GETAFE EN VIVO FEST 2011

Casi setenta mil abonos vendidos. Con esta cifra, no se puede dudar que la segunda edición del Getafe En Vivo Fest ha sido un rotundo éxito. ¿El secreto? Un cartel que reunió a bandas estatales de las que siempre apetece volver a escuchar en directo, mezcladas sabiamente con la justa dosis de buen ska, un escenario solo para amantes del hip hop y el gran reclamo: The Offspring, ídolos de nuestros yos adolescentes. Eso y que el coste del abono de 3 días fue de solamente 35 euros, un precio anticrisis de los buenos, de los que no admiten un no.

Así, no es de extrañar que desde el mismo jueves por la mañana, los alrededores del recinto, situado junto al Cerro de los Ángeles de Getafe, fuera un auténtico hervidero de gente. Gente que a pesar de haber sufrido los típicos errores de manual de la organización (polvo, zonas de acampada y aparcamiento escasas, deficiente sonido…) vivieron el festival como si no hubiera un mañana, dándolo todo con cada grupo, en cada canción y hasta las tantas. Como debe ser.

El jueves comenzó suave en los tres escenarios que conformaban la propuesta de la organización. Del tercero, el más pequeño, no contaremos mucho en esta crónica puesto que estaba reservado casi en exclusiva a grupos de hip hop y a algunas bandas tributo a las que sí haremos mención.

En los otros dos, actuaron de forma alterna bandas de rock y mestizaje. Este primer día,  LA PULQUERIA, THE REBELS, LAS PELOTAS o OH MURRAY fueron los primeros que pasaron por el En Vivo, calentando el ambiente para unos pocas cientos de almas que ya habían comenzado su periplo festivalero. El verdadero subidón no vino hasta la aparición de LOS SUAVES. Basaron su repertorio en su último disco en directo, "29 años, 9 meses días y 1 día", es decir, un compendio de temas míticos como "Preparados para el Rock and Roll", con el que -como siempre- abrieron el bolo, seguido de "Sueños se van", “San Francisco Express”, “Palabras para Julia” y “Adiós, Adiós”, temas con los que pusieron a todos sus fans una vez más a sus pies. Porque "Los Suaves somos todos", y eso es y será siempre así, a pesar de que Yosi haga de las suyas intentando desnudarse en el escenario o balbuceando las letras sin entenderse ni a él mismo. "Malas noticias", "Dulce castigo" o "Mi casa"  tampoco faltaron, al igual que el entrañable y explosivo final con "El afilador" y "Dolores se llamaba Lola", por supuesto.

De MÄGO DE OZ se habla mucho y no siempre bien, pero lo innegable es que siguen teniendo la capacidad de poner a bailar a quienes tengan delante. Buena muestra de ello fue su actuación, en la que sonaron sus temas más festivos. Con “Gaia”, “Akelarre”, “Fiesta Pagana” o “Molinos de Viento” todo el público movió el esqueleto hasta el infinito y más allá, desde las primeras filas hasta los baños y las barras de bebida.

Y a continuación, un nuevo plato del menú, los británicos BAD MANNERS, quienes con su vigoroso ska conquistaron a muchos inexpertos en la materia. Su orondo vocalista, BUSTER BLOODVESSEL, se despachó a gusto sorprendiendo con su potente chorro de voz con temas como "Lip Up Fatty", "Can»t take my eyes off you" o "Just a Feeling".

THRASHTUCADA y su mestizaje fueron los encargados de cerrar el escenario grande del festival. De ahí, muchos trasnochadores se trasladaron a ver a A PELO, una banda tributo a PLATERO Y TÚ que se marcó un conciertazo muy fiel a los temas de la mítica banda de Fito donde no faltaron hits como “El roce de tu cuerpo” o “Juliette”.

Viernes 9, primer día "fuerte" del festival y muchas ganas de liarla pardísima. Bajo un sol infernal salieron los chicos de ÁNGELUS APATRIDA, quienes ya a nadie son desconocidos gracias a su sempiterna presencia en todos los festivales de renombre de la Península, amén de alguna que otra gira. Y si esto es así es porque lo valen. Guillermo, José, David y Víctor descargaron una tremebunda sesión de crudo Thrash Metal de corte exquisito en la que no faltaron ”Clockwork”, “Of Men And Tyrants”, dedicada a G.W. Bush y Tony Blair, "One Side One War", con la que ya se formó un súper pit entre el público, “Legally Brainwashed”, donde se armó un walking death multitudinario que casi acaba con alguno, y finalmente “Vomitive” y "Thrash Attack". La banda, tras su despliegue de ritmos frenéticos y afiladas guitarras, se despidió mandando recuedos a Benedicto XVI y sus JMJ.

