Mastodon y Kvelertak reinan en la segunda jornada del Azkena

Otro Azkena que se nos va y miles de imágenes, sonidos, conocidos y recuerdos que nos llevamos en la mochila. Lo mejor, como casi siempre, la gente. El público azkenero está más que fidelizado y acude a Vitoria-Gasteiz porque es más que un festival.

Si durante el viernes 19 el cielo era amenazante, el sábado 20 hizo un sol más propio de un festival murciano. Fuerte abrazo del sol pero una excelente jornada por delante, mucho más atractiva para muchos, pero que a la postre no vino acompañada por más afluencia de gente. Es más, juraría que la entrada fue algo menor.

EAGLES OF DEATH METAL

Un show azkenero y festivalero por definición. Lo tuvo todo. Intensidad, buen rollo, sonó bien, mucha complicidad con el público y hasta con un invitado sorpresa: Brent Hinds de Mastodon en “I only Want You”. ¡Vestía el gorro naranja típico del festival incluso! No dieron concesiones desde que empezaron con “Bad Dream Mama”. Refrescantes incluso bajo el potente sol que estaba al 11 de intensidad. Jesse Hughes destiló buen rollo y el grupo estaba realmente enchufado, todo dinamismo y buenas vibraciones. Puede gustarte o no su propuesta, pero se ganan a la gente con simpatía y tonadas como las de “So Easy” o sobretodo “Cherry Cola”. Se despidieron con la festiva “Speaking Tongues” y la gente respondió con un largo aplauso. De lo mejor del festival.

CRACKER

Muchas ganas tenía de ver a esta gente que apuesta por un country rock de cánones muy puristas y con temas que atrapan y no te dejan. Quizá al estar entre los Eagles y Red Fang quedaron como soporíferos para muchos pero fueron un excelente contrapunto al festival. Los de California se me ganaron con su último “Berkeley to Bakersfield” y ya llevan desde los 90 en el negocio. Han conseguido asomar en las listas de éxitos norteamericanas en la pasada década y a buen seguro que en Azkena se ganaron a más de un fan. Destaco especialmente la maravillosa “California Country Boy” o esos dejes a Neil Young en “Low”. Bonitos juegos de coros y protagonismo para la guitarra eléctrica en “Get on Down the Road”. Concierto delicado y cálido con momentos brillantes y otros más pausados, y en el que pusieron su broche de oro con “El Cerrito”; un nuevo clásico.

RED FANG

Caray… Cómo ha crecido esta banda de Portland desde hace unos años para acá. Les vi de teloneros de Iron Maiden y Avantasia en el Fórum de Barcelona y quedaron apagados entre un deficiente sonido y un sol matador. El cartel que llevaban entonces era pequeñito y modesto… Todo lo contrario esta vez (sintomático…). Aplastantes, atractivos y contundentes. Su última obra discográfica es espectacular, y combinada con sus temas antiguos más conocidos hicieron de todo aquello un show para enmarcar. Desde “Malverde” a “Prehistoric Dog” que todo sonó de maravilla. Una chica se desgañitaba gritando desde el inicio de su actuación “¡Perro prehistórico!”, algo surrealista si no sabes que es uno de sus clásicos. Si eres de los que cree que su “Blood Like Cream” es un bombazo, créetelo… Fue lo mejor del concierto. Los barbudos de Portland demostraron que su mezcla de stoner y metal está destinada a crecer más y más.

MASTODON

Ante todo confieso que nunca he sido un fan absoluto de Mastodon, pero esta opinión cambió desde el momento que les vi en este Azkena. Les había visto en un par de ocasiones y me dejaron realmente frío. Y es que si el sonido no les acompaña queda todo enmarañado. En el presente Azkena todo sonó a gloria y afirmo que fue, de largo, el mejor show del sábado (y puede que de todo el festival, con permiso de Kvelertak), sin necesidad de tirar ni de “Iron Tusk” ni de “The March of the Fire Ants”, clásicos en toda regla. Eché de menos también “Oblivion”, pero tanto da cuando el grupo hace una demostración técnica tan soberbia. “Once More ‘Round the Sun” es más accesible y menos contundente pero lleva al grupo a otra división. Cuando sonó “The Motherload” ya fue insultante. Impresionante como canta el batería Brann Dailor. Se turnaban a las voces Troy Sanders y Brent Hinds sacando a pasear al mastodonte en “Blasteroid”, “Halloween” o “Black Tongue”. Los cortes de su última obra brillaron pero en el tramo final rescataron perlas de su brillante pasado como “Megalodon” o “Crystal Skull”. Remataron recuperando la extensa y cambiante “The Czar”, única referencia a “Crack the Skye”.

OFF!

Cambio de tercio y estilo con los integrantes de Off!, banda de punk integrada por gente que ha estado (y están) en leyendas del estilo como Black Flag, Rocket from the Crypt, Circle Jerks o Redd Kross. Si bien su punk es excesivamente de manual, así como sus poses y su entrega, es innegable que tienen todas las de ganar. Temas rabiosos de menos de dos minutos con todos los ingredientes que se le suponen al estilo y con detalles técnicos muy interesantes por parte de todos. Hasta 25 canciones cayeron con un Keith Morris simpático hablador y vistiendo el gorro del festival. “Blast”, “Panic Attack”, “Poison City”… todas escupidas y defendidas a capa y espada. El combo sonó realmente bien y en muchos momentos conectó con un público que parecía con muchas más fuerzas que la noche anterior. Me los habían aconsejado y la verdad es que no defraudaron precisamente.

KVELERTAK

¿El show del festival? Para algunos sí, para otros Mastodon. Pero el tema es que entre estas dos bandas estaría la corona del 2015. Otra ronda de barbas, riffs sucios y decibelios, si bien esta vez a la noruega. Son muchos los que consideran que esta gente va a llegar muy alto y razones no les faltan. Propuesta muy personal que suena (a veces) a cruce entre Red Fang y Turbonegro. Tonos rojos y mucha penumbra para un show aplastante y sobrado de actitud. Erlend Hjelvik es un frontman alucinante y sabe manejar a la gente como quiere. Toda una inyección de adrenalina a altas horas de la madrugada cabalgando a lomos de riffs sucios y marcianos como los de “Undertro” o “Blodtorst”. Diversión a raudales y un público muy entregado que parecía saber perfectamente a lo que se enfrentaba. No negaré mi debilidad por “Apenbaring” y sobretodo por ese single casi perfecto que es “Bruanne Brenn”. Una banda destinada a ser realmente grande. Repetiremos en Wacken.

Otro Azkena que se nos va y miles de imágenes, sonidos, conocidos y recuerdos que nos llevamos en la mochila. Lo mejor, como casi siempre, la gente. El público azkenero está más que fidelizado y acude a Vitoria-Gasteiz porque es más que un festival. La gente de Last Tour (organizadores) lo han trabajado bien a lo largo de tantos años y se agradece. Pero este año había quejas con respecto al cartel. Las tres últimas ediciones del Azkena no han poseído los rutilantes nombres de otras veces y creo que la mayoría de sus fieles suspiramos para otra edición de tres días con bandas de más peso. Ya saben que allí estaremos, traigan lo que traigan, pero por pedir que no quede.