo tiempo con el cambio de backline, comenzaron a sonar al amparo de un juego de luces y con el escenario vacío los primeros acordes de "The Hellion" para dar paso inmediatamente a "Electric Eye", con la banda saltando al escenario y con el alma gemela de Rob Halford reproduciendo los gimmicks escénicos de éste ya desde un buen principio, para regocijo de los sibaritas del tan venerado como amanerado frontman. El concierto fue claramente de menos a más. Mientras que al principio del show a la banda se le notaba en proceso de encontrar la comodidad sobre el escenario, a medida que avanzaban los temas los componentes se fueron soltando bastante más hasta verlos realmente disfrutar sobre las tablas. De hecho fue en la segunda mitad del show cuando vimos a su cantante realmente sorprender con su voz y arrancar unos cuantos aplausos a la concurrencia. Los temas más conocidos de JUDAS PRIEST fueron ubicados de forma estratégica en el set list de forma que los menos duchos en la discografía de la banda mantuvieran su atención a lo largo de todo el show. Tras "Riding On The Wind" y el mid tempo "Heading Out to the Highway" llegaría el primer hit del concierto de la mano de "Breaking The Law". Y aunque más que rompiendo las reglas, esa noche terminaron "rompiendo las cuerdas" (el guitarrista tubo que salir corriendo a por otra guitarra más tarde cuando rompió una cuerda, si mal no recuerdo, durante la interpretación del "Painkiller"), posiblemente fue a partir de este tema cuando la sala registró su máxima afluencia y con ello pudimos disfrutar todos de un poco más de ambiente. Ya con la banda mucho más suelta, llegaríamos a la parte central del set principal con una buena ristra de temas muy celebrados como fueron "Metal Gods" y, cómo no, "Painkiller", tan sólo separados por un buen solo de batería que acertaron muy bien en fusionar con el inicio de este último tema, que fue cantado por el frontman bastante mejor de lo que lo canta actualmente Rob Halford. Es decir, a pesar de quedarse alguna octava por debajo del original (inalcanzable) al menos no optó por hacer directamente guturales, como hemos visto hacer a Rob en los últimos años más de una vez… Podríamos decir que fue "Turbo Lover" la que mejor les quedó, de hecho la bordaron sin duda. Y siendo una de las canciones favoritas de quien aquí suscribe, un servidor que lo disfrutó de lo lindo. Todas las canciones que vendrían a continuación fueron de lo mejorcito de la noche a nivel de interpretación y feeling. La progresiva, extensa y cambiante "Victims of Changes",  "I»m A Rocker" y "The Ripper" nos hicieron retroceder unos cuantos años atrás, pudiendo cerrar los ojos y sentir el cosquilleo en el cogote de una época añorada por muchos. El interesante juego de luces (algo en lo que ha mejorado bastante la sala Mephisto en los últimos años) y el uso inteligente del humo ayudaron también a crear un ambiente ideal. La bastante fiestera "Living After Midnight" se revelaría ideal para despedir el show antes de los bises.

 

El público, algo frío a pesar de todo, pareció tener que concienciarse bastante para dar algunas palmas y requerir de nuevo la presencia de la banda. Con "Hell Patrol" y la movidita "You»ve Got Another Thing Comin»" anunciaban su retirada definitiva, no sin antes obsequiarnos con un regalito más en forma de "Hell Bent For Leather", durante la cual tuvimos la oportunidad de ver de nuevo todo ese poderío genuino a las guitarras por el cuál se recuerda a los temas más rápidos de Judas, dando el do de pecho los guitarristas de KILLING MACHINE a la hora de reproducir esos dúos Tipton / Downing por todo lo alto. Gran show de los barceloneses, que se erigen una vez más como la banda de versiones por antonomasia a nivel peninsular.

 

Para cerrar la velada nos encontrábamos con ON THE ROADS, banda tributo a Ozzy Osbourne que tampoco había tenido la oportunidad de ver nunca en directo, pero que por lo visto no solo rinde tributo a OZZY OSBOURNE la banda sino también a toda la carrera del vocalista, ya que algunas de las piezas más granadas de BLACK SABBATH también sonarían esa noche. Aunque viendo el nombre de la banda, está bien claro que tienen muy presente también a Randy Rhoads como figura imprescindible a homenajear.  Desconocía que el también cantante de WARCHETYPE, Iban Arrieta, era el voceras de esta banda tributo. Todo un figura entregado al doom y sin lugar a dudas el personaje ideal para interpretar al madman, culo inquieto con dotes interpretativas tal y como se encargó de demostrar durante toda la actuación. "I Don»t Know", "The Ultimate Sin", "Secret Loser"… el repertorio estuvo bastante bien escogido y a buen seguro que los seguidores más acérrimos de Ozzy gozaron como enanos. Con las canciones más conocidas lograron hacer que el público se animara un poco, pero sin lugar a dudas, esa noche ya no iba a despertar, continuando con su apatía generalizada, muy a pesar de los esfuerzos de Iban / Ozzy, que ajeno a la pasividad reinante no paró ni un instante de interpretar y moverse, como ha de ser. Así pues "Mr Crowley" fue el primer hit en caer, si bien también sonarían "Bark At The Moon" o la sensacional "Shot In The Dark". Menos habituales pero no menos interesantes, "Thank God For The Bomb", "Lightning Strikes" o "Flying High Again" sirvieron para que la banda desplegara todos sus artes en escena y pudiera demostrarnos su calidad musical, especialmente Sergio Esteras en las partes solistas que en su día interpretara Randy, si bien todos rallaron a un gran nivel. "Iron Man" sonó de fábula incluso con el bajista Oscar desapareciendo repentinamente del escenario. Y es que por lo visto sufrió algún tipo de indisposición física que le hizo ausentarse rápidamente. Al acabar el tema y tras unos minutos de incertidumbre durante los cuales el público no sabía demasiado bien si el concierto había acabado o no, volvieron a la carga con la interpretación de "Crazy Train" y con Oscar tocando sentado desde bastidores. Con "Paranoid" darían fin a la velada, con el cantante y bajista de BLACK ROSE a las cuatro cuerdas de forma totalmente improvisada para salir al paso. Quién iba a decir que a estas alturas veríamos a Phil Lynott tocando con Ozzy Osbourne. Sobretodo porque no sé cuál de los dos está más muerto.

 

Gran velada de versiones, todo un paseo por una gran parte de la historia del rock duro a cargo de tres grandes bandas.  

Texto y Fotos: Penumbra (penumbra@themetalcircus.com)

Promotor:Monsters of Cover

Asistentes:150

Día:12/03/2011

Sala:Sala Mephisto

Ciudad:Barcelona

Puntuación:7