A falta de que mi compañero Varo os traiga una extensa crónica de lo acontecido en el aspecto musical durante la pasada noche del Lunes 13 de Julio, he considerado oportuno traeros algunas impresiones desde la perspectiva de alguien que pudo ser testigo de la descarga de las bandas a pie de escenario. Es por ello que algunos aspectos serán distintos o tendrán una óptica diferente a la que aporte mi compañero.

En cualquier caso, he aquí las primeras impresiones del evento. Para empezar he decir que el número de personas que se mueve entre bambalinas es inmenso, con muchos miembros del equipo técnico y demás roadies o pipas. No es de extrañar que hubiese palés completos de agua, cerveza y demás avituallamiento para todo el personal que trabaja en estos montajes. Me comentaba alguno de los miembros del staff que llevaban trabajando desde las 8 de la mañana. Un pasillo delimitado por vallas metálicas definía la configuración del escenario en forma de cuadrilátero, enmarcado en el centro de la pista. De la misma manera, éste estaba conectado con el backstage por un pasillo que se descubría tras sobrepasar unas grandes lonas negras. Hubo público que decidió ponerse en este lugar para ver la salida de los miembros de las bandas.

Lo que si que es de recibo destacar fue la gran armonía existente entre todo aquel encargado de ésta o aquella labor entorno a los grupos y al escenario. Buen trato y buena formas. La tarea detrás de la cámara no se hizo del todo fácil por aquello de que los músicos podían recorrer de un lado a otro el escenario, haciendo que nuestros objetivos corrieran de arriba abajo para poder traeros las mejores instantáneas posibles. En cualquier caso, y luego visto desde arriba, creo que esa disposición de la tarima y los amplificadores facilita las cosas a la hora de ver un concierto tan multitudinario.

 Pese a todo, no hubiera estado de más haber contado con un cámara para poder seguir al detalle lo que acontecía en el escenario y haberlo proyectado por las pantallas. No es que sea la norma, pero es una posibilidad.

MASTODON fueron los primeros en salir, haciendo efectivo el cambio de orden en las bandas, según lo esperado. Me pasó algo parecido a lo que pude vivir con TOOL. Con los pedazo de discazos como “Leviatahan”, “Blood Mountain” – para mi sobresaliente – y el más reciente “Crack The Skye”, me faltó ese plus de fuerza y potencia que de sobra atesora la banda y que sin embargo siempre se ve relegada por la frialdad del primer “slot” en los conciertos como banda de soporte de grandes formaciones cabezas de cartel.

El sonido, eso sí, muy descafeinado debido al margen de equipo y maniobra del que disfrutaron los de Atlanta. A Troy se le vio algo cansado, pero no me extraña dado el tute que se está metiendo la formación y que se va acumulando con el paso de tiempo. Lo que está claro es que es una bandaza que necesitan que les dejen más cancha; la calidad y el gusto lo tienen – ¡gran camiseta de RED SPAROWES-.

Los siguientes en discordia serían LAMB OF GOD. El esquema fue parecido. La gente parecía entrar a cuentagotas y a un ritmo más lento de lo esperado, y el graderío a esa hora todavía presentaba un aspecto flojo.

El sonido no era el óptimo y todavía se montaba algún que otro barullo. La banda no es nueva en esto, y saben adoptar la posición requerida para estas ocasiones: brutalidad y técnica. Pese a todo, formaron parte del equipo de los damnificados en el aspecto sonoro. No les quito mérito por la actitud y música.

Tras un retraso de unos 25 minutos sobre el horario previsto y con el entretenimiento de base de mano de uno de los hijos de alguien del staff de la banda, METALLICA saltaban al filo de las 9:30 con las armas de jugar con todo el equipo humano y técnico a su favor, con la garantía que ofrece un pabellón cubierto – nada de vientos o acontecimientos inesperados – y a sabiendas de que el público que había agotado los tickets en tan sólo una semana, se volcaría con ellos.

Con el “viento” a su favor, los jinetes de negro tomaron posiciones y entre penumbra y rayos láser la cosa comenzó a andar. No entraré a valorar set list ya que he podido ver conciertos actuales y antiguos de la formación y obviamente soy consciente de las diferencias. Personalmente me habría gustado que hubieran dado más cancha a un álbum como “Ride The Lightning”, pero aquí ya cada cual puede hacer su valoración personal. Se que traían disco nuevo bajo el brazo y que había que presentarlo, así que no daré muchas más vueltas al apartado del set.

Desde el techo pendían 4 féretros, referencia de METALLICA en discos, arte y simbología, que escondían más luces si cabe, a sumar al arsenal de móviles y demás que ya llevan de por sí. En cuanto a calificaciones por músicos: Hetfield mejor que en el Electric, Hammet y Ulrich con algún que otro despiste, y Trujillo cumplidor.