De BENITO KAMELAS pasamos un poco para centrarnos en una apuesta segura, que nunca falla: MOJINOS ESCOZÍOS. Estuvieron especialmente fantásticos esta vez. El Sevilla se pasó la hora llamando a su técnico de luces con un "Ramóooon, enciéndeme la luz" para que el susodicho iluminara al público y así el orondo cantante pudiera ver cuántas chicas se atrevían a enseñar los pechos. Entre coña y coña dio tiempo a escuchar los temas más míticos: “!Qué bueno que estoy!”, “Soy guay”, “Me has disho borrasho”, “Mucho gay” o “Las niñas de la salle”. Una auténtica triunfada la de los mojinos que siguen tan cachondos y vitales como siempre.

De ROSENDO no se puede decir lo mismo. Pese a que es uno de los viejos rockeros más queridos y admirados del panorama nacional, parece seguir empeñado en hacer conciertos para jubilados. Se marcó una primera parte bastante aburrida basada en su no menos aburrido último disco. Al menos, después la arregló con una de leño, "Qué desilusion", y las de siempre “Flojos de pantalón”, “Pan de higo” o “Masculino singular” o “Maneras de vivir”. Un buen final que podía haber alargado. No obstante, le queremos haga lo que haga. Que para eso es Rosendo.

Tras otra sesión de ska a cargo de THE SPECIALS, nos centramos en el concierto de TOY DOLLS, un trío punk de lo más estrafalario que puso patas arriba el festival con nada menos que 23 divertidas y alocadas melodías, un buen repaso a su repertorio, en el que destacaron The Lambrusco Kid”, “Spiders In The Dressing Rooms”  o “Nelly The Elephant”. Y de ellos pasamos a dos bandas de gran renombre dentro de la música Indie y Funkie del país: LOS DELINQÜENTES primero y O Funkillo después. Pese a que no pintan mucho en una crónica sobre grupos de rock y metal, es de derecho decir que estuvieron ambos espectaculares, especialmente los segundos, con el magnífico PEPE BAO al bajo, se marcaron un conciertazo de órdago en el que no faltaron temas como “Riñones al jerez”, “El campito”, “Rulando”, “A jierro”…

La noche se alargaba peligrosamente,  sin darnos cuenta nos plantamos en las 3 de la mañana y aún quedaban BOIKOT y KOMA  por salir a tocar. Los primeros, geniales, entraron con “Inés” y ya no pararon de descargar éxitos para su público más fiel como “Tekila”, “Sexo Drogas & Rock n Roll”, “Grito en Alto” o "Hasta siempre comandante", que provocaron la formación de pogos aquí y allí. Cabe destacar que los chicos de Boikot quisieron homenajear al recientemente fallecido Rober de PORRETAS invitando a uno de los componentes de la banda al escenario.

Y para cerrar, Brigi y sus Koma, a quienes -apreciación personalísima- se les parecía notar el cansancio, pues no dieron el concierto más activo que se les recuerda. Quizá por la hora que era y el agotamiento colectivo, dio la impresión de que su actuación fue más apagada que las de los grupos anteriores. No obstante, ellos echaron la carne al asador con temas como "Sakeo" o "El marqués de Txorrapelada". Las primeras filas lo dieron todo, pero por detrás ya se veía a muchos grupos de gente abandonar el recinto… o aproximarse al escenario 3. ¿por qué? Porque nada menos que a las cinco y cuarto de la madrugada daba comienzo una de las mejores actuaciones del festival, de un modestísimo grupo llamado DE ACERO que versionan a Extremodro como nadie. Los fans de los extremeños fliparon en colores con la puesta en escena de esta formación sevillana. La voz de su vocalista es idéntica a la de ROBE INIESTA, y la música la calcan. Así, nos ofrecieron auténticos himnos como Deltoya, Puta, La vereda de la puerta de atrás, So payaso, Golfa, Jesucristo García o Ama y ensancha el alma entre otras. Fue un colofón espectacular para el día más intenso del festival.

Y con muy pocas horas de sueño nos plantamos en el sábado 10, último día del En Vivo. El polvo hace estragos porque la inmensa lona que acertadamente se ha usado para cubrir el suelo de tierra ya está rota por todas partes. Hay resaca, cansancio, tripas revueltas, ropa sucia y los baños están un poco desbordados de mierda. Pero da igual todo porque es el día de ver a THE OFFSPRING y muchas otras bandas ricas.

Poquita gente para ver el punk rock de los DIKERS, y mucha más para recibir a CELTAS CORTOS. Tendrán años y conciertos mejores y peores, pero sus melodías celtas de flautas y gaitas, su buen rollo y la sonrisa pícara de Cifu siempre son bienvenidas. La gente saltó y bailó con las de siempre "El emigrante", 20 de abril o No nos podrán parar, una verdadera dosis de energía positiva para enfrentarnos al resto del día, que prometía intenso.

A continuación, sin casi tiempo para beber un trago de cerveza, TXARRENA sonaba en el escenario contiguo. EL DROGAS salía vestido de pirata haciéndonos sentir a todos ridículos al presumir de la energía y ganas de juerga que tiene a pesar de los años que gasta. Su disco "Azulejo frío" suena exquisito en directo, gracias fundamentalmente al propio arte de este vocalista, toda una institución en la escena rock de este país.

