JON OLIVAS PAIN + MANTICORA + MASTERSTROKE

Qué triste, pero qué triste resulta experimentar hechos como las que nos tocó vivir el pasado Jueves 8 de Mayo en la sala Salamandra de Barcelona. Que un artista como Jon Oliva, o lo que es lo mismo, SAVATAGE, no logre juntar en una ciudad como Barcelona a más de 70 u 80 personas (Tirando alto), me parece patético y habla, no muy a favor precisamente, del nivel cultural de “la clase heavy” de esta ciudad.

No, no estamos hablando de RAGE, ni de SAXON, ni de WASP siquiera, bandas todas ellas que pasan como mínimo una vez por año por nuestra ciudad / País. Hablamos de Jon Oliva / SAVATAGE, un tipo que si mi memoria no falla, solo pisó Barcelona en el pasado 2001 con su banda SAVATAGE taloneando a JUDAS PRIEST en el pabellón de la Vall D’Hebrón. Hablamos de toda una institución del Heavy Metal que a pesar de ir en solitario, centra su set básicamente en SAVATAGE, una banda que yo creía mayor y que visto lo visto, demuestra haber caído en el olvido de mucha gente.

Hablando con el promotor del evento y con otras tantas personas llegamos a la conclusión de siempre; Aquí solo llenan los mismos. Nos quejamos de lo aborregados que están los fans de la música Pop y de lo influenciables que son, cuando en el fondo, los heavies –o gran parte de ellos. Son iguales; Prefieren pagar 50 euros por ver a IRON MAIDEN por trigésimo quinta vez o fundirse los cuartos en cubatas antes de acudir a un show de alguien con tanto talento y tan poco visto por aquí como lo es Jon Oliva. Y desde luego, no será por la promoción que tanto de él como de sus discos en solitario o de SAVATAGE hemos hecho casi todos los integrantes de esta web en los diferentes medios de prensa en los que trabajamos o hemos trabajado a lo largo de todos estos años.

En fin, los que estuvimos allí recordaremos el concierto de JON OLIVA’S PAIN como algo único, irrepetible. Los que no fuisteis por los motivos que fuesen, sabed que rara vez volverá a darse una oportunidad tan buena para presenciar semejante ejercicio de maestría sobre un escenario pues dudo mucho que tanto Jon Oliva como el promotor de turno, tengan muchas ganas de volver a montar algo así en Barcelona.

Acompañando al ex líder de SAVATAGE venían un par de bandas, los desconocidos MASTERSTROKE y los algo más conocidillos MANTICORA. Por desgracia, apenas pude ver algún tema de los primeros pues durante la actuación de los segundos, tuve el enorme placer de discernir de nuevo con Jon Oliva en el Backstage durante un buen rato y comprobar así su sentido del humor, aún sabiendo que iba a tocar delante de 4 gatos esa noche.

Con unos músicos de un talento enorme, sobretodo su guitarrista Matt Laporte –quién a pesar de que no tiene la presencia de Criss Oliva, técnicamente poco le tiene que envidiar- Jon Oliva se adueñó del escenario ante las 70 personas a lo sumo que allá estábamos congregadas. Tal y como nos adelantó en la entrevista que con él publicamos hace unas semanas, el show de JON OLIVA’S PAIN tendría sorpresas y así fue. Solo comenzar la banda arrancó el clásico de SAVATAGE “Sirens” y la atípica “Unusual”, uno de los mejores cortes de aquel “Power Of The Night” de 1985. Jon Oliva iba algo pasadillo, de hecho no paraba de pedir vasitos de vino, chupitos y toda clase de brebajes, pero qué demonios, si con ello toca y canta de esa forma, bienvenida sea su afición etílica. De hecho, Mr. Oliva mostró un sentido del humor y una genialidad enorme haciendo constantemente bromas con sus músicos, con el público y con sus técnicos, a cada cual más disparatada y sonada. Ya se sabe, los gorditos son más gracioso a la hora de bromear, no me digan porqué.

Tras los 2 clásicos de SAVATAGE, la banda echó la vista atrás y tiró de los 2 mejores temas de su anterior obra “Maniacal Renderings”; El tema homónimo y como no, “Through the Eyes Of The King”. Con un público totalmente entregado y alucinado ante la sola presencia a escasos centímetros del mismísimo Jon Oliva, acompañado de su bastón y teclado, la banda recuperó del pasado el clásico de SAVATAGE “Gutter Ballet” que junto a la celebrada y poco esperada “Hounds” completaban el repaso al clásico de SAVATAGE de 1989. Con los ánimos bastante relajados tras “Hounds”, Jon Oliva presentó “Firefly”, ese baladón que se ha sacado de la chistera para su último disco y que fue coreado por la audiencia como si de un clásico más se tratase. Todavía con la piel de gallina, le llegó el turno a “Tonight He Grins Again” y un servidor casi entra en extasis. Nunca habría imaginado que escucharía sendos temas seguidos, uno tras otro, nunca. Con “Tonigh He Grins Again” Jon Oliva demostró que canta mejor que nunca, pues difícil debe ser para alguien que roza los 50 y que bebe y fuma como un condenado rasgarse las cuerdas vocales de esa forma y salir bien parado.

Tras el clásico de “Streets”, Jon presentó a los integrantes de su grupo siendo Matt LaPorte el último de ellos. Éste, ante los aplausos del personal, arrancó con el riff de “Jesus Saves” y la locura se adueñó de los allí presentes. Sin apenas dar respiro, Jon Oliva anunció que iba a interpretar un par de temas de su último disco, “Global Warning” y “befote I Hang”. Ambos fueron muy bien recibidos demostrando que el (poco) público de SAVATAGE ha adoptado al nuevo trabajo de JON OLIVA’S PAIN como si de un trabajo más de SAVATAGE se tratase. A continuación, Jon nos hizo saber que iba a recuperar un tema de “Handful Of Rain”, por lo que muchos imaginamos que se trataría o bien del tema que da nombre al disco o bien de la potente “Taunting Cobras”. Pero no fue así, incluso con unos músicos que no son los de SAVATAGE, Jon tiró adelante “Chance” y su famoso canon de voces. Alucinante.

Acercándonos al tramo final del show, la banda interpretó consecutivas “O to G” de su nuevo disco (Dedicada al recientemente fallecido técnico del grupo Greg “G”) y como no, “Believe”, dedicada a quién supongo ustedes ya saben. Tras el consabido golpe en el pecho y mirada al cielo, Jon Oliva anunció un par de temas nuevos, “Look At The World” y “Adding The Cost” que dieron paso al celebrado “Hall Of The Mountain King” (Precedido por el riff inicial de “Power Of The Night”) que lógicamente fue coreado por todos.

Tras unas 2 horas de buena música y diversión a fin de cuentas, la banda se retiró, eso sí, volviendo al poco rato para firmar absolutamente de todo y hacerse fotos con todo ser viviente. Poca gente diría que un tipo como Jon Oliva actualmente vende millones de discos y toca para 20 mil personas por noche con la TRANSIBERIAN ORQUESTRA viendo la humildad y dedicación que mostró hacia nosotros. Un concierto que difícilmente olvidaremos.