Noche rockera y heavy metal a cargo de dos grandes bandas a las que todavía no había tenido la oportunidad de ver. Auspiciados por el sambenito de ser un ciclón en directo, estaba claro que no podíamos perdernos a HARDCORE SUPERSTAR a su paso por la Ciudad Condal, después de que al menos un servidor no pudiera asistir a su anterior descarga, si mal no recuerdo, en la sala Apolo 2.  El día no podía tener peor pinta, pues un cielo plomizo y una lluvia incesante amenazaban con una asistencia algo inferior a la esperada. Finalmente la afluencia de público no estuvo mal, pero resulta sorprendentemente escasa si tenemos en cuenta el directo y el gancho musical que tienen las composiciones de estos suecos, que podrían ser carnaza de cualquier radiofórmula algo abierta de mente.

Para amenizar la velada teníamos un regalazo, nada menos que a los suecos KATANA, una de esas nuevas formaciones de heavy metal revival que tan buenos discos nos están brindando últimamente al lado de otros coetáneos como IN SOLITUDE, WHITE WIZZARD, PORTRAIT o ENFORCER, por citar algunos. Inspirados líricamente en la cultura ancestral japonesa a cerca de samuráis y mitos similares, nos sorprendieron flanqueando el escenario con sendas cabezas de esqueletos samurais con su armadura y todo. A destacar la frenética actividad y bailes del vocalista Johan, que embutido en sus llamativas mallas rojas y con unas pintas totalmente ochenteras (al igual que sus compañeros), no paró de corretear e intentar animar al escaso público, hecho que terminó consiguiendo por méritos propios. A mitad del show, el cantante empuñó una katana e hizo varias posturitas con ella. A pesar de tener muy reciente su nuevo disco "Storms of War", el repertorio se basó sobretodo en ese pedazo de debut que es "Heads Will Roll" y del que aproveché para hacerme con una copia original. Con temas como "Livin' Without Fear", meterte al público en el bolsillo es coser y cantar. Por cierto, la banda no pudo contar con su batería habitual, que apareció por allí con el brazo escayolado. Por lo que comentaron, se lo había roto hace escasos días. Y así funcionan las cosas en Suecia, si a uno de los músicos se le rompe un brazo, no pasa nada, podrás contar con otro que se aprenda los temas en un par de días. ¡Como si nada! Pese a que tan sólo un par de personas habían venido por verlos principalmente a ellos y teniendo en cuenta que no pegaban mucho con los cabezas de cartel, triunfaron, El bushido del heavy metal.

El caso de HARDCORE SUPERSTAR es algo singular siempre que hablamos del tipo de público al que logran congregar. Pese a que practican un estilo a medio camino entre el hard rock y el sleaze, poseen un sonido muy moderno que parece que no acaba de gustar a la mayoría de hard rockeros clásicos. Es decir, no practican un hard rock estándar, lo mismo que les puede pasar por ejemplo a unos THE POODLES, otros que cosechan actitudes encontradas entre el sector más clásico, producto de la cerrazón mental de dicha comunidad. Por otro lado, todo ello es en parte producto (tanto a nivel de seguimiento como musicalmente) de la pequeña revolución que supuso el auge del rock escandinavo que surgió en los 90. Hoy recogemos el resultado que de todo aquello ha quedado en la coctelera de influencias de cada banda procedente de dichas tierras.

Los suecos fueron un torbellino en escena, tal y como esperábamos que fueran. Y para más inri, fueron de menos a más, acabando por convertir el concierto en una fiesta del todo alocada, un domingo de resaca en una algarabía del sábado noche. No se puede decir que vinieran presentando disco, pero eso no es motivo para dejar de montarnos una juerga: "Sadistic Girls", "Guestlist" y "Kick on the Upperclass" abrieron la veda con un buen sonido que ya no nos abandonaría. Los movimientos rápidos, compulsivos y a veces sinuosos de Jocke no se hicieron esperar, todo un personaje que podríamos considerar la nueva versión de Iggy Pop. Seguro que no soy al primero al que se le ha pasado dicha analogía por la cabeza. El punto de inflexión lo tuvimos con esa balada intimista que es "Run To Your Mamma", curiosamente una composición que siempre me ha parecido de regustillo yanki, paradojas de la vida, y en la que se quedaron en escena tan sólo el vocalista y el guitarrista Vic. Un buen momento para recobrar fuerzas que luego serían empleadas en cortes como ese curioso "Liberation", con esa tonadilla casi acústica tan característica, o "My Good Reputation". Rebautizaron "Someone Special" como "Something Special" para dedicársela a los atributos sexuales del tour manager, a quien sacaron a escena para avergonzarlo un ratillo. En los bises, se desató la locura, abriendo boca con "Moonshine" para luego subir a media sala al escenario para interpretar junto a todos ellos una versión más alocada si cabe que la original de "Last Call For Alcohol", sumándose a la fiesta los miembros de KATANA que ni cortos ni perezosos hicieron un par de "calvos" al público, mostrándonos sus tiernas posaderas suecas. Tras ello, finiquitaron la actuación con su gran hit "We Don't Celebrate Sundays", tras apenas una hora y cuarto en escena. Poco tiempo, sí, y supongo que criticable, pero un servidor prefiere 1 hora de intensidad que 1 hora y media de tedio. No todas las bandas hubieran obtenido mi beneplácito tocando tan poco tiempo. Por otro lado, estaba convencido de que sonaría "Into Debauchery", pero finalmente no lo hizo. Curioso, pues al menos yo, lo considero uno de sus temas más insignes.

 

En definitiva, gran espectáculo de esta especie rara de suecos, locos, locos. La que liaron. ¡Pues menos mal que no celebraban los domingos!

Texto: Penumbra (penumbra@themetalcircus.com) / Fotos: Sergi Ramos

Promotor:Suffer INC / GMF Concerts.

Asistentes:300

Día:20/05/2012

Sala:Salamandra 1

Ciudad:Hospitalet de Llobregat

Puntuación:8