En su juraría que octava visita a Barcelona, HELLOWEEN presentaron
su nuevo y discutido por muchos "Keeper of the Seven Keys – The Legacy",
tercera y esperemos que definitiva entrega de su famosa saga iniciada en 1987
con el primero de los 3 volúmenes. Engañaría al personal si dijese que la expectación
levantada por la nueva visita de los germanos a Barcelona era apoteósica, de
hecho, hacía bastante tiempo que no veía una sala como el Razzmatazz I tan vacía
(o mejor dicho, no tan llena, que lejos quedan las 150 personas de aquel desastroso
concierto de GRAVE DIGGER hace un par de años). Con el segundo piso cerrado
y los laterales del primero perfectamente transitables, dudo mucho que pudiésemos
ser más de 800 o 900 personas en la sala, algo que no me cuadra del todo pues
el concierto estaba inicialmente programado para el Razzmatazz II, recinto de
menor capacidad y mucho más idóneo para albergar las cifras que esa noche se
barajaron. De cualquier forma, el público variopinto en edad y estética, mostró
disfrutar del evento al máximo pues cabe recordar que HELLOWEEN son tan aptos
para desatar pasiones entre sus seguidores como para revolver estómagos entre
sus detractores.

HELLOWEEN siempre han optado por compartir escenario con
bandas relativamente consagradas, ya sean los FREAK OF NATURE de antaño (que
finalmente no tocaron), Bruce Dickinson, IRON MAIDEN, RAGE, PRIMAL FEAR, o en
este caso, los germanos JADED HEART, a quienes por desgracia no pude ver. Me
habían hablado muy bien de ellos y la experiencia me ha demostrado que Alemania
ha dado muchas de las mejores bandas de Hard/Heavy de la historia como VICTORY,
KINGDOM COME, ROUGH SILK, BONFIRE o un sinfín más, pero las tareas laborales
no perdonan y uno sale del tajo cuando puede, no cuando quiere. Los interesados
en conocer como se las gastan estos chicos en un escenario no tienen más que
pinchar sobre la reseña que nuestro sobradamente eficiente y bienamado corresponsal
de guerra sureño Satur Romero hizo del evento granadino pocos días atrás.

Tras recoger la pertinente acreditación entré en la sala
y pude comprobar de primera mano el un tanto desolador aspecto de la misma;
Dicha asistencia sería todo un logro para muchas bandas, pero no para HELLOWEEN.
Y sinceramente, es una lástima porque HELLOWEEN no llevaban semejante escenografía,
luz y sonido desde sus años dorados en los 80’s, salvando las distancias tecnológicas
entre ambas épocas, claro está. Con un telón de fondo que recreaba la portada
de su nuevo trabajo "Keeper of the Seven Keys – The Legacy", unas
cuantas tarimas, 2 estatuas a modo de guardianes de las 7 llaves, la inmensa
calabaza que salió al final del show y una iluminación como pocas veces he visto,
HELLOWEEN arrancaron su show con el eterno "The King for a 1000 Years",
un tema de 14 minutos de duración cuyo espacio, digo yo, bien podría haber sido
ocupado por 3 o hasta 4 clásicos de su amplísimo fondo de catálogo. De todas
formas, no me hagan mucho caso, tampoco pondría la mano en el fuego acerca de
la duración del tema en directo. De cualquier forma, durase o no 14 minutos,
su minutaje fue excesivo para ser la pieza que abría un concierto. Sin que el
público pudiese apenas dar los primeros aplausos, llegó el primer plato fuerte
de la noche, "Eagle Fly Free", ese himno cuyo contenido tanto lírico
como musical es de sobras conocido por todo ser viviente asociado en algún momento
de su vida al Heavy Metal. HELLOWEEN siguieron con el que por lo visto es el
tema favorito de Deris de este nuevo disco, "Hell Was Made in Heaven",
un tema bastante logrado y bien llevado al directo. Tras él, llegó el que para
mí fue, indiscutiblemente, el momento más emotivo, conscientemente inesperado
(¡Maldito seas Internet que desvelas los secretos antes de tiempo!) y logrado
del show; La consecución de "Keeper of the Seven Keys" y "A Tale
that Wasn’t Right", rememorando los años dorados de HELLOWEEN en los 80’s
con 2 piezas atípicas (y enormes) de su repertorio. Intachable, inmejorable,
espléndido. Andi Deris lo bordó, incluso en los agudos más complejos mostrando
lo buen cantante que es y su estupendo estado de forma, de hecho no cantaba
así desde la gira de "Time of the Oath" junto a Bruce Dickinson y
los injustamente olvidados SKIN. Con el patético recuerdo de las 2 últimas giras
que pude ver de ellos por aquí, sobretodo la que les trajo con IRON MAIDEN,
me mostraba algo escéptico en lo referente al estado de las cuerdas vocales
del señor Deris, y más teniendo en cuenta que éstas no son como los vinos; Por
lo general el paso del tiempo suele desgastarlas. No me hagan caso, me tragaré
mis sucias calumnias una vez más; Dejando de lado las simpatías o apatías que
los nuevos temas de HELLOWEEN despierten entre la comunidad metálica, resulta
indudable reconocer el fastuoso estado de forma de Andi Deris quién no aflojó
en ningún momento de la noche y mostró poseer el carisma y talento necesario
para comandar la banda en ausencia de un Michael Weikath que parece estar más
preocupado por la ausencia a plena luz de burdeles en Barcelona y las constantes
subidas del precio del tabaco, que de recordarle al personal presente quién
es el que corta el bacalao en HELLOWEEN. 

