Hola, somos Epica y en Madrid hicimos el concierto de nuestras vidas

El triple cartel más esperado del otoño llegó a Madrid y dejó un gran sabor de boca.

El pasado lunes 20 de noviembre fuimos testigos de una de las giras más completas e interesantes de la temporada: EPICA, acompañados de VUUR –la nueva banda de Anekke Van Giersbergen– y de MYRATH, presentó en La Riviera su último trabajo, The Holographic Principle.

Los encargados de abrir la noche fueron los enormes MYRATH, pero antes de empezar su show una mujer salió al escenario para bailar la danza del vientre para introducir el concertazo que estaba por venir.

Comenzaron con “Believer”, uno de los temas que más éxito han tenido de Legacy, su último disco. Normalmente -y por desgracia- los teloneros no suelen tener demasiada respuesta de las primeras filas, pero toda regla tiene su excepción: “Get Your Freedom” y “Storm of Lies” fueron un no parar para todos los asistentes, quienes a pesar de haber escuchado a Myrath por primera vez esa misma noche lo estaban dando absolutamente todo.

Tras estos tres temas del Legacy, retrocedieron hasta 2011 para deleitarnos con un “Merciless Time” que puso los pelos de punta a la sala entera. Eran los primeros teloneros, así que no les quedaba mucho tiempo. Agradecieron al público el buen trato que recibieron e invitaron a todos a ir a verles en marzo como cabezas de cartel –no os los perdáis, que tienen un directo tremendo-. Rápidamente, la bailarina del principio apareció de nuevo y todos juntos cerraron el concierto con un “Beyond the Stars” de sobresaliente.

Vuur (Foto: F.R. Garcia)

VUUR no se hizo esperar demasiado tiempo y en seguida subió al escenario para enseñarnos de qué trata el nuevo proyecto de la talentosa y adorable Anekke van Giersbergen. No fueron tan cañeros ni contagiaron tanto agite de cabezas como la anterior banda, pero la calidad musical de los temas deleitó a todos los afortunados que pudieron asistir a La Riviera.

Myrath (Foto: F.R. Garcia)

Se plantaron en el escenario con “Sail Away – Santiago”, un tema de apertura bastante bien elegido. Siguieron con un “My Champion – Berlin”, y aunque personalmente me parece una de las joyas del disco, tal vez sea demasiado larga como para incluirla en un setlist de apenas cuarenta y cinco minutos. Les acompañó una perfecta actitud y un sonido muy bueno, pero aún así no se vio demasiado entusiasmo entre el público –simplemente porque este tipo de música progresiva incita más a disfrutar en silencio que saltando o bailando-.

No tenían demasiado tiempo, pero nadie se esperaba que una de las sorpresas de la noche llegara en el tercer tema: rescataron “The Storm”, una de las mejores canciones de THE GENTLE STORM.

Vuur (Foto: F.R. Garcia)

Volvieron al nuevo proyecto de Anekke con otros dos temas: “Save Me – Istanbul” y “Days Go By – Helsinki”. El toque final de su actuación fue otra vuelta al pasado con “Strange Machines”, uno de los clásicos de THE GATHERING. Fueron unos teloneros muy dignos, aunque desde mi humilde opinión, tal vez la noche podría haber sido bastante más épica cambiando el orden de las bandas invitadas para que MYRATH tuviese esos 15 minutos de más que tuvo VUUR.

He visto a EPICA en directo bastantes veces y puedo asegurar que nunca he disfrutado de ellos tanto como ahora. La interpretación y ejecución de las canciones fue de diez, la actitud, perfecta, y la voz de Simone nunca había sonado tan bien en ninguna sala madrileña. Otras veces que se han pasado por aquí tuvieron un sonido regulero que personalmente me dejó con mal sabor de boca, pero por fin he podido quitarme la espinita con uno de los mejores conciertos del año.

Epica (Foto: F.r. Garcia)

Desde que sacaron su último disco en 2016, The Holographic Principle, han abierto todos sus conciertos con uno de los temas que mejor acogida ha tenido, “Edge of the Blade”. Absolutamente todo el público coreó como mínimo el estribillo, y aunque no parezca algo demasiado difícil de conseguir, hay que tener en cuenta que el disco salió hace tan solo un año y que muchos de los asistentes solo fueron a ver a EPICA por temas clásicos como “Cry For The Moon” o “The Phantom Agony” (tema que, por cierto, ya no tocan en directo). La euforia y la adrenalina siguieron igual de vivas en los siguientes temas: “Sensorium” y “Fight Your Demons”, una de las canciones del nuevo EP The Solace System.

Aparecieron por el aire un montón de manos fingiendo golpear una batería cuando empezó a sonar “Storm the Sorrow”, single del Requiem for the Indifferent. Es una de mis canciones favoritas, pero he de reconocer que en comparación a lo anterior –y a lo que estaba por venir- sonó bastante light. Terminó la canción y nos dedicaron a todos nosotros un tremendo “Universal Dead Squad” para agradecernos el apoyo que la banda ha recibido a lo largo de su carrera, y siguieron con uno de los temas más largos de la noche: el casi homónimo “The Holographic Principle – A Profound Understanding of Reality”.

Epica (Foto: F.R. Garcia)

Siguieron otros dos temas del THP, “Ascension – Dream State Armaggedon” y “Dancing in a Hurricane”. La banda tenía una entrega total, transmitían muy buen rollo y se les veía comodísimos en el escenario. Simone tiene fama de ser una artista fría y de transmitir poco en las interpretaciones, pero el lunes les calló la boca a todos con una actuación exquisita.

Empezó “Unchain Utopia” y la sala entera enloqueció. Es con diferencia una de las mejores canciones de los holandeses, y cómo se nota que es de las favoritas de Simone. La intensidad del ambiente estaba por las nubes, la atmósfera que se creó no podía ser más fuerte, más tremenda, no podía ser más brutal. El ritmo se aflojó cuando llegó el turno de “Cry for the Moon”, que aun siendo de las menos cañeras del setlist, fue de las que más se cantaron y sintieron. Es lo que tienen los clásicos, ¡nunca fallan!

La banda se despidió temporalmente, pero no se hicieron mucho de rogar: en seguida ya estaban todos listos con “Sancta Terra”, un tema terriblemente bueno en el que Mark, Isaac y Coen terminaron tocando en el foso, a centímetros de los fans más afortunados. Volvieron rápidamente al escenario para romperlo con un demoledor “Beyond The Matrix” en el que los únicos que no saltaron y cantaron fueron los agentes de seguridad. Hubiese sido un cierre épico, pero todavía quedaba un tema más: la larguísima “Consign to Oblivion”, que, personalmente, podrían eliminar del setlist para meter cosas más interesantes.

Ojalá el nivel de EPICA se mantenga y en su próxima visita a la capital podamos disfrutar tantísimo como lo hicimos el lunes.