Foscor llevan Barcelona a la oscuridad completa

Barcelona vivió un fin de semana realmente alucinante con los dos llenazos del tributo a Bathory y el de Foscor. Creo que con un concierto como el realizado esta gente ha dado un puñetazo sobre la mesa y ha dejado claro que nadie les ha regalado nada y que están a un nivel internacional.

Nuestro compañero Esteban Portero ya aviso en la crítica de “Those Horrors Wither” que el salto evolutivo y cualitativo de Foscor era más que evidente. Hacía falta reafirmar todas las expectativas en directo de esta ya veterana banda catalana, y os aseguro que así se cumplieron. Ya no entraré a entonar la misma historia de la falta de apoyo a la escena local porque esta gente está un peldaño o dos por encima. Son habituales del circuito internacional y su management internacional es el mismo que el de Mayhem, pero en tierras hispanas el metal extremo lo tiene más que crudo. No pintaban bien las cosas habiendo suspendido el día antes en Madrid y que ese fin de semana la oferta era inabarcable: Unisonic, tributo a Bathory (con 400 personas) y ese mismo lunes otro plato exquisito para todo amante de la música extrema. Pero salieron las cosas y más de 400 personas llenaron Bikini; una sala que siempre suena de maravilla.

Muy buenas vibraciones, un stand de merchandising muy visitado y amplias sonrisas vislumbraban una noche para el recuerdo; y así fue. Posiblemente para Foscor, en tierras catalanas, va a haber un antes y un después de lo acaecido ese domingo. Pero antes Dejadeath no dejaron pasar la oportunidad y demostraron que tienen muchísimas cosas que decir dentro de la escena extrema. Caerían sólo ocho temas, casi todos de su segunda obra “¡¡Viva Dios!!” Death metal técnico con retazos de thrash en “Force Fed Resistance” o “Purple Dawn”. Tremendo dinamismo escénico, melenas al viento y una pantalla trasera con un sinfín de imágenes críticas en la situación social actual. De verdad que el trabajo de edición y montaje era espectacular, y a veces, uno miraba más a la pantalla que al grupo. Entrega total en la que es la favorita de muchos: “Slow Demise”. Gran Groove, una base rítmica totalmente empastada y muchos detalles técnicos. El show intenso y aplastante dejó a más de uno boquiabierto especialmente con el final con “Another Pig into the Fire” y “Another Carnal Crack”, que contó con la participación de su excantante Andrew sobre las tablas. Gran ovación y la sensación de que el metal extremo va por el buen camino en estas tierras…

Llegó el momento de Foscor. Sabían que no era un concierto más pero los nervios no hicieron acto de presencia. Muchos años llevan ya sobre los escenarios, y eso se nota. Saltaron a escena con su logo de fondo y dando todo el protagonismo a su música al ritmo cambiante de “Whirl of Dread” y “Addiction”. Densidad compositiva de la mano de una mezcla muy personal de black progresivo y doom. El público estuvo sumamente respetuoso y atento, quizá demasiado a lo largo de todo el concierto, faltando ese punto de desatarse; pero su música es para degustar y dejarse llevar por la infinidad de atmósferas y detalles sombríos, tétricos… Un gran Fiar combinando voces limpias y guturales y dándolo todo en “Sensecència”, con un deje a Katatonia más que notable. Un placer ver a todo el grupo dejándose la piel, sobretodo en la labor de guitarras por parte de A.M. y Falke. Hubo un viaje al pasado de la mano de “Groans to the Guilty” y “The Smile of the Sad Ones”, demostrando que la evolución del combo barcelonés es más que consecuente y lógica.

“L.Amor.T” nos devolvió a su última obra. Un corte melancólico con un inicio con reminiscencias a Anathema y Opeth, pero que pronto se adentra en los terrenos más netamente blacks. A destacar las bellas melodías de las guitarras que en algún momento no terminaron de quedar todo lo lucidas que merecían por algún fallo de sonido. Esas guitarras constantes y trabajadas son uno de los sellos inequívocos del grupo. Y tras “Those Horrors Wither” llegaba el single: “Graceful Pandora”, con ese bajo incesante de Fiar y los detalles técnicos a las baquetas por parte de Nechrist. Puede que sea su tema más accesible, pero también es para muchos de sus fans el favorito. Corroborado por la enorme recepción de la audiencia. Fiar estuvo muy comunicativo y solemne cuando se dirigió al público y hasta agradeció a Obsidian Kingdom su participación en la composición de su última obra.

Momentos muy bellos y oscuros en “To Stangle a Ghost” y despedida final con dos de sus clásicos como son “Melangia” y “Tornà de les cendres”. Outro de despedida y rotunda ovación de un público entregado hacia una emocionada banda. No hubo bises pues había que cumplir el riguroso horario de la sala, pero sí que hay que confesar que nos quedamos con ganas de más. El grupo salió por la puerta grande, con éxito de público y con casi 200 CDs vendidos. Barcelona vivió un fin de semana realmente alucinante con los dos llenazos del tributo a Bathory y el de Foscor. Creo que con un concierto como el realizado esta gente ha dado un puñetazo sobre la mesa y ha dejado claro que nadie les ha regalado nada y que están a un nivel internacional. Lástima que cueste tanto en convencer a los de casa de tu valía. Y sino que se lo digan a Dark Moor o a Avulsed… ¡Nadie es profeta en su tierra!