Entiendo que en estos años de saturación de Power Metal donde
HELLOWEEN, quizá más que nunca, han sido reivindicados como héroes y firmes
estandartes de un movimiento, mucha gente pida a gritos el retorno de Michael
Kiske, cabeza visible del buque germano durante su época de mayor apogeo. Ante
ello, cabe decir que para gustos y opiniones, las de cada uno, pero lo que es
innegable es que HELLOWEEN actualmente ni siquiera existirían de no ser por
la aparición de Andi Deris allá por el 94. HELLOWEEN provenían de una época
oscura en la que prefirieron experimentar en vez de salvar los muebles repitiendo
fórmulas ya exprimidas con anterioridad. Ocasionalmente, estas decisiones llegan
a buen puerto, pero a veces sucede lo contrario y la banda en cuestión se hunde,
más o menos lo que le sucedió a HELLOWEEN con los, desde mi punto de vista,
bastante notables "Pink Bubbles go Ape" y "Chamaleon", discos
que mucha gente critica sin haber escuchado apenas en detenimiento. Con la llegada
de Deris, un auténtico frontman que, para los que no lo sepan, ya había alcanzado
cotas relativamente importantes de éxito y popularidad con su banda PINK CREAM
69, HELLOWEEN recibieron una bocanada de aire fresco que probablemente necesitaban,
no para componer buenos temas, que casi siempre lo han hecho, sino para decidir
por donde debían tirar en el futuro. Andi cantó como nunca antes, ni después,
lo ha hecho y compuso auténticos himnos que harían situarían a "Master
of the Rings" entre los mejores discos de Heavy Metal europeo aparecidos
en la década de los 90’s. Quizá los años con Deris al frente no gusten tanto
como los pretéritos con Michael Kiske, pero indudablemente, el primero de ellos
fue probablemente el único de una larga lista de candidatos capaz de relanzar
de nuevo la nave a flote, ya no solo por sus dotes y vocales y compositivas
sino por la entrega y dedicación que siempre ha mostrado hacia HELLOWEEN, mostrando
prácticamente mayor aprecio por lo que este nombre significa que los propios
Weikath y Grosskopf.

