EL SECUESTRO DE ANGELUS APATRIDA

Con la excusa de celebrar ante sus fans más cercanos la increíble posición número 14 que ha conseguido en las listas españolas su nuevo disco “The Call”, ANGELUS APATRIDA participaron en una curiosa promoción de la marca de bebidas energéticas Monster Energy Drink el pasado jueves en Barcelona. Se trataba de lo que llamaban un “secuestro”, aunque, claro está, bastante voluntario. Unas cincuenta personas, entre medios de prensa, fans y colegas de la banda fueron convocados en la puerta de la sala Razzmatazz de Barcelona a las 18:00h, donde embarcaron en un autobús con destino incierto. Fue allí, a mitad de camino estando en el bus, donde los organizadores del evento explicaron a los participantes que iban a tener que ser vendados para que no supieran hacia donde iba el vehículo y cual era su destinación final. Aunque alguno se quedó dubitativo, finalmente todo el mundo fue vendado hasta llegar a la localidad barcelonesa de Sant Boi, donde se encuentran las instalaciones de la marca de bebidas, incluido un amplio almacén. Allí, ANGELUS APATRIDA tenían montado todo su backline.

Alrededor de las 19:00h, un autocar llegaba a la puerta del almacén y de él comenzaban a bajar heavies de ojos vendados con paso irregular, hasta que alguien decidió que lo mejor era ayudarles a bajar y guiarles hasta la puerta del almacén de Monster Energy Drink, no fuera a ser que alguno se terminara rompiendo la crisma contra un bordillo o algún vehículo aparcado. Ciertamente, la estampa era graciosa: todos desubicados, buscando algo que no sabían que era y buscando una mano colaboradora que los situara. Las falsas subidas de bordillo de resultado nulo desataron algunas risas de los no-vendados.

Una vez dentro del recinto, en el más absoluto silencio, ANGELUS APATRIDA habían tomado posiciones ante sus instrumentos pues el verdadero shock estaba por llegar. Los organizadores contaron hasta tres para que todo el mundo se quitara la venda y, justo en ese momento, ANGELUS APATRIDA arrancaron un frenético “You Are Next” a volumen brutal y velocidad endiablada. Los vatios de sonido eran más adecuados para una sala de 1000 personas que para un almacén con resonancia considerable, pero el público se dejó llevar por la cascada de decibelios como si no hubiera mañana. En los primeros compases, todo el mundo era tímido, observando desde la distancia a la banda, pero al final del concierto, publico y banda terminaron siendo uno.

Guillermo Izquierdo saludó al público con su habitual sorna campechana: “¿Qué pasa, secuestraos?” espetó desde el micro. La banda tenía previsto hacer un set de media hora, al estilo del showcase de la sala Sidecar de finales de abril, pero la cosa terminó desbordándose hasta una hora, como era de esperar. El grupo tocó en su set principal temas como “Killer Instinct”, “At The Gates of Hell”, “Fresh Pleasure”, “Clockwork” y unas cuantas más. Luego, ya bajo petición del público a grito pelado, tocaron la gran “Give ‘em War”. A partir de ahí, el personal se resistía a dejarles marchar. Juli de CRISIX fue invitado a unirse a la banda y se marcaron incendiario “Be Quick or Be Dead”, que coronaron luego con un “Domination” de PANTERA para dejar las cosas en su sitio. Aún así, casi tuvieron que excusarse por tocar “solo” el doble de lo previsto, pero es que el grupo actuará en la ciudad Condal nuevamente a finales de septiembre, presentando ya oficialmente su gira de “The Call”.

Al final del show, era una pasada ver como los fans de la banda hacían pits en medio de un garaje o directamente montaban un pequeño crowdsurfing con Juli de CRISIX dándolo todo. Es un gran momento para el thrash metal y eventos como el vivido el pasado jueves así lo certifican. La banda, agradecida como siempre, se quedó un buen rato departiendo con fans y tomando unas cervezas, antes de liarse a recoger el equipo y cargar la furgona. Todo un ejemplo de tios trabajadores y dedicados a lo que les gusta que no pierden una oportunidad de estar cerca de su gente.