Las muchachas llorando a las puertas de la sala La Riviera a nuestra llegada no eran sino el presagio de una noche de fuertes emociones. Emociones, que no “EMOciones” como algún avispado habrá modificado para sus adentros en clara referencia a SONIC SYNDICATE, primera banda en abrir fuego aquel 15 de Octubre en la mítica sala madrileña. Y es que los suecos, que hace escasas semanas editaban un “Love & Other Disasters” del que ya han grabado nada menos que dos vídeos, tenían el grandísimo honor de calentar el ambiente en la gira de presentación de ese “A Sense of Purpose” que tanto polvo levanta a su paso. Hablar de IN FLAMES a día de hoy es hablar de controversia y opiniones confrontadas. Mucho tiempo ha que los de Gotemburgo renunciaron a sus raíces influenciadas por bandas como AT THE GATES para abrazar de lleno y sin complejos las fórmulas americanas. Tanto tiempo (alrededor de 7 años atrás en el tiempo), que sus fans más antiguos ya parecen haber perdido absolutamente la fe en los que antaño. Se ve claramente en cualquiera de sus shows, en el estilo de la gente que hoy los adora. Su estética y filosofía actuales, iniciadas en “Reroute to Remain”, llevadas al extremo en “Soundtrack to Your Escape” y mantenidas en sus dos trabajos posteriores, ha calado a las mil maravillas en otro tipo de fan muy distinto y ajeno al grupo hasta ese momento. Su música ahora es objeto de otro tipo de público, y la formación es a día de hoy ejemplo perfecto de evolución (otros lo llamarían “devolución”, pero eso sería caer en subjetivismos injustos) y de redirección musical. El principal problema que deriva de ello es, a mi juicio, el grave descuido que con ello IN FLAMES han cometido hacia los fans de sus más tempraneras ediciones, fans que, les guste o no, propiciaron el que ellos mismos se encontraran en esa situación tan propicia que les llevara hace 7 años a la apuesta por la expansión hacia otros segmentos de mercado. La situación es tal que, como comentaba al principio, pocos se sitúan en una posición intermedia: o sus discos hasta “Clayman” o sus discos desde “Reroute to Remain”. Pocas excepciones.

SONIC SYNDICATE 5.5/10

Primera visita a la capital de España de los chicos de SONIC SYNDICATE, segunda incursión peninsular tras su descarga en aquel Eastpak Antidote Tour con DARK TRANQUILLITY, SOILWORK y CALIBAN. Orgullosa, la banda lo recuerda repetidas veces durante una actuación que a nivel representativo se me antojó mucho más lúcida que la de aquel día en la que los suecos parecían un poco estáticos y expectantes sobre las tablas de Razzmatazz 2. Lógicamente los chavales ganan en tablas sobre el escenario con el paso del tiempo, y la combinación de movimientos por parte de Richard Sjunnesson y Roland Johasson, sus dos vocalistas, es cada vez más fluída y vistosa. Tanto para las jóvenes seguidoras como para cualquier ojo objetivo que evalúe, ellos son sin lugar a dudas el gran reclamo de SONIC SYNDICATE en directo, al margen de la sobrevalorada Karin Axelson que ni se mueve un centímetro en todo el concierto ni cambia apenas de nota durante su show. Oh, lo olvidaba… está buena. Muy relevante, sí.

¿La pega? La de siempre: la acústica. Nefasta, básicamente. Guitarras saturadas, bases rompe-tímpanos… Con la actuación de los jóvenes suecos se disparaban todas las alarmas de los más suspicaces que ya vaticinaban un sonido desastroso que a la postre terminaría por dar al traste con las posibilidades de los de Falkenberg por agradar a los presentes. De poco sirvió la notable mejoría en directo con respecto a anteriores actuaciones que había tenido ocasión de presenciar, la impresión general del público fue bastante mala, cosa que ni temas de “Love and Other Disasters” como “Jack of Diamonds” o cortes pertenecientes a “Only Inhuman” del orden de “Aftermath” (con la que abrieron), “Denied” o “Psychic Suicide”, lograron evitar. – “Planos y muy iguales”; calificaban por ahí. Ni tanto ni tan calvo. Buen concierto a nivel de movimientos en escena y nivel musical (mucho mejor los juegos vocales entre sus cantantes que la última vez que les vimos en España), pero horrible a nivel de sonido, lo que al final reventó las aspiraciones de un grupo que camina de la mano del gran sello que hace 3 años les diera la oportunidad de grabar un disco como fue “Eden Fire” (prácticamente olvidado por ellos mismos a día de hoy, curiosamente) y que, presumiblemente, con el paso del tiempo irá a más.

