Cuando vas saliendo del estadio y tu mente recapitula de forma automática y rápida todo lo vivido, sientes el orgullo de llevarte un trocito de la historia de esta banda dentro de tu cabeza. Da igual que hayamos asistido a decenas de sus shows, en diferentes giras o que nuestra garganta se haya desgañitado en el estribillo de “Fear Of The Dark” con anterioridad por enésima vez.

No hay nada comparable a un concierto de IRON MAIDEN. Hay bandas con mayor poder de convocatoria, con más producción en escena, pero los británicos tienen ese halo especial que hace que el nerviosismo previo a uno de sus conciertos aparezca siempre con más fuerza que nunca. Da igual que hayamos asistido a decenas de sus shows, en diferentes giras o que nuestra garganta se haya desgañitado en el estribillo de “Fear Of The Dark” con anterioridad por enésima vez. Cuando se acerca el día y cuando vamos entrando al recinto de marras, las piernas nos tiemblan y la emoción nos invade casi sin darnos cuenta.

Era algo casi calculado que al hacer cinco fechas en la península (dos de ellas en festivales), la cifra de asistentes a este concierto en la capital andaluza rondaría los 12.000. Incluso teniendo en cuenta que, si la memoria no me falla, IRON MAIDEN no pisaban Andalucía desde la gira “Give Me Ed… ‘til I’m Dead” en julio de 2003, en Jerez de la Frontera, Cádiz. Y tampoco hay que olvidar que este show de su gira por nuestro país fue el último en confirmarse, por lo que muchos de sus fieles seguidores ya tenían otras fechas marcadas en su agenda. Pero poco importa estos datos cuando el buen ambiente se comenzaba a vivir desde primeras horas de la tarde en los aledaños del Estadio de la Cartuja; mismo lugar en el que se celebró el histórico concierto de AC/DC con Axl Rose unas semanas atrás.

La puesta en escena de IRON MAIDEN respecto al show de Angus Young y compañía, era muy diferente. En esta ocasión, solo se usó un cuarto de la totalidad del estadio, logrando así que los asistentes no estuvieran dispersos en la inmensidad de este recinto. Por exigencias de los horarios en la toma de fotografías, no pudimos disfrutar de la actuación de THE RAVEN AGE; grupo en el que milita el hijo de Steve Harris, el guitarrista George Harris. Como viene siendo habitual en las últimas giras de la Doncella de Hierro, todo queda en familia.

Poco tardaría en sonar el rugido del graderío, cuando “Doctor doctor” de UFO se comienza a escuchar por la PA, y de nuevo, los nervios y la emoción flota en el aire con una fuerza electrizante. Encima de la pasarela, en el centro del escenario, aparece un especie de monje llamado Bruce Dickinson que canta la intro de “If Eternity Should Fail”, al calor de una marmita humeante. Desconocemos la pócima que contiene, pero tras las primeras ráfagas de fuego, arranca un show mágico que hace que esa emoción contenida siga explotando con cada canción. “Speed Of Light” vuelve a mostrarnos lo bien que suenan los temas de su nuevo “The Book Of Souls” en directo y tras la protesta pública de Dickinson por la limitación (física y económica) que muchos de sus seguidores se encuentran para estar presentes en las primeras filas (por el black circle), Adrian Smith interpreta las primeras melodías de “Children Of The Damed” con su acústica. El delirio colectivo vuelve a hacer acto de presencia. Y a partir de ahí, no hay marcha atrás…

Con unas pocas canciones, el concierto comienza a tomar tintes históricos. No sabemos si las pirámides mayas del escenario hacen que nuestro cerebro  encuentren la relación con las pirámides de Egipto, pero esa esencia clásica, tipo  “Live After Death”, también parece estar presente en este show, aunque las nuevas “Tears Of a Cloud” y “The Red And The Black” sean las que estén sonando, pero dentro de un escenario mucho más colorido y cálido que en su anterior “Maiden England Tour”. Aunque más clásico que “The Trooper” existen pocas cosas en un concierto de IRON MAIDEN. Pero si después nos sorprenden con “Powerslave” (¿cuánto hacen que no la tocan?), miel sobre hojuelas.

Sobra decir que la cantidad de movimientos y alternancia de solos de sus guitarristas Janick Gers, Dave Murray y Adrian Smith es despampanante. O que Steve Harris sigue dejándose la piel sobre el escenario cantando casi todas las canciones a la par que un enorme Bruce Dickinson, que no flaqueó en ningún momento. Y que Nicko McBrain debería también ser conocido por su técnica que por su simpatía. Todos los componentes de IRON MAIDEN cumple a la perfección con sus roles en un escenario de fondos cambiantes y con una gran cantidad de detalles que la pasión y la entrega a la que nos obligan con sus canciones, hace que posiblemente no podamos apreciar en su totalidad.

Siguieron descargando más material de nueva hornada con la festiva “Death or Glory” y “The Book Of Souls”, en el que el guerrero azteca Eddie hizo de las suyas con Janick Gers, antes de que Dickinson le arrancara su corazón y lo lanzara al público. Y ante tal euforia, no nos íbamos dando cuenta que el concierto entraba en su tramo final. Pero es algo inevitable cuando lo estás dando todo con “Hallowed By The Name” y acto seguido,  “Fear Of The Dark” provoca un orgasmo musical a nivel colectivo. Con “Iron Maiden”, su correspondiente parafernalia escénica y los gritos ¡scream for me Seville!, la banda se despedía antes de los bises.

Por suerte, “Sanctuary” ha quedado enterrada, y el tridente de cierre lo encabezó “The Number Of The Beast”, seguida de una coreable y emotiva “Blood Brothers”. Y casi pisándose las melodías de guitarras en su final, “Wasted Years” volvía a cubrir el concierto con ese aroma clásico que consigue que lo actual, se vuelva histórico.

Cuando vas saliendo del estadio y tu mente recapitula de forma automática y rápida todo lo vivido, sientes el orgullo de llevarte un trocito de la historia de esta banda dentro de tu cabeza. Da igual que hayamos asistido a decenas de sus shows, en diferentes giras o que nuestra garganta se haya desgañitado en el estribillo de “Fear Of The Dark” con anterioridad por enésima vez. No hay nada comparable a un concierto de IRON MAIDEN.

 

Texto y fotos: Satur Romero (satur@themetalcircus.com)

Promotor:Live Nation

Día:2016-07-14

Hora:22:00

Sala: Estadio Olimpico de La Cartuja

Ciudad:Sevilla

Puntuación:9