Extreme no son una banda normal

Era una ocasión única de ver a Extreme tocando su mejor disco en un estado de gracia absoluto. No era barato, pero la noche fue maravillosa, pues estamos hablando de uno de los conciertos del año. Quien crea que Exteme son sólo “More tan Words”, que les vea en directo y luego hablamos. Noche de ensueño…

Las opiniones que nos llegaban del concierto de Extreme en el Hellfest eran inmejorables. Todo hacía presagiar un gran bolo por parte de estos monstruos del hard rock pues un show completo prometía de lo lindo. Las sensaciones generales de felicidad se palpaban en el ambiente, pero desgraciadamente la mayor de las Razz no se llenó como el show merecía. Había una parroquia bastante heterogenia. Gente que hacía más de una década que no asistía a un concierto de rock, y munchos fieles, especialmente fans del gran Nuno Bettencourt. En esta gira iba a caer todo el “Pornograffitti”, su disco más celebrado y el que les puso en boca de todos gracias a la celebérrima “More tan Words”. Tema que quizá les ha hecho más mal que bien, pues mucha gente no ve más allá de ese himno. Una de las baladas definitivas de la música en general.

Antes estuvieron descargando los brillantes Eldorado, banda de rock de la que teníamos como referencia su último “Paranormal Radio”. Gran obra, muy por encima de la media nacional, y que ganó sobre las tablas. Gran frontman, temas con pegada, mucha melodía y muy buena aceptación por parte del público. Son muy profesionales, no desentonaron para nada y metieron algunos pasajes a lo Black Sabbath que convencieron a los atentos asistentes. Cuando se despidieron lanzaron el clásico: “último tema y os dejamos con Extreme”… Eso hizo rugir al gentío, pero se les vio felices de cumplir bien con su cometido. Creo que se llevaron más de un fan a casa.

El telón de fondo mostraba al simpático niño-scout que protagoniza la portada del “Pornograffitti”. Muchos teníamos nuestra primera experiencia en directo con el grupo, y cabe confesar que el inicio fue estartosférico. Brutal inicio de “Decadence Dance” con toda la sala cantando los versos y Cherone entregado a tope. Cayó todo el disco de cabo a rabo, y el grupo fue de menos a más. Tampoco es que el sonido fuera el mejor, pero la entrega del combo de Boston y los detalles constantes de Nuno y Gary encandilaron a la concurrencia. Grandes “Li’l Jack Horny”, “When I’m President” y sobretodo “Get the Funk Out”. Los movimientos de Cherone son realmente muy deudores de David Lee Roth, por lo que ahora entendemos el por qué en su día los hermanos Van Halen optaron por el cantante de Extreme. Fue cuando las luces murieron y entró una guitarra acústica a escena cuando la gente rugió de lo lindo. Cayó el “More tan Words” y quedó preciosa. Un tema mágico cantado a medias por el público, pero Cherone atacaba los tonos más exigentes siempre.

Los coros creo que en algunos temas estaban sampleados, pero si no es así, estamos ante un grupo alucinante. Bettencourt y Pat Badger serían los mejores coristas del mundo. Iba a caer el que es para muchos el mejor momento del CD: “Money (In God We Trust)”, “It (’s a Monster)” y “Pornograffitti”. Excepcionales temas en los que los detalles por parte de toda la banda son constantes. Mención aparte merece Nuno. Hacía tiempo que no disfrutaba tanto de un guitarrista, y no es para menos. El chico ha estado tocando con Rhianna, por lo que como mercenario de las seis cuerdas está en lo más alto. A destacar también la labor de Kevin Figuereido en esos temas tan exigentes como son “Suzie (Wants her all Day What?) y “He Man Woman Hater” (grandioso Nuno). Antes Cherone se había despachado a gusto con la preciosa balada “When I First Kissed You”, una gran tonada siempre tapada por el peso de “More tan Words”. El groove que consigue el grupo es enorme, y esa base funk les da un toque diferencial respecto a la mayoría bandas de su generación y estilo. La otra balada que queda diluida en el disco es “Song for Love”, para muchos a la altura de “More tan Words”. Y el tramo final murió con la bellísima “Hole Hearted”, con esa acústica preciosa y esa deliciosa cadencia. Otra vez Cherone estuvo enorme y nos regaló algunas líneas de la maravillosa “Crazy Little Thing Called Love” de Queen. Todo un detalle.

Tiempo para los bises y para desgranar un poco de lo mejor de Extreme más allá de su disco emblemático. “Play with Me” fue la referencia a su primera obra. Entonamos la entrada a pleno pulmón y los detalles técnicos no se hicieron esperar. Y tras una vibrante “Rest in Peace” tocó el turno de uno de esos temas especiales como es “Am I Ever Gonna Change”, con protagonismo total para su guitar hero. Continuaria el festival de guitarra con “Midnight Express”, esta vez a acústica. Bien apoyado por Figuereido en las percusiones y llegando a momentos realmente bellos. El final fue de la mano de “Cupid’s Dead”, de su tercera obra. Un tema excelente para conseguir momentos jam y lucir músculo, groove y destreza técnica. Grandioso “grand finale” a la velada y enormes coros. Nuno tuvo otra dosis más de libertad creativa.

Gran despedida con vítores y aplausos. Era una ocasión única de ver a Extreme tocando su mejor disco en un estado de gracia absoluto. No era barato, pero la noche fue maravillosa, pues estamos hablando de uno de los conciertos del año. Quien crea que Exteme son sólo “More tan Words”, que les vea en directo y luego hablamos. Noche de ensueño…