GOJIRA 9/10

Brutales. No hay palabra que mejor defina a día de hoy los directos de una banda como los franceses GOJIRA, una formación que, quizá por no pertenecer a un sello poderoso en cuanto a capital como Nuclear Blast (recordamos que tienen contrato con Listenable Records), venían de algún modo como los tapados de la esperada gira, lo que es posible que también al final les beneficiara bastante. Expectación e interés los mostrados por una asistencia que sonreía un poco más al comprobar cómo poquito a poco el sonido de la Riviera se iba ecualizando correctamente. Sin ser perfecto, al menos la mejora sí fue lo suficientemente notable como para no influir de una manera negativa en las valoraciones del público.

Quienes les conocían los esperaban con ganas. Hubo quien incluso se desplazó solo para verles a ellos. Pero la mayoría, realmente no familiarizada con los sonidos con raíces death metaleras que exhibe el cuarteto francés, no sabía bien que esperar de ellos. Presentaban “The Way of All Flesh”, su último trabajo recientemente editado y con muy buenas críticas, pero no mejores que cualquiera de sus otros 3 discos editados con anterioridad. De él sonaron cosas como “Oroborus”, “Toxic Garbage Island” o “Vacuity”. GOJIRA saben lo que hacen y lo suyo es la regularidad. Llevan casi 9 años defendiendo su propuesta con bases death metaleras y toques groove, y pocas variaciones han sufrido desde sus inicios tanto a nivel musical como de alineación. El peso del directo sigue recayendo fundamentalmente sobre las espaldas del genial Joe Duplantier, un multinstrumentista excelente que no en vano ya ha trabajado recientemente con los hermanos Cavalera en CAVALERA CONSPIRACY, pero no de vocalista o guitarrista, labor que desempeña habitualmente en GOJIRA, sino como bajista. En ese sentido pocas sorpresas nos llevamos, pero no querría cerrar las líneas referidas a los franceses sin elogiar el alucinante trabajo de Jean-Michel Labadie, bajista. En movimientos y dejes, recuerda a Masmiseim de SAMAEL, no para, gesticulando y moviéndose de un lado para otro, representando perfectamente la música en algunos pasajes enfermiza que corre por sus dedos.

Al final, temas de todos los discos para cerrar un concierto de aproximadamente 45 minutos de duración (por los 30 de SONIC SYNDICATE) que terminó por dejar al personal con ganas de mucho más. Grandísima lección de música y saber estar sobre un escenario para una banda relativamente desconocida por nuestras tierras que probablemente después de su actuación en Madrid y en el resto de fechas de la gira lo sea menos.

Setlist GOJIRA:

  • Oroborus
  • Clone
  • Backbone
  • Remembrance
  • Flying Whales
  • Toxic Garbage Island
  • Vacuity
  • The Heaviest Matter Of The Universe

IN FLAMES 7/10

Tras GOJIRA, momentos musicales de la mano de los islandeses SIGUR ROS mientras los pipas ponen a punto todo el set que más tarde aprovecharán IN FLAMES para impresionar a sus huestes. Se me hace raro escuchar en el cambio de grupos a esta banda, que por cierto visitará nuestro país en las próximas semanas con todas las entradas vendidas en sus dos fechas hispanas (Madrid y Barcelona). Cerca de dosmil personas aguardaban ansiosas la salida a escena de Friden y su gente, unos IN FLAMES que volvían por Madrid dos años después de triunfar junto a unos descafeinados SEPULTURA. Pero aquel fue un concierto muy distinto.

Aunque prácticamente todos conocíamos cuál iba a ser el repertorio interpretado, los grititos se ensordecieron la Riviera cuando, tras el telón, comenzaron a proyectarse las sombras del quinteto sueco y comenzaron a escucharse las primeras notas del “The Chosen Pessimist”. El hecho de que hayan escogido un tema como este, tan diferente del resto de cortes de “A Sense of Purpose”, da una pista quizá de su intencionalidad a día de hoy, pista que encuentra respaldo al comprobar el resto de temas que vienen después. IN FLAMES han llegado a un punto en el que se sienten capaces de cualquier cosa, y no les tiembla el pulso a la hora de inundar su setlist con temas poco populares entre sus fans y rescatar viejas glorias del pasado, algunas incluso nunca antes interpretadas en directo. Se levanta el telón y la gente sigue botando. Buen sonido, por cierto, cuanto menos decente, que para lo que es La Riviera, ya es decir.

