Otros que no faltan a su visita a Barcelona. Si mi maltrecha memoria no me falla, DARK TRANQUILLITY vienen pisando la Ciudad Condal en cada una de sus giras desde hace por lo menos 15 años. Recuerdo verlos tras la edición de «Haven» en la extinta Sala Garatge en un cartel compuesto por ellos, IN FLAMES, SENTENCED y TO/DIE/FOR, hace más o menos esa burrada de años. A diferencia de sus flameados compatriotas, las huestes de Mikael Stanne siguen practicando un estilo muy ajustado y equilibrado en cuanta a calidad y coherencia evolutiva. Vaya, que pocas bandas pueden alardear de seguir editando discos interesantes 20 años después de su formación sin haber cambiado drásticamente de estilo. Sí, le han añadido nuevos matices, faltaría más, pero su propuesta sigue siendo en esencia la misma.

En esta ocasión venían teloneados por los noruegos TRISTANIA, una banda que se ha ido desinflando más y más con el paso de los años y que ha llegado a demostrar una incapacidad creativa preocupante en algunos momentos de su carrera discográfica. Sin duda, gran parte de la esencia de la banda se evaporó con la salida de Morten Veland. Y de eso han pasado ya 13 años. Tan sólo tenéis que escuchar sus dos primeros discos, «Widow’s Weed» y «Beyond The Veil» para daros cuenta de lo que hablo. Que conste que no soy muy dado a esa tendencia estúpida de vanagloriar los primeros pasos de los grupos y a denostar el resto de su carrera, algo que muchos parecen hacer de forma metódica. Pero creo que en este caso clama al cielo. Sea como fuere, tenía bastantes ganas de ver a TRISTANIA, a pesar de que los escasos directos que he visto de la banda han sido más bien flojitos, por el cariño que les tuve en su día. Lamentablemente, terminó siendo imposible debido a lo que considero que fue un problema de organización, ignoro si por parte de sala o promotor: al mismo tiempo que se producía la apertura de puertas, se producía la apertura de taquilla, ante la que había una enorme cola que nunca había visto en la sala Salamandra 1 y que permanecería prácticamente inmóvil durante un período considerable. Para más inri, las acreditaciones también se recogían en taquilla, y no en puerta, como viene siendo habitual, algo que extendió el problema a todos los acreditados de prensa.

Así pues, tras media hora en la cola de entrada, pudimos acceder al interior de la sala, que registró muy buena entrada. Tan sólo pudimos ver los dos últimos temas de TRISTANIA, que se encontraban haciendo un show bastante decente, mejor de lo que me esperaba, y con una buena calidad de sonido. A la banda se la ve más movida que antaño, algo en lo que influye la actitud de su cantante italiana Mary, que mantiene un buen feeling con el público gracias a su desparpajo y raíces latinas. Con tan sólo nueve temas interpretados, dieron un pequeño repaso a su discografía más reciente, recuperando únicamente el tema «Beyond the Veil» de las épocas más pretéritas. Nosotros presenciamos los dos últimos cortes de su descarga, «Exile» y «Requiem», que sonaron francamente bien. Eso sí, no parecieron casar demasiado con los intereses de un público que venía esperando unas dosis de caña más acentuada.

«Construct» es un disco 100% DARK TRANQUILLITY que recoge aspectos de todos los pasados lp’s de la banda, algo así como un collage definitivo y bien empastado. Aspecto este que nos aseguraba una buena recepción por parte de un público encantado y con un poco de suerte un set list sin altibajos. Y así fue, una selección de temas espléndida, muy equilibrada y una interpretación fiel que además gozó de un sonido sensacional. Con todo ello de cara, era difícil que los de Göteborg decepcionaran, máxime teniendo en cuenta el gran directo que tienen, que sólo he visto palidecer tímidamente en algunas apariciones en festivales a horas nada propicias y con un sonido modesto. Lo suyo es reventar las salas y eso es lo que hicieron esta noche. Y a pesar de los «peros», que los hubo. Nada más comenzar el show con «The Science of Noise» y «White Noise/Black Science» nos percatamos de que la banda ha saltado a escena sin bajista. ¿Dónde estaba Martin Heriksson? A día de hoy todavía desconocemos el motivo de su ausencia. Teniendo en cuenta que en algún momento en el pasado hemos llegado a ver a la banda con hasta 3 guitarristas en escena, el escenario parecía incluso vacío para tratarse de DARK TRANQUILLITY. Como es obvio, al sonido le faltó un punto de empaque debido a esa ausencia en la base rítmica, lo cual no resultó óbice para que disfrutáramos de una descarga de lo más potente. Da gusto ver a Mikael Stanne desenvolverse en la actualidad tan bien con las voces limpias, que sin ser nada del otro mundo, quedan francamente bien en el contexto de los temas. Recordemos que años ha, nunca interpretaba líneas vocales limpias en directo. Un punto positivo muy a tener en cuenta, como pudimos comprobar en cortes como «What Only You Know» o la genial y clásica «ThereIn», de esa obra maestra que abrió los ojos a muchos que hasta ese momento no le habían prestado atención a esta banda, «Projector».

Tras la batería fueron proyectadas imágenes que ayudaban a dar bastante juego visual al asunto, ya fueran videoclips en caso de haberlos (como en «Monochromatic Stains») o animaciones, dibujos y montajes especialmente diseñados para la ocasión, todos ellos con un aspecto bastante homogéneo e inquietante, en la línea de las ya conocidas ilustraciones de la banda. Sin duda, la mano de Niklas Sundin (guitarra) ha ayudado a enriquecer de imaginería visual al grupo, más allá de las seis cuerdas. Con un playlist muy estudiado, encandilaron a la audiencia de principio a fin: «Zero Distance», «Silence, and the Firmament Withdrew«, «Terminus (Where Death Is Most Alive)«, «Final Resistance», «Misery’s Crown»… algunos de los mejores temas de sus diversas épocas, teniendo incluso tiempo de sorprender con otros poco habituales y que consiguieron que más de un viejo fan soltara un chorretón de adrenalina de golpe, caso de «A Bolt of Blazing Gold» del disco «Skydancer» o «Lethe», esa bella pieza de la que para muchos es su obra cumbre, «The Gallery». Por otro lado, y para mi sorpresa, no tocaron «Punish My Heaven», el tema más conocido de los suecos, que había sido un fijo en los set list hasta la presente gira. La cantante de TRISTANIA, Mary, también aportó otra nota de versatilidad al show saliendo con la banda a interpretar las líneas vocales femeninas de temas como el ya citado «A Bolt of Blazing Gold» o «Undo Control». En cuanto a presencia escénica y comunicación, de nuevo Mikael no paró de derrochar esa simpatía y buen rollo que le caracteriza. Desde que vi a la banda por primera vez hace muchos años, siempre me quedé con ese punto bastante impactante, el cómo un cantante es capaz de realizar unos guturales de esa naturaleza y al mismo tiempo no perder la sonrisa a lo largo del show. Desde luego la banda en directo no sería lo mismo sin la singularidad de su frontman. Uno de los conciertos más amenos que uno se puede echar a la cara, de la mano de una agrupación que se hace querer con esa mezcla única de death melódico y melancolía. Un directo de alto nivel que se pasó volando como pocas veces ocurre, pese a quien le pese, pues a la salida del mismo vi disparidad de opiniones. Para mi, sobresaliente.

Promotor:RRS Promo y Eclipse Group

Día:2013-11-15

Hora:20:00

Sala:Salamandra 1

Ciudad:Hospitalet de Llobregat (Barcelona)

Teloneros:Tristania

Puntuación:9