Lo absurdo y las rencillas pretéritas han hecho que existan recorriendo el mundo bandas clásicas en distintos formatos. Este es el caso de los Guns, existe la formación de Phil Lewis y la de Tracii Guns, siendo esta la que nos visitaba esta vez. Si ya fue toda una agradable sorpresa ver los Guns de Lewis, la verdad es que esta encarnación de Tracii es muy superior.

Y es que contar con el ex Love/Hate y Ratt Jizzy Pearl, a Chad Stewart (estuvo el pasado año con Faster Pussycat) y al talentoso Jeremy Guns (hijo y bajsta de Tracii) tiene que funcionar por narices. La cosa lució, aunque breve, y especialmente Tracii y Pearl demostraron que siguen siendo unos cracks en su cometido.

Antes de que saltaran a escena estuvieron caldeando el ambiente los voluntariosos italianos Nasty Tendencies, armados con una rubia cañón al frente que era pura actitud pero que naufragó en afinación. Su versión del “I Wanna Be Somebody” hizo literalmente aguas, pero se les ve con ganas y tienen madera para ofrecer buenos directos.

Los de Los Angeles saltaron con muchas ganas de gustar y convencer con un “Nothing to Lose” demoledor al que seguiría la excepcional “Electric Gypsy”. Pearl es un ciclón sobre las tablas y el bueno de Tracii sigue poseyendo una destreza dactilar soberbia. Manteniendo el pulso estaban Jeremy, perfectamente acoplado y con gestos de rock star y un Chad mucho más motivado y contento que en su anterior bolo con los Pussycat. Hasta se atrevió en los coros.

Seguirían con “Decide” y “Bitch Is Back” ya con la audiencia ganada y entregada. Siguen sonando a puro sleazy, son efectivos y en sus manos esos temazos ya veteranos mantienen la frescura de antaño. Caerían seguidas dos joyas como son “One More Reason” y “Never Enough”, posiblemen te lo mejor de toda su descarga. Quedaron algo sobrantes las versiones de “Hells Bells” y el “Knocking on Heavens Door”, pero cuando atacaron el “Ballado f Jane” todo pareció volver a su sitio. Realmente, con todo el material genial que poseen es absurdo rellenar con versiones. La gran balada sonó a gloria y Pearl la bordó literalmente. Cuantas tablas que tiene este hombre…

Continuarían con “Over the Edge” y “Waking the Dead”, pero sería el “Show No Mercy” la que pondría patas arriba todo el  Apolo 2. Menudo corte, hiriente coreable y directo. Sin lugar a dudas era la más esperada. Con “Spinning Wheel” terminarían para dar paso a los coros.

“Rip and Tear” sería la elegida para devolverles a escena, masivamente coreada y “Blackout in the Red Room” sería la sorpresa de la noche, una concesión de la banda a Jizzy para que se explayara con el antiguo éxito de Love/Hate. El punto final lo puso “Sex Action”, otro pedazo de historia del sleazy angelino y posiblemente un broche de oro a un buen concierto.

La banda se despidió y Chad estuvo deambulando por la sala. Le saludé y le pregunté porque no tocaban ni “Magdalaine” ni “Malaria” y me contestó que la primera era un temazo y que la próxima vez la tocarían pero que me olvidara de la segunda, pues le parecía muy aburrida. Buena noche de rock and roll y sleazy, pero estas bandas no se estiran demasiado con sus sets, y eso es algo que les resta puntos. Pero si hay que elegir por una de las dos encarnaciones de los Guns, queda claro que estos se llevan la palma.

Jordi Zelig Tàrrega / Fotos: Sergi Ramos

Promotor:Robert Mills

Asistentes:100

Día:23/09/2009

Hora:21:00

Sala:Apolo 2

Ciudad:Barcelona

Teloneros:NASTY TENDENCIES

Puntuación:8