LOS SUAVES

¡¿Hay alguien ahí?!… Como siempre la visita navideña de Los Suaves a Barcelona no faltó, y otra vez por partida doble, como hace un par de años. Llenaron ambas noches y demostraron que siguen ofreciendo unos directos de ensueño para sus fans, de algo más de dos horitas y con un Yosi en muy buena forma. Se confirmaron los buenos presagios de las pasadas navidades y la banda sigue recobrando parte de esa intensidad de la que hacían gala en los 90.

La sala estaba abarrotada, preparada para el Rock and Roll y para convertir el Apolo en un karaoke masivo-festivo. El setlist estaba retocado y reelaborado, y sus fans más antiguos se preparaban para disfrutar de algunos temas algo olvidados, sin duda uno de los mayores alicientes para la velada. Destacar la comunión y buen rollo que se refleja en el grupo, lejos de las caras largas de hace unos años y de lo caótico y errático que suponía ver al “caballero de la triste figura” sobre escena. En esos conciertos se palpaba que podía pasar de todo, pero nada bueno.

Este fin de semana todo funcionó, y también fue gratificante ver como Eco han dado otro paso más adelante como banda. Si en su anterior venida ya les vimos como una enorme promesa ahora hay que referirnos a ellos como toda una realidad. Con un directo aplastante y capaces de marcarse un “Burn” en directo alucinante. Roberto Espinosa clavando los tonos de Hughes y Coverdale… casi nada.

Pero la fiesta empezaría con la llegada a escena del combo “galego”, con la esfinge del gato tras ellos y con una rotunda ovación. Está claro que verlos en su Ourense natal tiene que ser imprescindible, pero Barcelona tiene desde hace décadas una relación muy especial con Los Suaves y creo que todo fan de la banda debería vivir uno de sus conciertos en la Ciudad Condal.

Abrirían con “Judas”, corte más que interesante pero que parece que no termina de calar entre la audiencia. Nada comparable al desparrame que suponían “No puedo dejar el rock” o “Preparado para el Rock and Roll”.  Sobre los nuevos temas decir que hay un punto bueno y otro “malo”. Lo malo es que al desconocerlos supuso bajón de intensidad, pero… como punto bueno resaltar que suenan de maravilla y atisban que va a caer una gran obra. Bonitas letras las de “Viejo” y sobretodo “Adiós, Adiós”, que por cierto, ¿suena a despedida y epitafio?

La locomotora del “San Francisco Express” nos hizo subir al trepidante viaje que sería el concierto. Quizá uno de sus temas más heavies y marcada por un recibimiento entusiasta. Fernando y Cereijo estuvieron perfectos en las guitarras y con una sonrisa dibujada en los labios. “Palabras para Julia” es ya otro clásico ineludible y a la vez un recuerdo al gran Goytisolo. Qué triste belleza hay en la contradicción de componer uno de los mejores cantos a la vida y suicidarse… Es impresionante oír a toda la sala cantando el tema de cabo a rabo. Hubo momentos en que Yosi dejó que la gente cantase, pero pareció que voluntariamente…

Lo dicho, los nuevos temas tienen ángel, y “Viejo”, “Esa noche la perdí” y “Frío” parece que van a dar mucho que hablar. Una de ellas es una versión del genial “Thunder Rising” de Gary Moore. Ahora que la banda vuelve a demostrar su valía en directo, un gran disco les podría devolver al estatus que nunca deberían haber abandonado.

La buena noticia era que “Malas noticias” iba a caer, otro de esos temas inmortales al que le seguiría “¿Sabes, Phil Lynott murió? Intensa y otro homenaje a uno de los compositores en los que Los Suaves siempre han tenido como influencia. Hubo aquí un subidón de felicidad en el líder del grupo que le hizo intentar subirse a los amplis colgados. Afortunadamente fue sólo un intento fallido, pues la altura y complicación eran de nivel alto.

Preciosa sería el “Si te atreves a Nacer”, precedida por una parrafada de Yosi en la que se perdería en sus propias palabras pero también sincera y auténtica. Y es que lo queremos tal como es… “Adiós, Adiós” va para clásico pero para muchos, yo me incluyo, sería el fabuloso medley lo mejor de la noche. Nada más y nada menos que “Preparados para el Rock and Roll”, la heavy “Luís y su mujer” (ya era hora que volviese a asomar por los repertorios), la maravillosa “Pobre Jugador” (otra de las olvidadas, y aquí cantada hasta el desgañite) y “Víspera de todos los Santos”. Curiosamente este último tema evidenció que la gente desconoce este corte, posiblemente, junto a “Julia”, lo mejor de esa obra algo olvidada. Cerrarían el mix volviendo a “Preparados para el Rock and Roll”. “Mi Casa” es ya otro de los nuevos clásicos, pero para clásico absoluto… “Dolores se llamaba Lola”, la fiesta total. Luego aparecería Yosi con su acústica para ofrecernos una fenomenal “Pardao” y desearnos unas “Navidades Suaves”.

Volvería el karaoke masivo en la preciosa “Si pudiera”, otro de los momentazos”, a la que le seguiría “Dulce castigo”. Subiríamos revoluciones en esa oda a lo “Thin Lizzy” que es “El Afilador”, con ese excepcional riff de guitarras puramente celta. Yosi tuvo un pequeño desliz con la letra, pero el respetable lo devolvió a la senda correcta, pues si hay una letra que sus fans conocen, no es otra que el mítico Afilador. Entre aplausos volverían para el bis final: “Ya nos vamos”, tema ideal para la despedida y un clásico en toda regla. Mientras se despedían hubo la habitual petición barcelonesa por “Siempre Igual”, que esta vez no cayó.

Desde hace unos años que la banda ha sido un cúmulo de informaciones contradictorias sobre su continuidad o sobre su separación. El estado de Yosi, títulos como “Ya nos vamos”, habladurías y ahora un “Adiós, Adiós” que da que pensar… Pero escuchando los nuevos temas y viendo como defienden su legado sobre las tablas, nos hace poner en duda que Los Suaves estén meditando una despedida. El gato está sano y con ganas de marcha. Si hasta hay bandas jóvenes que ni llegan a la hora y media… Esperemos que con el nuevo disco haya una especie de segunda juventud para los de Ourense. La verdad es que Fernando y Tino han aportado al grupo sabia nueva e instrumentalmente la banda posee un nivel excepcional.

Lo dicho, esa noche no se durmió, porque… suave fue la noche…