Que haya intentado justificar la presencia de Andi Deris
al frente de HELLOWEEN no me convierte en un fan y admirador absoluto de sus
últimas obras, ni siquiera de su actual setlist, el cual me parece cuestionable
en muchos aspectos. Tras el empalme divino de "Keeper of the Seven Keys"
y "A Tale that Wasn’t Right" que les describí antes de que arremetiera
con estos innecesarios arrebatos de nostalgia, el concierto se apagó prácticamente
por completo, claro está, en MI modesta opinión. Lo que vino a continuación
fue tan reprochable, innecesario y cuestionable como aburrido y previsible.
Entiendo perfectamente que una banda esté semi obligada a tocar temas nuevos
y recientes, pero en el caso de HELLOWEEN creo que se pasaron y más cuando con
ello dejas fuera semejante cantidad de temazos, muchos de ellos pedidos a gritos
durante años por sus fans y otros tantos asiduos de sus recitales en el pasado.
"Ocassion Avenue" me parece aborrecible, larguísima, un tostón. "Mr.
Torture" es quizá el tema más simplón, plomizo y atontado de todos cuantos
han aparecido como Single en sus 20 y tantos años de historia. Finalmente, "The
Invisible Man" y sobretodo, ese coñazo de nombre "Mrs. God",
le van a la zaga, mostrando a unos HELLOWEEN que en MI opinión, han intentado
llevar el sonido RAMMSTEIN al campo del Power Metal, algo decididamente atrevido
e incluso atractivo a priori, cuyos resultados, de nuevo en MI opinión, dejan
muchísimo, o más, que desear.

Entiendo perfectamente que incluyan nuevas piezas en su repertorio,
pero por favor, un poco más de cabeza; ¡Temas más cortos y aptos para un directo!.
Debido a ello, otra gira más y seguimos sin escuchar nada de "Master of
the Rings", nada de "Chamaleon" y "Pink Bubbles go Ape"
(esto resulta más evidente y supone una petición puramente personal), nada de
su clásico "Walls of Jericho", ¡Ni siquiera "Starlight",
"How Many Tears" o "Ride the Sky"!,  (Por no hablar ya de
"Victim of Fate" o "Phantoms of Death"…). En su lugar
HELLOWEEN apuestan por el soporífero "Power", prácticamente única
concesión que llevan haciendo desde su gira de 1996 a "Time of the Oath"
(como si dicho disco no tuviese más temas…) y lógicamente, la tripleta de
clásicos formada por "Future World", "I Want Out" y "Dr.
Stein", los 3 singles más laureados de los 2 primeros volúmenes de la saga
"Keeper of the Seven Keys" y que todavía no entiendo como la gente
no ha aborrecido a estas alturas. (¡Podrían haberlos cambiado por "A Little
Time", "We Got the Right" y "March of Time" ya puestos!
"Keeper of the Seven Keys" y "A Tale that Wasn’t Right"
estuvieron muy bien, pero se comieron lo menos 20 minutos de concierto…).
El fin de fiesta, con "Dr. Stein", juntó sobre el escenario a los
miembros de HELLOWEEN con la gente de JADED HEART, seguramente ya ebrios, en
gallumbos, con gorritos de Papa Noel y armados con guitarras y bajos desconectados.

Vayamos con otro tema; Los solos de batería y guitarra. Ambos
estuvieron entretenidos, pero entre eso y los interminables monólogos de Andi
Deris intentado demostrarnos que sabía hablar de forma más que aceptable la
lengua castellana, HELLOWEEN se zamparon lo menos media hora de concierto. Mientras
que el ex-RAWHEAD REXX Dani Loeble montó un entretenido espectáculo haciendo
un mano a mano con Markus Grosskopf quién se encontraba sobre una tarima, con
Kit trapero de batería incluido, intentado replicar los malabarismos del primero,
Sascha Gerstner hizo lo propio con alguien que no recuerdo muy bien quien era,
demostrando que su "técnica" dejaba por los suelos los solos pregrabados
que el feliz individuo no identificado ejecutaba con su guitarra de plástico.
No se equivoquen, Sascha es un buen guitarrista, pero no posee la capacidad
necesaria como para afrontar de forma grata y convincente lo que supone quedarse
solo ante la audiencia para sorprender a la misma a base de punteados y más
punteados galácticos.

A modo de conclusión, les diré que HELLOWEEN tuvieron en
sus manos la oportunidad de hacer una gira y un concierto irrepetible (luces,
sonido, nostalgia, estado de forma…), pero malgastaron la ocasión con un setlist
inadecuado y una utilización del tiempo escénico, en MI opinión, inadecuada.

Texto: Javi Metal / Fotos: Sergi Ramos - Javi Metal

Datos:Razzmatazz
Barcelona
Público: Aprox. 1300 personas
Promotor: Matarile

Día:21/12/2005

Puntuación:7