Eso sí, los años y los excesos no pasan en balde, y a los músicos se les ve ciertamente desmejorados, pese a que dieron la talla dentro de lo que se les puede exigir. Efectos previamente vistos pero solventes, un escenario expositor de guitarras y pasarela de músicos que iban de un lado a otro dedicando guiños al personal y algún recurso final a modo de globos con el logo de METALLICA fueron algunos de los detalles que nos dejó la noche.

En definitiva, un concierto en mi opinión bueno en líneas generales, que si no sirvió para otra cosa, al menos supo satisfacer las expectativas de los nuevos fans y en menor medida, la de los seguidores de toda la vida que llevan escuchando desde el “Killem All” a los americanos. Pronto Varo os traerá un detallado resumen con más detalles de la actuación.

 

Alejandro Pérez


METALLICA + LAMB OF GOD + MASTODON

Aún sigo pellizcándome por el espectáculo musical, de luces y pirotecnia que se pudo ver en el madrileño Palacio de los Deportes. Algo que en principio es bastante normal en un concierto de METALLICA, pero que esta vez resultó aún mucho más vistoso gracias a que, por fin, traían su escenario propio rectangular. Y eso que el setlist del que pudimos disfrutar fue seguramente de los peores que han tocado las últimas fechas… Pero empecemos por sus teloneros, que ya tienen suficiente nombre como para darles la importancia que se merecen.

Como ya escribí en la crítica de ‘Crack The Skye’, MASTODON nunca habían sido santo de mi devoción hasta ese álbum. Más melódico, incluso algo más accesible, tiene ingredientes que sus obras anteriores no tenían, y esa ha sido la razón por la que haya podido disfrutar y descubrir sus discos anteriores. Pero siempre han arrastrado el comentario de que en directo dejan mucho que desear frente a sus grandes obras de estudio, y ayer no fue una excepción. En su defensa diré que no creo que ese escenario les hiciera justicia, y se pasaron casi todo el tiempo en un lado de el mismo, como si la otra mitad no existiera (normal, estos no tenían repartidos micrófonos por todas partes como METALLICA). A medio gas, fríos, con mal sonido… no se dieron las mejores circunstancias para poder hacer un concierto en condiciones. Además, los retrasos en los accesos, con la apertura de puertas tan solo media hora antes del comienzo de actuaciones, y con colas de miles de personas esperando en los alrededores, no ayudó a que les viera mucha gente, lo que seguro que restó ganas al cuarteto de Atlanta. Ya para rematar la faena, el orden de los teloneros en principio se cambió la misma mañana. A A pesar de los pesares, y perdiéndome el comienzo del concierto, abrieron con ‘Oblivion’, y ya desde que conseguí entrar por completo, se notaba cierta apatía generalizada, que se transmitía del público al grupo y viceversa, y aquello no hubo manera de levantarlo en la media hora escasa que estuvieron en el escenario.

Ni los temas antiguos, como ‘Iron Tusk’ o ‘The Wolf Is Loose’, más acelerados y pesados consiguieron hacer mover a un público que estaba más pendiente de encontrar su sitio, ya fuera en la grada o en la pista, que del propio concierto. Digo yo que para entrar en ambiente, y a pesar del poco tiempo del que disfrutaron, no hubiera venido mal algo de comunicación con el público, pero no fue así. Final descafeinado con ‘March of the Fire Ants’, para un concierto igual de descafeinado. Pero no se me quitan ni la esperanza ni las ganas de poder ver al grupo en buenas condiciones.

Set List MASTODON

  • Oblivion
  • Blood and Thunder
  • The Wolf Is Loose
  • Crystal Skull
  • Crack The Skye
  • Iron Tusk
  • March of the Fire Ants

Tras el final de la actuación de MASTODON, un aluvión de equipo técnico tomó el escenario, y en poco más de cuarto de hora ya estaba todo listo para que los cinco componentes de LAMB OF GOD, de Richmond ‘motherfucker’ Virginia tomaran el Palacio con muchísimas más ganas que sus predecesores, básicamente porque se trata de un grupo mucho más dinámico sobre el escenario por su estilo. La intro de su último álbum, ‘The Passing’, dio paso a ‘In Your Words’, y ya con algo más de gente en el recinto, se empezó a ver movimiento… pero con un sonido que todavía dejaba que desear, ya que la voz de Randy, según los temas, apenas se podía distinguir.