A continuación, SÔBER, una de las bandas más mediáticas que tenemos, entró como un elefante en una cacharrería, dispuestos a darlo todo. El bolo se centró sobre todo en presentar su último trabajo, "Superbia" que parece que funciona bien a juzgar por la cantidad de gente que coreaba letras del tema del mismo nombre o de la balada Naufrago, pero también hubo tiempo para regalar los oídos con clásicos suyos del pelo de “La Nube”, “Eternidad” y “La Araña, Paradysso o Hombre de Hielo.

Los madrileños no se habían despedido aún pero una gran masa de publico se iba colocando lentamente frente al escenario contiguo porque estaba a punto de llegar el momento más esperado del festival: la actuación de THE OFFSPRING. Expectación, nervios, alegría contenida… Por algo se trata de la banda que ha puesto música a la adolescencia de muchos, muchos de nosotros, más o menos a las 70.000 almas reunidas allí como sardinas en lata. El tránsito se hizo imposible, la respiración, complicada… solamente detrás de las torres de sonido y en la zona de mercadillo se podía respirar un poco.

The Offspring aparecieron y la movida superó con creces las previsiones. Los servicios de emergencias se dejaron el presupuesto anual en mascarillas para combatir las nubes de polvo, y los servicios de seguridad tuvieron que emplearse a fondo en sacar a chicas desmayadas de las primeras filas. Incluso la barrera de contención entre el publico y el escenario cedió y hubo de ser apuntalada con una veintena de gruesas barras metálicas, obligando a la banda a interrumpir el show durante unos minutos. Pudo ser un caos pero por suerte la situación se controló. Y , pese a lo que diga la Rolling Stone de que los americanoa aburrieron, esta redactora y las personas con las que hablé durante y después del concierto discrepamos rotundamente.

Entraron a saco con "All I Want", como prefacio de los que nos esperaba. El respetable botó, hizo pogos, cantó y se desmadró en general con melodías como “You’re Gonna Go Far, Kid”, “November Song” y “Come Out And Play”. Sin poder respirar apenas por el polvo, hubo fuerzas para seguir a la banda con  “Have You Ever”, “Staring At The Sun”, “Original Prankster” y “Walla Walla”. Movimos provocativamente las caderas con Pretty Fly (For A White Guy)”, las camisetas y los zapatos volaron con "Hit That”, “Kristy, Are You Doing Okay?”, “Why Don´t You Get A Job?”, “Americana” (la mayoría de los temas salieron de este álbum), “ y “(Can’t Get My) Head Around You”.

Y es que sí, la banda sabía que quería escuchar el público español y cuando ya nos tenían sin aliento, sin ropa y sin dignidad, todavía nos ofrecieron más caña con The Kid’s Aren’t Alright”, “Want You Bad” y “Self Steem, con la que se despidieron dejando al personal jodido pero contento.

En este punto de la noche muchos emprendieron la retirada, pero otros tantos decidieron quedarse para recibir a LA FUGA. Ya no está Rulo y es innegable que nunca será lo mismo, pero los chicos de Reinosa se han montado un buen arreglo fichando a Pedro a las voces y a Raúl al bajo. Mención especial merece este último. Me pregunto por qué no cuenta como miembro oficial cuando luego en directo es el que más caña mete, el que más anima y el que más lo vive. En fin, el público de la fuga es fiel y no se perdió una actuación en la que no faltó una versión, esta vez la de “Juliette” de PLATERO Y TÚ, y por supuesto los clásicos de la banda “P»aqui p»alla”, “Majareta”, “Por verte sonreír”, “Buscando en la basura”, “Pedazo de morón”, “Jaleo”, “Los molinos”, “Heroína” o “No sólo respirar”, que a mi juicio siguen calando mucho mejor que los temas nuevos. Será cuestión de tiempo.

Tras La Fuga, y siendo ya muy tarde, aún hubo quien conservó energías para ver a THE LOCOS, el grupo que ha formado el ex SKA-P Pipi, que suena igual de divertido y fresco que la mítica banda de ska.

Y para esto dieron las fuerzas. No se puede dar una conclusión muy diferente a la de cualquier otro festival de este estilo. Como pros: el buen rollo, la buena música, los buenos recuerdos que nos llevamos todos, e incluso el ver que hay errores que poco a poco se van subsanando, como la idea de poner una kilométrica lona de plástico en el suelo para evitar que hubiera tanto polvo o el -otra vez hay que decirlo- buenísimo precio del abono.  Por contra: no dejamos de decir que hay mucho que mejorar a nivel de infraestructuras, previsiones y acondicionamiento en los festivales españoles, y este no va a ser una excepción. Pero también es verdad que los chicos de Last Tour nos han tratado muy bien. Y lo cortés no quita lo valiente. Oramos por una tercera edición del En Vivo en 2012, con más bandas y menos polvo.