El lejano oeste llega a Hospitalet con Orden Ogan y sus rifles de serpentinas

Rock n’Rock nos preparó un trio de bandas para la noche del viernes que dejó a todos contentos. Como cabezas de cartel, ORDEN OGAN, cuyo estilo no es que resulte especialmente novedoso. Declarados seguidores de RUNNING WILD, los de Arnsberg combinan poderosos coros con la melodía y crudeza de las guitarras afiladas, consiguiendo una mezcla que sigue gustando al personal.

Siguiendo la estela de bandas como SABATON o POWERWOLF, los alemanes ORDEN OGAN han conseguido, al fin, liderar su primera gira, acompañados nada más y nada menos que por los canadienses UNLEASH THE ARCHERS y los italianos RHAPSODY OF FIRE. Un cartelón, sin duda. Y no lo hicieron en una sala cualquiera, todo lo contrario: la Salamandra fue la elegida, cuyos asistentes disfrutarían de lo lindo con el trio de bandas que Rock n’Rock nos preparó para la noche del viernes. El estilo de ORDEN OGAN no es que resulte especialmente novedoso. Declarados seguidores de RUNNING WILD, los de Arnsberg combinan poderosos coros con la melodía y crudeza de las guitarras afiladas, consiguiendo una mezcla que sigue gustando al personal. Nos venían a presentar su última entrega, «Gunmen» (2017), así que, ¿qué mejor manera para celebrarlo que convirtiendo el escenario en un fuerte vaquero, con rifles que iban a lanzar serpentinas llegados a cierto punto del concierto?

Antes de que el cabeza de cartel hiciera aparición, sin embargo, UNLEASH THE ARCHERS iban a dejar claro que ellos también tienen su público. Y es que la sala ya estaba bastante llena, al poco rato de abrir puertas, para verles. Liderados por la voceras Brittney Slayes, todo un portento con sus excelentes dotes al micrófono, llegaban hasta l’Hospitalet para presentarnos su cuarto álbum de estudio, “Apex” (2017). La frontwoman tiene una facilidad asombrosa para sostener los agudos, y eso gusta a la parroquia, así que se nos acabó metiendo a todos en el bolsillo. Temas como «Test Your Metal», «Cleanse The Bloodlines», “The Matriarch”, «General Of The Dark Army» o “Tonight We Ride” harían las delicias del personal, temas, algunos de ellos, acompañados por la contundencia de los guturales del guitarrista Grant Truesdell.

Y, acto seguido, turno para RHAPSODY OF FIRE. Alex Staropoli y los suyos, aprovecharon para conmemorar con sus seguidores los veinte años de «Legendary Tales» (1997), dejando muy buen sabor de boca. La marcha de dos estandartes, como el guitarrista Luca Turilli y el vocalista Fabio Lione, dejó al teclista, Mr. Staropoli, como único representante de la formación original. No por eso tiró la toalla, resurgiendo de sus cenizas con una gran banda y, sobre todo, con un excelente vocalista como es Giacomo Voli. Los italianos vuelven a picar piedra. Tras años liderando sus giras, ahora venían como teloneros… No por eso recibieron menos apoyo por parte del público. Los de Trieste abrieron la veda con la más reciente “Distant Sky”, para luego empezar con la retahíla de clásicos. No faltaron “Dargor, Shadowlord Of The Black Mountain”, “Flames Of Revenge”, “Dawn Of Victory” o “The Magic Of The Wizard’s Dream”, ese espectacular medio tiempo baladístico que dedicaron a la figura de Sir. Christopher Lee.

Con cierto parecido, en escena, a nuestro querido Juli “Bazoka” (CRISIX), Voli ha resultado un auténtico acierto para ocuparse del micro. El vocalista no para en todo el concierto, asumiendo con solvencia esos temas de RHAPSODY OF FIRE que precisan de una gran exigencia. Giacomo ni se inmutó con temas de la talla de «Holy Thunderforce», yendo sobradísimo al interpretar cortes como «The March Of The Swordmaster», u oscureciendo su voz para afrontar «When Demons Awake», sin quebrarla en el intento. Sin lugar a dudas, orgulloso puede estar Staropoli de su “fichaje estrella”. El colofón definitivo, como no podía ser de otro modo, llegó con el himno power metal por excelencia: “Emerald Sword”. ¡Temón infalible!

Y ya por último, tras el gran concierto de RHAPSODY OF FIRE, salían a escena ORDEN OGAN, comandados por Sebastian ‘Seeb’ Levermann (voces y guitarra). Con un cuidado atrezzo, los alemanes saludaban al respetable cual cowboys del lejano oeste. Aprovechando la temática conceptual de “Gunmen”, el cuarteto puso en escena una atractiva decoración, con un par de esqueletos a los lados empuñando un rifle cada uno. Empezaron con “To New Shores Of Sadness” y un “F.E.V.E.R.” que cayó pronto, deleitando al personal sobradamente. Seguidamente, turno para «Here At The End Of The World», antes de adentrarse en su nueva obra, precisamente con el tema homónimo; “Gunman”, culminado con dos disparos de serpentina. Sin dar descanso a nadie, ORDEN OGAN enlazaban las canciones de su discografía más reciente. De tal modo, unirían “Deaf Among The Blind” con “Sorrow Is Your Tale”, para luego dar paso al más reciente “Fields Of Sorrow”. “Lords Of The Flies”, por su parte, nos llevaba al pasado de nuevo.

Los de Arnsberg demostraron creer en su nueva obra a pies juntillas, por lo que, a mitad de concierto, encadenaron tres temas seguidos del mismo; “Come With Me To The Other Side”, “Forlorn And Forsaken” y “One Last Chance”. Aquí se llegó a completar el primer tramo del concierto. Ya llevaban una hora, pero la gente pedía más, así que turno para la tabernera “We Are Pirates”, justo antes de que a Sebastian ‘Seeb’ Levermann le diera un contagioso ataque de risa al hacerse un lío con las palabras que nos pedía cantar en el estribillo de “The Things We Believe In”, canción que volverían a acompañar de otra lluvia de serpentinas que dejó la sala bien colmada de “lianas”. A la postre, ORDEN OGAN elevaban victoriosos sus brazos para dejar constancia, frente a la cámara, de la gran acogida que recibieron en l’Hospitalet. Tocaron aproximadamente hora y veinte minutos, lo suficiente para dar el broche a una triunfal velada de power metal.