De ‘Wrath’, aparte del tema inicial, pudimos disfrutar de ‘Dead Seeds’ y ‘Set To Fail’, que alternaron con temas del resto de su discografía. ‘Walk With Me In Hell’ estuvo acompañada de manera espectacular de un juego de luces rojo y amarillo para hacer honor a su título y meternos en el infierno, ‘Now You»ve Got Something To Die For’ fue coreada por el público a petición de Randy, ‘Ruin’, ‘Laid To Rest’… Sus temas más conocidos iban cayendo uno a uno en los cuarenta y cinco minutos que tuvieron. Mención especial para Chris Adler, un batería sobresaliente, aunque diera la sensación de que su instrumento sonaba cuando le daba la gana. Algunos echamos en falta temas como ‘11th Hour’, ‘Hourglass’ o ‘Pathethic’, pero para ser la primera vez que venían a Madrid, tal y como dijeron en alguno de sus discursos, cumplieron de sobra, al menos en ganas, a pesar de los problemas de sonido. Terminaron su actuación con ‘Redneck’ y ‘Black Label’, con un amago en esta última de wall of death por parte de una minoría del público, aunque con el poco espacio que había, bastante hicieron. En definitiva, otro grupo que debería repetir por aquí pero en una sala de medio aforo acorde al status que puede tener en nuestro país. Impagable el momento en el que alguien del público sentado en la fila superior me obliga a sentarme; ver para creer, un grupo como LAMB OF GOD tocando y estar sentados como si aquello fuera el cine, faltándole las palomitas.

Set list LAMB OF GOD

  • The Passing
  • In Your Words
  • Set To Fail
  • Walk With Me In Hell
  • Now You»ve Got Something To Die For
  • Ruin
  • Dead Seeds
  • Laid to Rest
  • Redneck
  • Black Label

Cualquier hueco que hubiera, ya fuera en pista o en grada, quedó ocupado poco antes de que dieran las nueve de la noche. Y aún así, tuvimos que esperar media hora de retraso para que los cuatro jinetes del Apocalipsis aparecieran en escena. ‘The Ectasy Of Gold’ no podía faltar, y enlazó el comienzo de ‘That Was Just Your Life’ (una cosa habitual ya las intros enlatadas en el grupo). Reconozco que con ese comienzo me vine abajo parcialmente, porque parecía que en los últimos conciertos se habían olvidado de ese comienzo para empezar directamente con clásicos como ‘Blackened’ o ‘Fight Fire With Fire’ (ninguna de ellas presentes); mala suerte, pero el espectáculo de luces ayudó a que aquello tomara ambiente de una manera rapidísima y espectacular, a modo de lásers. Ocho ataúdes colgaban del techo, y los cuatro centrales se movían e inclinaban como si se tratara de naves espaciales para, según el momento, iluminar a unos y otros. Pronto empezaron con los clásicos, de la mano de ‘For Whom The Bell Tolls’ o ‘Holier Than Thou’, para, tras una primera parada, soltar el primer cartucho de peso: ‘One’, donde ya empezaron a hacer uso de pirotecnia, y donde el público estaba ya del todo entregado.

James Hetfield siempre me ha parecido el frontman por excelencia en este tipo de música. Basta que ponga el brazo en alto y grite dos simples ‘eh, eh’, para que más de quince mil personas en este caso, o varios miles más en cualquier festival, se pongan todos a una a seguir sus órdenes. Dos días antes en el Sonisphere de Barcelona se excusaba de su poca movilidad debido a problemas con su espalda, pero aquí parece que desaparecieran, mostrándose pletórico, y moviéndose de un micro a otro (hasta ocho había repartidos por el escenario). Siguieron con un discurso marca de la casa, para dedicar ‘Broken, Beat And Scarred’ a toda la familia METALLICA presente esa noche, a la que sumaron ‘Cyanide’, el tema más soporífero de ‘Death Magnetic’. En su línea, mezclando temas nuevos con antiguos, tocaba el tiempo de heavy music con ‘Sad But True’, volviendo la temperatura a subir entre el público. Una sorprendente y sobresaliente ‘Turn The Page’ dio paso a más del nuevo disco, con una nueva intro (grabada, por supuesto) de ‘All Nightmare Long’, uno de los temas más rápidos de su última obra de estudio, y ‘The Day That Never Comes’, que en directo da aún más impresión de ser una mezcla total de ‘One’ y ‘Fade to Black’. Demasiado tema nuevo, que por otro lado es comprensible, ya que presentan nuevo álbum, y se aprecia desde los citados ataúdes que colgaban del techo; pero tocarse más de la mitad de ellos quizá resultó un poco abusivo para algunos, entre los que me encuentro. Quizá es que viendo la crónica de Sergi Ramos del fin de semana anterior uno se hizo ilusiones con algunos temas, y sobre todo con un comienzo de concierto distinto, pero seguro que tocando dos noches seguidas en Madrid, a uno les tocará el set bueno, y a otro el menos bueno. ¡Mala suerte!

