El pasado viernes 30 de octubre tuvo lugar en LLeida un acontecimiento diferente en lo que a Rock y música se refiere. Aprovechando un espacio cultural extraordinario como es el auditorio de La Llotja, cuya agenda suele estar plagada de obras de teatro, ópera, danza y musicales de variados estilos, el público de la comarca tuvo la oportunidad de presenciar esta vez un espectáculo tan inusual y visionario como es HISTORY OF ROCK, donde un plantel de artistas de calibre internacional y de enorme calidad repasaron la historia del rock and roll sirviéndose de un buen repertorio de canciones consideradas ya clásicos conocidos por el gran público.

El pasado viernes 30 de octubre tuvo lugar en LLeida un acontecimiento diferente en lo que a Rock y música se refiere. Aprovechando un espacio cultural extraordinario como es el auditorio de La Llotja, cuya agenda suele estar plagada de obras de teatro, ópera, danza y musicales de variados estilos, el público de la comarca tuvo la oportunidad de presenciar esta vez un espectáculo tan inusual y visionario como es HISTORY OF ROCK, donde un plantel de artistas de calibre internacional y de enorme calidad repasaron la historia del rock and roll sirviéndose de un buen repertorio de canciones consideradas ya clásicos conocidos por el gran público.

The Metal Circus no nos quisimos perder semejante evento, replicado en tierras catalanas sólo en Tarragona, y que continuará girando por todo el país hasta finalizar en Las Palmas de Gran Canaria, a mediados de Enero del 2016. Un testigo del que hemos querido dejar constancia ya que como web especializada somos consciente de que el impacto mediático de este tipo de espectáculos va a llegar a sectores de la sociedad muy diversos y tendrá un arraigo en la cultura local de las varias provincias que está visitando.

Esta original fórmula de hacer llegar lo mejor del «Rock de estadios» a audiencias poco habituadas a acudir a conciertos en directo, permite gozar de la comodidad de la butaca en un elegante anfiteatro a la par que deleitar el oído con una exquisita acústica, rememorando los buenos viejos tiempos – o no tan viejos- con un espectáculo sólido, calibrado por grandes artistas y profesionales a quienes respalda la experiencia de haber formado parte de diversas bandas foráneas. Una excelente manera de hacer historia y de formar, también, en la leyenda del rock a los asistentes más noveles. La presencia entre el público de niños y jóvenes y de personas mayores fue un claro indicador de que el Rock no está reñido con las generaciones y que un cartel como History of Rock puede tener una acogida más que exitosa y exportable, cuando prevalece la calidad, entre un público familiar pero abierto de miras.

La iniciativa, no obstante, no es nueva. La promotora Moon World Records, con base en Madrid, ya nos trajo por diversos teatros nacionales en pasados años otros espectáculos similares – aunque centrados en bandas concretas – como Rhapsody Symphony of Queen o Symphony Abba bajo la premisa del respeto a los originales sin caer en el mero tributo o la imitación facilona, contratando para ello a intérpretes de magnitud internacional rodados en sus propias bandas y giras, y a avalados músicos de sesión.

Con History of Rock, Lleida tuvo pues una excelente oportunidad de concentrar a un público variopinto, de todas las edades y condición, poco acostumbrado a exaltarse o a corear los temas pero que, aunque inicialmente tímido, comenzó a sumarse con vítores y coros durante las más de treinta canciones que se escucharon en la sala.
Un repertorio que nos llevó de la mano desde los mismísimos orígenes del Rock and Roll de los años cincuenta con canciones tan emblemáticas como “Johnny Be Good» de Chuck Berry o la icónica “Great Balls of Fire» de Jerry Lee Lewis, o la redonda “Proud Mary” de la Creedence Clearwater Revival (y que luego Tina Turner la hiciera universal con su «rolling, rolling on the river«), entre un sin fín de hits de otras tantas bandas, en una progresión que nos recordó lo mejor de las décadas sucesivas: Rolling Stones, The Beatles, Led Zeppelin, Deep Purple, Boston, Bruce Springsteen, U2, Pink Floyd, Ramones, Bon Jovi, Tina Turner, Van Halen, Dire Straits, Metallica, Gun’s & Roses, AC/DC, y un largo etc. hasta completar un espectáculo de tres horas de duración, con intermedio. Pasar de un “The Wall” a un “Jump», de una “It’s my Life” a un “Smoke on the Water”, hace predecibles el resto de títulos y es que aquí la sorpresa no estaba tanto en la obvia elección de las canciones como en la afortunada y más que profesional interpretación de las voces del alemán Tommy Heart (Fair Warning, Uli Jon Roth, Soul Doctor), del británico Tony Mills (TNT, Shy, Serpentine, Siam), de la polifacética diva neoyorkina Miss Michele McCain (conocida en nuestro territorio por haber colaborado con La Orquesta Mondragón pero a la que avalan innumerables colaboraciones con BB King, James Brown y un largo etcétera) y del español Pablo Perea (La Trampa), quien también aportó la guitarra a algunos de los temas. La música, en vivo y en directo, estuvo a cargo de otros no menos bregados músicos de sesión (guitarra, bajo, batería, teclados y saxo) y dos voces femeninas que daban la réplica en los coros y alguna ocasional coreografía, conformando  todos ellos un elenco de 12 artistas.

A destacar la puesta en escena y la luminotecnia, así como el decorado, minimalista en un principio, simulando una calle con un edificio por cuya puerta nos iban apareciendo los cantantes solistas pero que luego se transformó mostrando el interior de una sala de conciertos con diferentes niveles donde se ubicaban los músicos y las coristas. Una guitarra eléctrica de grandes dimensiones flanqueaba las escaleras por las que subían o bajaban los cantantes quienes en solitario, a dúo, en trío o al completo, nos desgranaban las canciones, cambiando el vestuario y adaptándolo a los tiempos y estilos.
Nos sorprendieron con algunas incursiones al patio de butacas, interactuando con el público y buscando su complicidad, así como con el apoteósico final al son de un hit de The Beatles (justo después de un animadísimo Highway to Hell de AC/DC) mientras los cuatro intérpretes abandonaban el escenario subiendo por las escaleras del anfiteatro y estrechando la mano al rendido público, puesto en pie y aplaudiendo.

Tras finalizar el concierto los asistentes podían pedir firmas, comprar el CD de la gira y posar con los cuatro intérpretes en un photocall para completar la experiencia y marchar a casa con la sensación de haber hecho un entretenido viaje a lo largo y ancho de la historia del rock.

Por expreso deseo de la promotora no podemos reseñar el listado íntegro de temas ya que ello forma parte de la sorpresa del espectáculo, además de que es probable que el repertorio varíe sensiblemente en otros emplazamientos. La única pega que le pondría al History of Rock es la ausencia de temas clásicos del Heavy Metal (como alguno de Iron Maiden o de Judas Priest) Me habría encantado escuchar también algún tema de Janice Joplin, de The Who, o de Iggy Pop, por poner algunos nombres que encontré a faltar, aunque es obvio que eso obligaría a alargar una hora más la actuación.

Sí me permito destacar como lo más sobresaliente de este evento las voces impecables, versátiles y personalísimas de sus cuatro cantantes, su entrega sobre el escenario y su capacidad para conectar con la audiencia sin necesidad de mediar palabras o presentaciones, así como la excelente guitarra de Niki Indjov y el solo de saxo de Lolo García.

¡Un lujo haber presenciado semejante derroche de calidad!

Promotor:Moon World Records

Día:2015-10-30

Hora:21:00

Sala:La Llotja

Ciudad:Lleida

Puntuación:8