Hace quince años HAMLET publicaban un disco que marcaba un punto de inflexión en su carrera. Después de un prometedor debut, ‘Sanatorio de Muñecos’, y la brutalidad de ‘Revolución 12.111’ se metían en terrenos más melódicos con ‘Insomnio’, sin dejar de lado su lado más crudo y unas letras cargadas de mensaje social… pero en las que ya empezaba a haber un contenido emocional para ser entendidas de manera libre.

Hace unos meses, la banda creaba una encuesta en sus redes sociales para saber qué disco preferían sus seguidores a la hora de tocarlo de manera íntegra. Ganó el citado ‘Insomnio’, ganando por poco a ‘Inferno’ y un sorprendente ‘Syberia’. ¿La solución? Tocar el primero al completo y buena parte del segundo… para hacer una fecha especial del tercero en Madrid.

Hace cinco años ya hicieron unas fechas por su decimoquinto aniversario, interpretando temas de sus dos primeros trabajos. Dos años después, con motivo de la entrega de tres discos de oro (para ‘Insomnio’, ‘Inferno’ y ‘Revolución 12.111’) repitieron propuesta, dejando más de lado su segunda obra y centrándose en las dos posteriores, recuperando algunas canciones que pocas veces habían tocado en directo. Pero es que en esta ocasión recuperaban rarezas por completo. Empezar con ‘Tortura Visión’, ‘Tu Medicina’ y ‘Dementes Cobardes’ se puede llegar a calificar de normal; dentro de lo que puede ser entendida la normalidad actual de HAMLET. Están mejor que nunca, recuperando la intensidad de la que hacían gala en el momento de sacar ‘Insomnio’. Especialmente destacado es el papel de Molly, que personifica esa garra y el momento tan dulce que están viviendo. No para de correr, de saltar, de bajar a cantar entre un público que no para de zurrarse cuando está con ellos, al que llevan en volandas hasta volver con sus compañeros mientras no para de cantar… digno de admirar que sigue guardando esa chispa y entrega y no se acomode en ningún momento. Lo mismo se puede decir de los demás. Siempre digo que Álvaro y Paco ocupan un segundo plano, sin destacar pero efectivo; Alberto Marín estaba totalmente desatado, saltando (e incluso tirándose alguna vez a la gente), cantando (además de haciendo coros) y recuperando una camiseta mítica de finales de los 90. De Luis Tárraga poco o nada se puede decir que no hayamos visto/leído de él. Conversa intacta la ilusión de una persona de veinte años, y lo demuestra interactuando con la gente, con una cercanía total. Después del trío de ases, dos felizmente recuperadas; una salvajada como ‘Quien cree que Raquel se suicidó’ y la emotiva y atmosférica ‘1998’. Aunque la emoción de ese álbum está claro que se la lleva un himno como ‘Antes y Después’. Más abajo, en el setlist, se puede ver el vídeo de ese momento tan especial y de algunos otros; y es que esta crónica intenta ser algo más multimedia de lo que suele ser habitual en esta web. Lo mismo ocurrirá en la de la noche siguiente, tocando entero ‘Syberia’; pero eso es otra historia.

‘Muérdesela’ daba paso a la segunda parte del disco. Quizá esa misma no sea vista de manera tan rara, porque en los últimos años sí la han tocado. Pero poder escuchar ‘Dónde duermo hoy’, ‘Mal’, Tan Simple como decir no’ y ‘La cabra’, montando un wall of death, es algo que no se ve todos los días. Temas de esos que tienen que ir dejando paso a otros más recientes, pero que una vez los recuperas suenan igual de frescos que en el momento que vieron la luz. Por desgracia, la mayor parte de mensajes que nos contaban entonces, no es que estén igual de presentes en el momento actual: lo están más. Ese es el único punto negativo que tiene un álbum como ‘Insomnio’. El final lo marcaba la potencia de ‘Odio’, antes de retirarse brevemente para volver con ‘Inferno’… o mejor dicho, con sus canciones más cañeras. La intro de ‘El mejor amigo de nadie’ nos sumergía en otro disco especial en su carrera. ‘Buena Suerte’ y ‘Mi Nombre es Yo’ ya tuvimos la oportunidad de escucharlas hace no mucho, pero volver a tener la oportunidad de ver cómo tocan ‘Lárgate Despacio’ y ‘Miserable’ fue una auténtica gozada. ‘Denuncio a Dios’ es otra más que habitual, y en esta ocasión Molly puso la sala a sus pies (literalmente) para incitarla a saltar en su tramo final. Hablando de saltos, Luis hizo unos cuantos en el escenario, pero también fuera de él; no podía ser en otra que en ‘Vivir es una Ilusión’, porque ilusión le sobra. Una nueva parada daría paso a la actual ‘Un mundo en pausa’, antes de poner punto y final con ‘Irracional’, el tema que lo empezó todo y para el que Molly se bajó para surfear entre decenas de brazos que lo llevaron de vuelta a su sitio. Al día siguiente nos volveríamos a ver. En breve, la segunda parte de la crónica.

  • Tortura Visión
  •  Tu Medicina
  • Dementes Cobardes
  • Quien cree que Raquel se suicidó
  • 1998
  • Antes y después (ver vídeo)
  • Muérdesela
  • Donde duermo hoy
  • Mal
  • Tan simple como decir no
  • La Cabra
  • Odio
  • El mejor amigo de nadie
  • Buena suerte
  • Mi nombre es yo (ver vídeo)
  • Lárgate despacio (ver vídeo)
  • Miserable
  • Denuncio a dios
  • Vivir es una ilusión
  • El mundo en pausa
  • Irracional

Varo ( varo@themetalcircus.com )

Promotor:Wilma Producciones

Asistentes:600

Día:12/04/2013

Hora:21:30

Sala:Rock Kitchen

Ciudad:Madrid

Puntuación:10