En cualquier caso, ahí estuvo el final de ‘Death Magnetic’, y ya solo hubo tiempo para el pasado de la mano de bombazos, empezando por ‘Master Of Puppets’, y siguiendo con ‘Battery’ (sí, su intro no faltó), alternando el orden de aparición de su disco, y dejando paso a Kirk Hammett para su segundo solo de la noche, cosa que sigo sin entender; vamos, sigo sin entender yo, y mucha gente a la que le pregunto, ya sean músicos o fans, que ven en él a un músico bastante limitado. Pero bueno, tras su segundo pequeño momento de gloria de la noche, taburete para Hetfield, y tiempo para enternecerse de la mano de ‘Nothing Else Matters’, que a los que les hemos visto ya más de dos y tres veces, llega a cansar; casi igual que ‘Enter Sandman’ (quizá es que hay pocos himnos de determinados grupos que me gusten, y soy raro en ese aspecto), pero allí al público le daba igual, y coreaban todo sin parar, sabiendo que eso estaba próximo a terminar.

Apenas descansaron antes de salir a escena con su clásico bis, que en esta gira suelen abrir con una versión a la que sigue algún clásico olvidado, como ‘Trapped Under Ice’ o ‘Phantom Lord’. Esta vez nos tocó ‘Blitzkrieg’ y ‘Motorbreath’, y en ese momento seguí pensando en la mala suerte de set que nos tocó vivir, porque además, vaya final de concierto tan corto. El final, pues lo lógico y esperado, ‘Seek & Destroy’ (deberían pensar cambiar algún día, aunque solo sea alguna fecha concreta, a modo de sorpresa), con pelotas negras hinchables con el logo de la banda cayendo del cielo, con las luces encendidas para vernos todos bien las caras, poniendo fin a un concierto de dos horas, con un grupo entregadísimo (igual que el público, todo hay que decirlo), bastante bien de forma. Y desde aquí rompo una lanza más a favor de Robert Trujillo, porque, una vez más, demostró su entrega y pasión sobre el escenario, siendo el más activo del grupo, subiéndose y bajando de donde saldrían llamaradas poco después, bajando al foso, haciendo sus típicos movimientos/bailes agachado… un showman total, que además toca a las mil maravillas; y que en el final de un tema (ahora no recuerdo cual), destensó su bajo hasta arrancar una de sus cuerdas.

En definitiva, y poniendo ya el punto y final a esta crónica, METALLICA sigue sabiendo poner patas arriba aquel sitio donde toque. Esta vez acompañados de dos grupos buenísimos, de los mejores del metal moderno, cada uno en su estilo, pero que no disfrutaron ni del sonido ni de un gran número de público. Pero saben su papel en la gira, que es abrir para uno de los grupos más grandes de la historia del rock/metal. Ya son cerca de treinta años al pie del cañón, y rondando los cincuenta años algunos de ellos; pero les da igual, donde van llenan, hacen felices a decenas de miles de personas, y por donde han venido, se van, prometiendo volver. Un concierto muchísimo mejor que el del año pasado en Getafe (donde me prometí que no volvería a verlos tras aquella decepción… y me trago mis palabras), donde, a pesar de que ya lleven años y años repitiendo una y otra vez los mismos discursos, demuestran que, sobre todo en directo, tienen mucho que decir todavía, siendo posiblemente mejor de las veces, más entregados y metidos en su show, que les haya visto, moviéndose por ese escenario como si de su casa se tratara. Una pena, como dije más arriba, tanta presencia de temas nuevos. Espero que los que fueran la noche siguiente les tocara algo mejor…

 Set list METALLICA

  • That Was Just Your Life
  • The End Of The Line
  • For Whom The Bell Tolls
  • Holier Than Thou
  • One
  • Broken, Beat And Scarred
  • Cyanide
  • Sad But True
  • Turn The Page (Bob Seger cover)
  • All Nightmare Long
  • The Day That Never Comes
  • Master Of Puppets
  • Battery
  • Nothing Else Matters
  • Enter Sandman
  • —————–
  • Blitzkrieg (Blitzkrieg cover)
  • Motorbreath
  • Seek & Destroy

 

Varo (varo@themetalcircus.com)

Texto y fotos: Alejandro Perez

Promotor:Last Tour International

Asistentes:17000

Día:13/07/2009

Hora:20:00

Sala:Palacio de los Deportes

Ciudad:Madrid

Puntuación:8