“Vanishing Light”, “The Mirror’s Truth” (celebraba por los cientos de personas que parecían no haber escuchado otro disco que no fuese “A Sense of Purpose” o como mucho “Come Clarity”, seamos francos), “Zombie Inc” y “The Hive” (ciertamente frustrante comprobar la quietud del personal ante un gran tema que sin ser de los más conocidos de “Whoracle”, es testimonio vivo de la gran época que vivieron en los 90’), fueron la continuación a un show que hasta el momento tenía más de visual que otra cosa. De telón, un panel que proyectaba palabras de temas, formas extrañas o simplemente el nombre del grupo, algo bastante flojo y menos vistoso que el impresionante juego de luces de la gira de “Come Clarity”, que al menos a mí me impactó más. Aprovechábamos los pocos coletazos de viejas glorias con “Satellites & Astronauts”, de las grandes sorpresas agradables en su repertorio y nulamente recibida por el público en general. ¿Quedan dudas acerca de qué clase de fan acude a día de hoy a los conciertos de IN FLAMES?

“System” continuaba con la dinámica del concierto y tan solo un oportuno “Alias” movía un poco a los cientos de personas que mostraban su completo desconocimiento hacia los primeros discos de los suecos. “Pinball Map” sería de los pocos clásicos invariables en su setlist y su ejecución fue brutal. Vivía personalmente mis mejores momentos del concierto, con un set list centrado en discos anteriores a “Reroute to Remain” y en el que podíamos encontrar canciones muy poco habituales. En estas llegaba el gran momento de la noche, el famoso medley con “Dead God’s In Me”, “The Jester’s Race” y “Behind Space”, aunque de esta última tan solo sonara la parte de guitarra hasta que entra la batería. Aunque el estilo vocal de Friden y la fuerza en guitarras no sean las mismas, por momentos pensé que estábamos ante una intencionalidad por parte del grupo de equilibrar la balanza y de tratar por igual ambas épocas de su discografía. Espejismo. “Delight And Angers”, “Sleepless Again”, leve vuelta con “Colony”, “Cloud Connected” y “My Sweet Shadow” ponían las cosas donde imaginábamos y hacían botar a toda la sala. La gente encantada y disfrutando como nunca del concierto de una banda de la que por cierto poco hay que comentar. Friden sigue siendo el jefazo y él es quien decide cómo y deben hacerse las cosas tanto dentro como fuera del escenario. Suya fue la decisión de obsequiar al respetable con un “Only Fort he Week” que La Riviera les pidió a gritos, tras un emotivo “Come Clarity” y una descafeinada “Move Through Me”. La indignación de los fans más antiguos de IN FLAMES al descubrir que “Only for the Weak” alejaría del set list a un tema como “Insipid 2000”, fue mayúscula. En cualquier caso ya estaba todo el pescado vendido, tan solo quedaba esperar pacientes a que el señor Friden tuviese a bien echarnos su bendición y despedirnos hasta la próxima cosa que no ocurriría hasta después de las habituales “The Quiet Place”, “Trigger” y “Take This Life”, tema perteneciente a su anterior “Come Clarity” que a mi juicio sonó infinitamente peor que en la gira pasada y con el que al parecer cerrarán a partir de ahora.

Contrariedad en algunos rostros pero satisfacción máxima en la mayoría que si bien es verdad era evidente que no seguían a la banda desde hacía muchos años, tampoco considero que sea esa una cuestión que realmente importe a la hora de disfrutar más o menos de un espectáculo como el que Friden y sus IN FLAMES nos brindaron en la Riviera. Me sigue pareciendo un feo gesto por parte del grupo el hecho de que den tan poca a importancia a un bloque de discos tan fantástico y que les ha dado tantos buenos resultados como es “Lunar Strain”, “The Jester’s Race” y “Whoracle”, sobre todo esos tres, pero allá cada cual con sus decisiones. Por último y es que si no lo digo reviento, el día que escuche “Jester Script Transfigured” en directo podré morir en paz. Buen concierto, tampoco tan brillantísimo como algunos lo pintan pero correcto sin más.

Setlist IN FLAMES:

  • The Chosen Pessimist
  • I’m The Highway
  • Vanishing Light
  • The Mirror’s Truth
  • Zombie Inc.
  • The Hive
  • Satellites And Astronauts
  • System
  • Alias
  • Pinball Map
  • Dead God In Me/ The Jester’s Race/ Behind Space
  • Delight And Angers
  • Sleepless Again
  • Colony
  • Cloud Connected
  • My Sweet Shadow
  • Come Clarity
  • Move Through Me
  • Only For The Weak
  • The Quiet Place
  • Trigger
  • Take This Life

Texto: Raúl del Amo (rauldelamo@themetalcircus.com) / Fotos: Alejandro Pérez

Promotor:Rock n Rock

Asistentes:2000

Día:15/10/2008

Hora:19:30

Sala:La Riviera

Ciudad:Madrid

Puntuación:8